Capítulo 11

24.7K 2.5K 556
                                    

Taehyung

Hoy volví a faltar a la universidad. No porque me encontrara enfermo, simplemente porque no puedo mirar a Jungkook a la cara y considerando que compartimos casi todas las clases se me haría imposible evitarlo.

No he faltado mucho a clases este año, por lo que no asistir unos cuantos días no me perjudicará demasiado. Además Jungkook me traerá las notas que tome en clases para estar al día con la materia.

Necesito un tiempo a solas para pensar en lo que pasó con Jimin.

Amo a Jungkook con mi alma, pero no puedo negar que también tengo sentimientos hacia él.

Sentimientos que no son correctos, que tienen que dejar de existir.

Por eso no pienso volver a verlo, si quiero que esos sentimientos desaparezcan tengo que mantenerme alejado de él y eso es exactamente lo que voy a hacer.

Jimin

Lo que pasó con Jungkook fue... Lindo... Muy lindo.

Hoy pude ver una nueva careta de él que ni si quiera podía imaginar que existía.

Su sonrisa es demasiado dulce, parece un conejito adorable cuanto esta se forma en su rostro.

La atracción que ya sentía por él creció aún más.

El solo pensar que se aparecerá por la gasolinera más seguido me emociona. Me encantaría verlo más, su sonrisa me transmite tantas cosas que ni siquiera lo puedo explicar.

Pero aunque quiera olvidarlo, no puedo evitar seguir pensando en lo que ocurrió con Taehyung. Él me gusta, a pesar de lo que me hizo, aún me gusta. 

Ambos me gustan. Nunca me había sentido atraído por alguien a quien apenas conozco y menos por dos personas a la vez. Además jamás me hubiera metido en medio de una relación, yo no suelo ser así.

Todo esto es tan raro.

No sé qué hacer, supongo que solo dejaré que las cosas fluyan y tendré que aceptar las consecuencias que conlleven al final.

Jungkook

Taehyung volvió a faltar a clases y aunque me haga sentir culpable decirlo, estoy un poco feliz por eso ya que de esta manera podré pasar libremente a la gasolinera.

Me gustaría poder entablar una conversación más extensa con Jimin sin que nadie moleste por lo que voy a ir más temprano esta vez, antes de que la tienda empiece a funcionar. Tal vez si tengo suerte su compañero de trabajo no haya llegado aún y podamos estar los dos solos.

Cuando salí del departamento Taehyung aún estaba dormido, así que no necesité inventar una excusa para justificar mi extremadamente temprana salida.

Eran apenas las 7:30 am cuando ya me encontraba en frente de la puerta de la tienda, que tenía el cartel de "Cerrado" aún puesto. Lo más probable es que Jimin ni siquiera haya llegado todavía, pero aun así le di un par de golpes a la puerta para asegurarme. Para mi sorpresa él ya estaba ahí y por su cara se notaba que él también estaba sorprendido de verme. Unos segundos después ya se estaba dirigiendo a la puerta apresuradamente para abrirme.

- ¿Qué haces aquí? –preguntó con una hermosa sonrisa en la cara cuando ya ambos estábamos dentro.

- Ayer te dije que vendría más seguido, ¿O qué acaso lo olvidaste?

- No lo olvidé –rio- es solo que no te esperaba tan pronto y menos tan temprano.

- Preferí venir a esta hora porque pensé que podrías estar solo y creo que no me equivoqué, ¿O tu compañero también está?

- No, él siempre llega tarde, así que estoy solo aún. –gracias a Dios.

- Qué bien... -no tengo ni idea de cómo seguir esta conversación.

- ¿Quieres sentarte a tomar un café? Falta una hora para que la tienda abra, normalmente no dejaría entrar a nadie antes del horario de apertura pero creo que por ti puedo hacer una excepción, después de todo eres el hijo del dueño y si te echo probablemente me despidan. –dijo esto último refiriéndose a lo que pasó esa vez y aunque lo hizo en tono divertido no pude evitar agachar la cabeza sintiéndome culpable. Al parecer se dio cuenta porque segundos después la expresión de su rostro dejó de ser de entretención.

- Oye... No lo dije para hacerte sentir mal, fue una simple broma. Lo que ocurrió esa vez ya no importa, tú ya te disculpaste, yo te perdoné y ya está, quedó en el pasado. –volvió a sonreír y yo solo asentí.

- Y bien, ¿Quieres ese café o no?

- Solo si te sientas conmigo a acompañarme mientras lo bebo. –contesté con los nervios hasta el cuello esperando su reacción.

Y como siempre, sonrió.

Dios, que sonrisa tan tremendamente hermosa, no me canso de verla y creo que jamás podría llegar a cansarme de ella.

- Sería un gusto acompañarte.

Nos sentamos en una mesa junto a la ventana y comenzamos a charlar, al comienzo fue un poco incómodo, pero al pasar el tiempo la conversación comenzó a fluir. No hablábamos de nada importante en realidad, solo tomábamos un tema al azar y cuando este terminaba seguíamos con otro.

Los minutos pasaron volando. Estábamos en plena conversación cuando el otro empleado llegó.

Ambos nos paramos rápidamente. El chico no alcanzó a vernos sentados juntos por suerte, pero aun así nos miró extrañado y se dirigió hacia Jimin.

- ¿Jimin, qué está pasando? La gasolinera aún no abre, se supone que no deberías dejar pasar a nadie. -iba a contestar pero lo interrumpí antes de que dijera nada.

- ¿Qué acaso olvidaste con quién estás hablando? Soy el hijo del dueño, puedo venir cuando yo quiera y es su obligación atenderme. –dije serio, logrando intimidar al pelirrojo. – Ahora sal de mi vista si no quieres verme verdaderamente enojado. –el chico asustado se retiró.

Me volví hacia Jimin para hablarle, quien seguía con los ojos bien abiertos perplejo por la situación.

- ¿Crees que se me pasó la mano?

- No, está bien, si no lo hubieras hecho hubiera empezado a sospechar.

- ¿Y qué se supone que tendría que sospechar exactamente?

- Pues no sé... Lo de nosotros...

- ¿A qué te refieres con "lo de nosotros"? –pregunté curioso. Él quedó pensativo sin saber que responder y simplemente evitó seguir hablando del tema.

- Creo que ya deberías irte, la tienda ya va a abrir y Hoseok va a regresar en cualquier momento.

- Está bien, que tengas un buen día. –estaba a punto de salir cuando la pregunta vino a mi mente. - ¿Mañana a la misma hora?

Me miró sorprendido y segundos después sonrió asintiendo.

Me quedé admirando su sonrisa unos instantes y al fin me marché.

"Lo de nosotros", pensé mientras iba camino al auto y no pude evitar sonreír.

Dúo de tres  {Vkookmin}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora