capitulo 3

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Capítulo 3

-¡De… acuerdo! –esto es lo más loco y sin sentido que jamás he escuchado- ¿Me podrías explicar más sobre esto?

-Tu tenías un ángel guardián antes que yo –comenzó- pero era un poco resentido, cuando te dejaste llevar por el vicio y la depresión, cuando te empezaste a dañar, decidiste hacerle caso al tu lado oscuro, a lo que acostumbramos a llamar tu ángel negro, él te ha estado guiando todo este tiempo. En lo que me asignaban a alguien, tu ángel llego y me ofreció tu vida y la acepte. –me miro, tan fijo que sentí como su mirada penetraba cada centímetro de mi cuerpo y como tenía la boca atareada de comida, le pregunte en mi mente “¿Tuviste que investigar sobre mí vida?”, es impresionante que me pueda leer la mente, o pues eso creo que hace- Cada ángel sabe todo sobre cada persona en el mundo.

-¿Cómo se llama?...ya sabes, mi antiguo guardián –lleve el vaso con jugo de naranja a mi boca y trague un sorbo, estaba tan fresco y dulce, simplemente delicioso.

-Su nombre es Ryan, somos amigos desde que tengo memoria como ángel.

-¿Acaso nunca fuiste un ángel?

-Nunca he sabido exactamente bien como es el origen de los ángeles, pero lo que me cuentan los ángeles más viejos, es que éramos vidas a punto de llegar al mundo y que no lo lograron o vidas que no alcanzaron a cumplir su misión en el mundo por algún motivo.

-¿Incluso si te suicidas? –esto era verdaderamente interesante y exaltante a la vez, un mundo completamente desconocido para mí.

-El atentar contra la vida propia o de alguien, es algo totalmente distinto –me miro, fijo de nuevo y más profundo- nadie puede atentar contra su propia vida o la de alguien más, porque simplemente no les pertenece.

-¿Cuánto tiempo llevas como ángel y porque? –espero no me moleste mi repentino cuestionario, es solo que esto es lo más interesante y extraño que me ha pasado, pienso que aún sigo en un sueño…un muy real y profundo sueño.

-No me molesta, no te preocupes –me sonríe y pienso de nuevo, no hay sonrisa más prefecta que la de él- Lo que puedo recordar de mi vida humana, fue en la primera guerra mundial – wow, es algo viejo, mi ángel- la guerra empezó en 1914, cuando yo tenía diez años, en el pueblo en que el vivíamos, callo una bomba y de él solo quedaron ruinas, todos murieron incluso yo.

-¿Pero por qué creciste?, me digo… –esto es lo más confuso que he escuchado- se supone que cuando mueres, te quedas tal y como falleciste ¿no?

-En algunos casos, algunas personas mueren porque ya era su tiempo de morir, pero algunas mueren antes de lo esperado y dónde sea que queden crecen hasta la edad en la que debieron morir.

-¿A qué edad debiste morir tú?-me siento hablando con un fantasma, es sinceramente lo más raro de toda la vida, pero no, estaba hablando con un ángel…mi ángel guardián, ¿Quién se daba esos lujos?, exacto, nadie.

-A los veintitrés.

-¿Y ya los terminaste de cumplir?

-En un par de meses.

-Esto será raro de preguntar, pero…-tenía que hacerlo, la ansiedad no me la puedo contener tanto tiempo- ¿Te atrae alguien? me explico, ¿Los ángeles pueden tener su propia familia y esas cosas? ¿Cómo una relación?

Mi GuardiánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora