-Sarah: la verdad es que fue una suerte, se nota que Jamie no quiere perderte.
-Cate: bueno creo que deberíamos entrar en casa que ya hace frío.
-Sarah: si, podemos ver una pelicula en el sofá, ¿qué te paece?, como en los viejos tiempos.
-Cate: Sarah, de verdad que no quiero que pase lo de la ultima vez, quiero que todo vuelva a ser como antes de ese error.
En la cara de Sarah, se dibujó una leve sonrisa.
-Cate: ¿te hace gracia?
-Sarah: para mi no fue del todo un error.
Ambas se miraron en silencio.
-Cate: bueno, ¿Qué película querías ver?
Cate pensó que esa era la estrategia perfecta para calmar aquella situación. Sin pensarselo dos veces, Sarah cogió un DVD ocultando la portada.
-Sarah: ¿te avuerdas de nuestra pelicula favorita?
Y Cate susurrando dijo.
-Cate: Titanic, ¿en serio?
Sarah puso el DVD en el reproductor, y en la mitad de la película Cate dijo:
-Cate: seguro que en ese trozo de mader tambien cabía Jack.
-Sarah: si pero quería asegurarse de que ella no se ahogara con él.
-Cate: yo no habría arriesgado la vida por una mujer que acabo de conocer.
-Sarah: pero se quieren, seguro que tú hubieses hecho lo mismo por mi.
-Cate: claro porque tú eres mi mejor amiga.
Estaba claro que Sarah no esperaba esa respuesta y mosqueada por el comportamiento de Cate, responde:
-Sarah: ¿no se por qué te esfuerzas tanto en negar lo evidente?
-Cate: ¿a qué te refieres?
Entonces Sarah le agarra el antebrazo y a pocos centímetros de su cara susurra:
-Sarah: ya lo sabes.
Sus miradas cortaban la poca distancia que había entre sus labios.
Cuando ya parecía que el beso era inminente, Cate retrocedió bruscamente hacia el otro lado del sofá.
-Cate: esto no puede ser.
-Sarah: pero, no puedes ocultar lo que sientes.
-Cate: me voy a mi casa.
Sin decir más Cate cogió sus cosas y caminó hasta la parada mas cercana.
ESTÁS LEYENDO
Lo que aprendí de amarte.
Fanfiction¡HISTORIA COMPLETA AUNQUE PUEDE HABER SEGUNDA PARTE...! Bella historia de amor. Hola, soy Cate Blanchett una joven actriz de 30 años, nací en Australia y soy hija de exconvictos, supongo que como la mayoría de los australianos y os voy a contar mi h...