Capítulo 7

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- Sr Cipher ya hemos hecho todo lo que esta a nuestro alcance ya no hay nada que podamos...

- ¡No escuchame bien! ¡Yo he donado cuantiosas cantidades de dinero a tú Técnica de la Costa Oeste por años así que sólo quiero retribución y que hagan lo que les digo!

- L-lo entiendo, pero usted quiere lo imposible.

- Si, en eso tienes razón yo quiero todo e incluso lo imposible, te dare un mes más para que cumplas con nuestro trato o vete despudiendo de mi donación anual.

Colge el teléfono con gran fuerza para después dejarme caer sobre mi silla mientras dejaba salir un suspiro de fatiga. - Idiotas incompetentes. - Maldeci nuevamente justo cuando el reloj cucu de mi pared me comunicaba que ya eran pasadas de la medianoche lo que trajo con eso que mi estomago comenzará a gruñir por lo que decidí levantarme he ir por algo de comer.

El exterior de mi mansión se encontraba completamente en silencio y rodeado por la oscuridad total salvo por una pequeña luz que se colaba a través de la puerta del cuarto de Stan (ya que esta no se encontraba bien cerrada) al pasar junto a esta pude notar que aun se encontraba despierto y sorprendentemente se encontraba haciendo su tarea o como fuera que se le decía hoy en día, pero aparentemente se encontraba completamente consentrado en esta lo que era raro ya que según lo que recordaba "él" nunca había demostrado interes en algo que no fueran sus cosas lo que me llevo a entrar en su habitación la cual seguía igual que siempre hecha toda un desastre y sin olvidar ese asquero olor a calcetines sucios y sudados que siempre predominaba en aquel lugar lo que me obligaba a aguantar la respiración.

- Hola hijo. - Me puse atras de él. - ¿Qué tal tú primer día?

- Hola pa, bien así me fue. - Respondió sin siquiera voltear a verme.

Aquella respuesta me molestó por lo simple y seca que fue sin mencionar que no me miro ni una sola vez (muchacho insolente) fue lo único que pense y de igual manera un gran deseo de golpearlo surgió en mi interior y todo por aquella insolencia, pero logre mantener mi calma y proseguí con nuestras "supuesta conversación" padre e hijo si es que se le podía decir de esa forma.

- Me alegra escuchar eso y dime Stan ¿Ya tendras un amigo o una... novia?

Aquella pregunta pareció incomodarlo ya que de manera repentina dejo lo que estaba haciendo para voltear a verme.

- ¿Se te ofrece algo pa? - Más insolencia por su parte con ese modo de preguntar las cosas. - Ya que tú nunca te interesas por mis cosas.

En eso tenía razón yo nunca me intere en él, pero desde que mi esposa había muerto todos los empreados comenzaban a hablar de mi falta de cariño para con mi "hijo" y aun cuando fácilmente podría ignorar todas su palabrería y chismes chismosos (que buen juego de palabras Bill) no podía darme el lujo de correrlos y que luego hablarán pestes del gran Bill Cipher el magnate hombre de negocios y dueño de la mayor economía del país.

- Si tienes razón Stan he de reconocer que nunca fui un padre muy amoroso, pero aun así no soy un insensible como tú y todos creer.

- Yo nunca dije que fueras insensible simplemente nunca te interesaste en mis cosas ya que...

- A tí te gusta la vida de los pobles y no la de los ricos ya me lo has dicho por muchos años.

- Si, y no me cansaré de decírtelo. - Se volteó. - Ahora si me disculpas tengo tarea que hacer.

- ¿Tarea que hacer? En sierta forma suena gracioso eso ya que tú nunca le has prestado atención a nada que no sea de tú agrado o interes personal como aquel gustito tuyo.

- Si ya terminaste de menos presiarme quiero que te vayas ¡Ahora!

- Esta bien me retiró, solo no te quedes despierto tan tarde.

Salí de aquella habitación agradeciendo de antemano el poder respirar aire limpio para enseguida proseguir mi camino a la cocina en donde me tope con el chef (cuyo nombre no recordaba y no me interesaba aprender) al cual le ordene que me prepara algo para cenar a lo que él asintió sin rechistar mientras que yo me dirigí al comedor y me sente en la primera silla que encontre sercas  para enseguida dejarme caer sobre ella. Mientras intentaba tranquilizar mis pensamientos (los cuales en su mayor parte se dirigían a mi insolente hijo) una brisa helada y sobre naturar hizo su presencia lo que me decía que "él" estaba aquí. - Vaya, vaya, vaya nunca me imaginé que pudieras tener un hijo tan insolente como ese Stanley, realmente es una deshonra para el apellido Cipher. - Dijo aquella voz burlona y algo aterradora, pero de alguna manera muy reconfortante para mi.

- ¿Viniste solo a quejarte de mi hijo o por "aquello" en sí?

- Me atrapaste, si en verdad solo vine a ver como va el avance de nuestro proyecto Bill.

- Lamentó decirte que va mal ya que los idiotas que están trabajando en "eso" no pueden comprender los datos y planos que me entregaste.

- Eso es de esperar si contratas "monos" para este trabajo, lo que realmente necesitamos son verdaderos genios que puedan entender aquello que no se puede.

- ¿Y como haremos eso? Ya tengo trabajando a las mejores mentes.

- ¡Mientes, solo tienes a las mejores mentes de tú país, estado o como quiera que se llame! ¡Necesitas encontrar más genios en el resto del mundo y rápido o de lo contrario buscare a alguien más para compartir todo este conocimiento y... poder!

- ¡NO! - Grite con gran fuerza que pude escuchar mi grito por varios minutos. - ¡Tú me lo prometiste y cumpliras con esa promesa!

La brisa helada parecía haberse desvanecido junto con aquella presencia lo que provocó que mi mal humor regresara al instante. - Señor aquí traigo su cena. - El chef entro al comedor junto con lo que sería mi cena la cual mire por unos segundos. - Puedes comertela ya no tengo hambre. - Me retire del comedor y regrese a mi laboratorio en donde me dirigí directamente hasta una pared cubierta por una sábana la cual al momento de retirar deje a la vista un mural de roca en la cual se podía apreciar claramente la imagen de un triángulo con un solo ojo tallado directamente sobre la roca fría. - Tú... tú me daras todo ese poder así tenga que arrebatartelo o tenga que sacrificar a todo el mundo para obtenerlo.

Stanford y Stanley una historia de amor (Stancest) Temporada 1 RE EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora