Dúo de tres {Vkookmin}

Capítulo 13

Taehyung

Han pasado semanas, SEMANAS y aún no puedo lograr sacar a Jimin de mi cabeza. Lo intenté, en serio que lo hice pero no puedo más con esto.

Por más que quise extinguir estos sentimientos, siguen aquí, sin haber disminuido siquiera un poco. Dije que no lo vería más pero no sirvió y no tiene caso seguir luchando, no tiene caso seguir peleando contra algo que no va desaparecer.

Hoy después de la universidad iré a esa gasolinera a verlo. Necesito explicarle lo que pasó, necesito decirle que yo jamás lo engañé, que nunca fue mi intención humillarlo ni hacerlo sentir mal de ninguna forma. Aunque me mande a la mierda tengo que hacerlo, tengo que saber que hice todo lo posible por recuperarlo, si se puede llamar así, porque en realidad nunca lo tuve.

Las horas en la universidad se me hicieron más eternas que nunca. A la salida le dije a Jungkook que me quedaría estudiando en la biblioteca. Las cosas con él siguen un tanto raras, pero en general todo ha vuelto prácticamente a la normalidad.

La hora de salida al fin llegó y salí corriendo hacia mi auto como si no hubiera un mañana. En 10 minutos ya estaba en el estacionamiento de la gasolinera.

Jimin

La tienda estaba especialmente tranquila hoy, casi no había tenido clientes. Por suerte, porque Hoseok pidió un permiso para faltar y me dejó todo el trabajo a mí.

Estaba limpiando una mesa cuando vi un lujoso auto negro aparcar al final del estacionamiento. Un auto tan elegante solo puede ser de Jungkook, nadie además de él que venga a este lugar tendría un auto tan fino.

Una enorme sonrisa se formó en mi cara.

Jungkook...

La atracción que sentía por él ya no existe.

Esa atracción se convirtió en amor. Me estoy enamorando de él. Al comienzo me costó admitirlo pero finalmente terminé aceptándolo.

Estoy totalmente loco por Jeon Jungkook.

La campanilla de la puerta sonó, estaba de espaldas a esta, ni me molesté en voltearme y comencé a hablar.

- ¿Tanto me extrañabas que tuviste que volver a venir a verme? –solté en todo burlón mientras intentaba limpiar una mancha de la mesa que no quería salir. Dios, qué es esto que está tan pegado.

Estaba esperando que viniera y me abrazara por la espalda como suele hacer, pero ese abrazo nunca llegó.

- Jimin... Puedo suponer que no soy la persona a la que esperabas.

Paré en seco cuando escuché esa voz. No, esa no era la voz de mi Jungkookie.

Era de Taehyung.

Me giré enfurecido.

- ¿¡Qué haces aquí!? ¡Lárgate! ¿¡Qué parte de no te vuelvas a acercar a mí no entendiste!?

- Jimin tranquilízate por favor, tenemos que hablar. –respiré profundo hasta que logré estar un poco más calmado.

- Nosotros no tenemos nada de qué hablar. Ahora por favor ándate que tengo que trabajar.

Me fui en dirección a la bodega lo más rápido que pude, pero antes de poder llegar sentí su brazo agarrándome por la cintura.

- No me iré a ningún lado hasta que hablemos. -la voz que utilizó me alarmó. No fue el tono amigable y divertido que solía usar, para nada, este era oscuro y serio, tanto que por un segundo le tuve terror. Al parecer ese miedo se notó en mi rostro porque enseguida me soltó.