⭐ Capítulo 29 ⭐

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—No puedes quedarte, tienes que ir y vivir tu vida. Solo tienes dieciocho años aún tienes mucho por hacer.

—Tu también tenias mucho por vivir, tenías sueños que cumplir y yo los arruiné. —Me aferre a la sudadera gris, la misma que tenía el día del accidente.

Aún así, yo no te culpó las cosas pasan por algo y yo quiero que tu vivas por mi y por ti.—Eso era injusto, no podía pensar en otra cosa más que quedarme a su lado.

—Me odio a mi misma, ¿ quieres que siga viviendo en un infierno?—Lo miré a los ojos con todas las lágrimas escurriendo por mis mejillas.

—No..—Dijo casi audible. Miró el piso por unos segundos, hasta que alzó la mirada y me tomó por los hombros.—¿De verdad quieres quedarte y dejar a papá sólo con ganas de pedirte disculpas?

—No hace falta que me diga nada, yo ya lo perdoné él lo sabrá cuando Tania regresé a su cuerpo.

—Sigo sin poder aceptar que quieres quedarte.

—Quiero estar aquí, que papá se quedará con arrepentimiento pero le haré saber que no hay resentimiento. —Medio sonrei para él, con sus pulgares limpió mis mejillas y me envolvió en sus brazos.

—¿Este es el reencuentro definitivo? ¿Para siempre?

—Para siempre.

Dos Almas Un CuerpoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora