Apuesta por nosotros.

Capitulo 23: Nunca terminé.

Narra Judy.

Todas dimos por terminada aquella charla cuando Santana subió de nuevo las escaleras y Wesley la siguió, todas empezaron a vaciar la sala lentamente, yo era la siguiente en salir por la puerta hasta que alguien tomó mi mano provocando que retrocediera y volviera a la sala.

- ¿Que sucede? - pregunté al reconocer quien tomaba mi mano, era una de las chicas con las cuales me habían asignado para la anterior prueba, pero no era la única allí conmigo, las otras dos chicas llegaron antes de que me respondiera.

- Es mejor que salgamos todas juntas ya que debemos discutir lo de la propuesta - dijo Magda, las chicas asintieron y salimos de la casa para quedarnos paradas al final de las pequeñas escaleras que nos guiaban a la calle.

- Tengo una idea - empezó hablar Callie interrumpiendo a Magda quien parecía que iba a tomar la primera palabra cuando nos ubicamos en círculo, todas la miramos con atención esperando que continuara - esta propuesta nos dará el primer lugar para recaudar fondos, ¿que tal una venta de cosas que no utilizamos?.

- ¿Como una venta de garaje? - preguntó Hannah, Callie asintió con su cabeza.

- Sería buena idea que hiciéramos algo así, no tendríamos que gastar en ingredientes para comida, es algo sencillo de lo cual la universidad podría beneficiarse, creo que todos contribuirían - respondió está intentando ocultar su emoción ante la gran idea que había obtenido supuse yo.

- A mi me parece una buena idea aunque no creo que algunos animales quieran vender sus cosas y no recibir alguna cantidad de dinero a cambio - dije de la manera más amable.

- Solo los que no busquen recibir algo a cambio darán sus cosas - aclaró esta, Magda negó con su cabeza.

- Son muchos los egoístas, no creo que esa idea ayude mucho - le dijo esta sin un poco de amabilidad pero tampoco tan desagradable como antes cuando nos conocimos ayer, estuve de acuerdo con ella, no creía que alguien estuviese dispuesto a dar sus cosas y no querer algo a cambio.

- Estoy de acuerdo con Magda - dijo Hannah, Callie asintió de acuerdo no viéndose afectada por el rechazo a su idea.

- Conozco recetas que no requieren de muchos ingredientes las cuales podrías vender a un precio razonable - empece hablar yo ante el silencio de las otras, Hannah negó con su cabeza.

- Necesitamos tener la propuesta lista para mañana y así entregarla el sábado, ¿por qué es tan difícil?, somos 4 animales - dijo esta de una manera bastante quejosa, como si fuese nuestra culpa, Callie rodo sus ojos y se cruzó de brazos mientras Hannah intentaba mantener una expresión neutral en su rostro.

- La venta de comida podría ser una buena idea si encontramos recetas que no requieran de muchos ingredientes - dije, tal vez muchos aquí fueran parte de algunos equipos deportivos pero podíamos encontrar recetas saludables que puedan interesarles.

- Mañana nos reuniremos en la cafetería en la noche o al finalizar la siguiente prueba, veremos si se nos ocurrió alguna idea y haremos la propuesta, se la daremos a Santana o a Wesley a primera hora en la mañana y ya - dijo Callie, parecía que aquellas palabras eran más para su tranquilidad que para la nuestra, todas estuvimos de acuerdo y nos separamos yéndonos cada uno por nuestro camino.

Mire con atención las casas de las fraternidades ya que me pase a esta acera incómoda de ir junto a Magda y Hannah.

Mire la fraternidad de Underworld la cual si estaba llena de animales, intenté encontrar a Nick entre todos estos pero estos no se quedaban quietos así que al final me rendí y continué mi camino hacia mi cuarto, debía ir a cambiarme para ir almorzar.

Tome mi celular para empezar a marcar el numero del jefe Bogo, salude a Jesús con una sonrisa cuando cruce la entrada a la recepción y subí las escaleras rápidamente, necesitaba hablar con el jefe Bogo lo mas pronto posible.

Al llegar a mi pasillo evité mirar algunos de mis compañeros ya que aún no había entablado una conversación amistosa con ninguno, solo con Abby.

- Hola - saludó por cortesía una elefante quien estaba saliendo de su cuarto, no recordaba su nombre pero le sonreí lo más agradable que pude.

- Hola - saludé también, abriendo la puerta de mi cuarto, ya empezaba a sentirme incómoda al no tener mucho que hablar con ella.

- Soy Dianina Xolane- se presento ella, abrí mi puerta y la mire manteniendo aquella sonrisa.

- Soy Nora avellane - me presenté.

- Solo te he visto cuando nos hicieron esa estúpida broma de bienvenida - dijo ella rescatando la conversación, me sentí mal al ver que su sonrisa no era falsa como la mía la cual intentaba no forzar mucho.

- Si, no he convivido mucho con los demás - aclaré y suspire dejando a un lado la sonrisa forzada que mantenía en mi rostro para hacerlo con sinceridad.

- Tranquila, aquí todos parecen concentrados en seguir con sus propios asuntos, nadie parece muy feliz con la idea de tener una grata convivencia con los otros, se conforman con cero peleas y ya - dijo esta con desagrado paseando su mirada por las puertas de los demás, hasta por la de Abby.

- Apenas es la primera semana, solo debemos adaptarnos a los demás y ya iremos conviviendo uno con el otro - dije apoyándome en el muro al lado de mi puerta, presentía que esta conversación no se acabaría rápidamente.

- Eso espero, estoy harta de ver cómo todos se ignoran, estaremos mucho tiempo conviviendo en este pasillo y no podemos fingir que somos extraños por el santo león, podemos convivir amistosamente - dijo claramente ofendida con la actitud de unos a otros al parecer, alce mis hombros como si eso excusara la actitud de algunos compañeros de pasillo.

- Ya veremos qué sucede - dije, esta asintió con su cabeza, volví abrir la puerta de mi cuarto pero no entre inmediatamente, no cuando aquella elefante volvió hablar, haciendo una pregunta que solo me hizo agradecer el no haber almorzado aún.

- ¿Tú conocías al chico que se suicido ayer en la azotea?, apenas vengo a enterarme en la mañana - me pregunto con curiosidad y evidente interés, no me atreví a mirarla y aún con la imagen de Ethan en mi memoria negué con mi cabeza.

- No, no lo hice - respondí, esta no dijo nada y di la conversación por terminada.

- Pero hubiera querido hacerlo - pensé antes de entrar a mi cuarto, cerrar la puerta y marcar el número del jefe Bogo en el silencio mientras el sol parecía querer estar en lo alto sin compasión de quien estuviese a esta hora al aire libre.

- Oficial Hopps - saludó Bogo apenas contestó mi llamada - ¿esta en condiciones para hablar? - preguntó, asentí con mi cabeza aunque no pudiese verme.

- Tengo algunas teorías de que fue un homicidio - respondí, el jefe suspiro y supuse que lo hizo porqué sabía que está conversación no sería para nada corta.

- Entonces empiece.

Nunca terminé.

- Judy del futuro.