35. How does a moment last forever?

386 27 11
                                    

— Entonces arreglaron las cosas — Preguntó Douglas refiriéndose al bajista una vez que había terminado de hablar acerca del libro de con la rubia.

— Así es — Dijo recogiendo sus cosas — También con Roger y Vanya tus consejos junto con los de Percy fueron de gran ayuda señor Branson.

— Solo soy unos años mayor que usted señorita Shellstrop — Rodeó los ojos — ¿A donde vas? — Preguntó viéndola muy apurada.

— Tengo un asunto pendiente con el pasado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— Tengo un asunto pendiente con el pasado. — Respondió Maggie.

— Suerte querida.

— Adiós Douglas.

Había pasado mucho y eso Margaret lo sabía, con ayuda de la secretaria de Douglas; Harriet, ayudó a la joven escritora a conseguir información acerca de su padre para poder contactarlo y así reunirse con él, desde el fallecimiento de su madre no sabía nada de el, bueno en general no sabía nada salvo que era su padre y aún estaba con vida, básicamente era el único familiar que tenía.

Llegó a la hora acordada al restaurante y se tomó asiento en una de las mesas que le habían indicado, no había muchas personas aún no era la hora del almuerzo. En lo que esperaba reviso algunos documentos en relación a su trabajo, Douglas planeaba la impresión de 50 copias más de libro debido a que esta última semana se había vendido por lo que tendría que hacer un nueva gira un poco más grande para promocionar el libro, además de trabajar con la precuela de este. Lo único que se animo a pedir fue un café a la espera de su padre.

— Tiene alguna idea de quien podría ser — Fue la voz de un hombre que hizo que Maggie dejara de hacer todo lo que estaba haciendo, guardará sus cosas y volteara al mirar al hombre de la voz que se sorprendió solo de verla.

— Hola padre — Dijo la rubia con una media sonrisa.

— Gracias — Dijo su padre al mesero, un hombre de cabello castaño con algunos rayos blancos causantes de la edad y ojos color avellana justo iguales a los de Margaret

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— Gracias — Dijo su padre al mesero, un hombre de cabello castaño con algunos rayos blancos causantes de la edad y ojos color avellana justo iguales a los de Margaret. Tomó asiento frente a su hija, suspiró, se quitó los anteojos y los colocó sobre la mesa frotó sus ojos y nuevamente se colocó sus anteojos — Exactamente para que me has llamado. Se te acabo el dinero, necesitas más. — Fue directo al grano con el único tono voz que la rubia había escuchado en su vida por parte de su padre, fría dura y con enojo.

It's a Hard Life || • John Deacon Donde viven las historias. Descúbrelo ahora