Capítulo 14

309 19 5
                                    

Realmente me hacía falta verlo, para mi "él" era como una droga que necesitaba para poder sobrevivir, era el aire que llenaba mis pulmones, era la luz que iluminaba este mundo burdo, era el único que podía llenar este vacío en mi interior... no en mi corazón, "si" eso era para mi Stanford la persona con la cual quería estar el resto de mi vida, pero que al mismo tiempo temía confesar mis sentimientos por el simple hecho de obtener su rechazo y perderlo para siempre. - ¡Stanley cuidado! - El grito de advertencia de Fidds me hizo regresar a la realidad justo a tiempo para esquivar el balón que tenía como destino mi rostro y el cual apenas y logro rozar mi nariz. - ¡Cipher! ¡Consentrese en el juego! - Me grito el entrenador quién se limitaba a hacer de árbitro durante nuestro enfrentamiento de esquiva pelotas.

- ¡Lo siento! - Grite y volví a consentrar mi atención en las pelotas que nos lanzaban los miembros del equipo contrario.

- Stan ten un poco más de cuidado. - Me advirtió Fidds. - Casi te vuelan la cabeza.

- Descuida Fidds tengo una cabeza dura no sera fácil que un balón me la vuele. - Dije en tono burlón mientras me daba unos pequeños golpes en la cabeza.

- ¡En ese casó esperemos que eso que dices sea verdad lame traseros de "nerd"!

- ¡Crampelter lenguaje!

- ¡Lo siento Profe! - Dijo mientras me dedicaba una sonrisa taimada como la de un zorro.

Durante toda la clase de educación fisica él y yo nos habíamos dedicado a lanzarnos pelotazos mutuamente con el propósito de eliminarnos, pero sin ningún exito ya que él usaba a sus "amigos" (si es que él los consideraba eso) como escudos para protegerse y cada vez que tenía oportunidad ordenaba a su equipo que atacaran a Fidds en conjunto a modo de perjuticarme y de eliminarme ya que sabían que acudiría ayudarlo, pero para su mala suerte ese plan no tenía éxito ya que sabía como lidiar con ese tipo de cosas (a las que ya estaba acostumbrado) lo cual parecía molestarlo ya que su propio enojo lo llevo a cometer errores los cuales ya le habían costado a más  de la mitad de su equipo ya que solo quedaban él y sus amigos los cuales se defendían a duras penas. - ¿Estas bien Stan te veo algo distraído? - Me pregunto Fidds quien durante todo el día se la había pasado mirándome atentamente lo cual comenzaba a fastidiarme aunque no al punto de querer alejarme de él ya que debía admitir que era un buen chico y un gran amigo.

- Si estoy bien es solo que... que no dormi anoche.

- ¿Seguro?

- Si estoy bien, ahora consentrate Fidds estamos apunto de ganar. - Ordene con el fin de esquivar el tema.

- Esta bien líder.

No me gustaba la idea de darle ordenes a Fidds o/a ninguno de los demás con los cuales estaba haciendo equipo ya que para ser honesto yo nunca había deseado dirigír a nadie por lo que cuando escuche que yo sería el líder de uno de los equipos me aterre e intente pasarle el liderazgo a Fidds  quien lo rechazó incondicionalmente argumentando que yo debía ser el líder si queríamos una oportunidad contra el equipo de Crampelter (el cual se sabía que jugaban sucio) y aun cuando "si" había logrado una gran hazaña dirigiendo a mi equipo deseaba con toda mi alma que todo esto terminara ya.

- ¡Es hora equipo ataquen! - Grito Crampelter al tiempo que lanzaban sus balones contra nosotros.

- ¡Equipo esquivenlas! - Ordene al tiempo que esquivaba uno de los balones. - ¡Ahora ataquen!

Sin dudarlo los ocho miembros de mi equipo lanzaron sus balones al mismo tiempo logrando sacar del juego a Paul y a David los cuales calleron bajo nuestros balones dejando sólo a Crampelter quien me miraba con odio. - ¡Aun no he perdido y te lo demostrare! - Era más que obvio que ya había perdido, pero aun así se negaba a aceptar la derrota lo cual en mi opinión o era por que era demaciado orgulloso o un estúpido (probablemente lo segundo) por lo que decidí concederle su deceo. - Muy bien Crampelter si tanto deseas golpearme te dare gusto. - Tome uno de los balones que se encontraban de mi lado y se lo lance no con la intención de eliminarlo lo cual él pareció comprender ya que lo tomo con sus manos sin muchos problemas.

Stanford y Stanley una historia de amor (Stancest) Temporada 1 RE EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora