capitulo 19

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Capítulo 19

Despierto y Justin me tiene atrapada entre sus piernas enredadas con las mías y su brazo reposado por encima de mis pechos, quiero moverme para ir por un vaso de agua, volteo mi cabeza y me encuentro con su cara reposando pasivamente en mi misma almohada. Se ve tan hermoso y pacifico durmiendo…Tan hermoso y perfecto, el hombre…o ángel que yo amo y es solo mío.

Me muevo un poco y Justin se gira liberándome y dándome la espalda. Odio la idea de que se separe de mí, pero tengo mucha sed.

Me pare de la cama y mientras me coloco la camisa de Justin, siento algo diferente en mí; me siento adolorida y más liviana, me siento llena y con más movimiento en cada parte de mi cuerpo…Esto de ya no ser virgen en…curioso.

Camino y mis caderas se mueven más ligero que antes y siento que van de un lado a otro tan exageradamente; corro al espejo de pared al living y cuando estoy a dos metros de él, camino mirándome, y estoy caminando como siempre he caminado, solo que me siento tan diferente; me acerco completamente y miro mi cara, rosada y feliz, mi cabello despeinado y cogido en la cola de caballo que tenía desde el comienzo del día; me siento tan feliz…él me hace feliz.

Voy a la cocina y tomo agua de la llave; a Harry no me gusta beber de la llave y tampoco le gusta que alguien beba de la llave, pero estoy demasiado adolorida como para sacar agua del refrigerador.

—Vaya, vaya, vaya—La voz de Ryan se escucha, pero no lo puedo ver; me volteo y él está ahí, en la puerta de entrada del apartamento—Gran prueba, ________.

—Lo amo y sé que es mucho, es mi todo—dejo el agua y voy a él— ¿Te lo llevarás?

—Por más que me duela, no me lo llevaré.

— ¿Te duele?

—Tú también me gustabas _________.

¿Qué?

—Pero… tranquila—me dijo al ver mi mohín de duda y miedo—ya me interesa alguien más.

— ¿Nueva alma para cuidar? —le sonrío y el me da una sonrisa de respuesta.

—Se podría decir.

—Explícame—lo tomo de la mano y lo llevo a los taburetes de la cocina; él se sienta y yo me siento enfrente de él para seguir tomando mi vaso de agua. Levanto mi vaso de agua frente a él para preguntarle sí quiere y el mueve la cabeza a los lados.

—Ella aún no nace.

— ¿Cómo te puede interesar si no la existe aún?

—Nace en dos semanas, y sé que será la chica perfecta. Lo puedo ver.

—Eres un pedófilo—río y el ríe también.

—No me malinterpretes—me empuja suavemente del hombro—Tengo que cuidarla y por consiguiente esperar por ella.

—Eso es tener mucho valor y paciencia.

—El amor es así, __________.

Él es tan bello…sé que lo amo, pero no en la forma en la que amo a Justin…Con Ryan es un amor más de amigo o de hermano.

—Muchas gracias por todo Ryan—Cojo su mano entre las mías y la llevo a mis labios y doy tres besos al azar.

—Gracias a ti por creer en ti y en Justin.

Le sonrío y él se levanta. Lo sigo.

—Espero seas feliz con Justin—sonrío. Claro que lo seré.

—Y espero que tu seas feliz con…

—Olive. {Nota: se dice ‘Oliv’}

—Bueno…pues espero que seas muy feliz con ella.

Lo abrazo y el me rodea con sus brazos.

—Nos vemos _________.

Va camino a la puerta y pienso en algo que siempre he querido ver.

—Ryan.

El vuelve su cabeza hacía mí y me sonríe.

— ¿Podrías mostrarme tus alas? —continuo.

—Por supuesto. Ven

Nos dirigimos al balcón y él se para encima de la baranda.

—Ahora sí…nos vemos __________.

Extendían sus brazos y en un abrir y cerrar de ojos unas grandes, blancas y hermosas alas se abren paso por todo el contorno de su espalda. Eran tan hermosas, nada comparado con algo que haya visto jamás; las películas se convertirían en una mierda comparado con Ryan y sus magníficas y bellas…perfectas alas.

Cuanto me gustaría ver a Justin así… ¿Se habrá despertado ya?

Miro a Ryan y el me guiña el ojo y salta; corro a la baranda y veo como con un despliegue y un ágil movimiento ya está en la última planta del edificio, me agita la mano y lo veo desaparecer.

Mi vida tiene sentido y es hermosa ahora…Gracias a mis guardián, mi hombre y mi todo.

Gracias a él…volví a ver a mi amado hermano, mi héroe y mi inspiración. Gracias a él supe que el chico que pensé que sería para mí, era el hijo de puta más podrido de todos. Gracias a él encontré el amor de mi vida y no es nadie más que no sea él.

— ¿Por qué tan sola? —me abraza por mi espalda y me giro para quedar cara a cara.

¡Se ve tan hermoso!

Recién levantado y recién follado. ¡LO AMO TANTO!

—Justin…

—________...

—Te amo, Justin.

—No más de lo que yo te amo a ti.

Me besa y nuestras lenguas tiene esa pelean tan deliciosamente magnifica. Muerdo su labio y el sonríe.

—Mi ángel…mi guardián.

El hace un ruido de aprobación.

—Y eres solo mío.

FIN.

Mi GuardiánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora