Dúo de tres {Vkookmin}

Capítulo 33

Taehyung

Desperté emocionado, hoy Jimin será dado de alta. Los momentos de sufrimiento, angustia y dolor al fin quedarán en el pasado cómo un mal recuerdo. Mi bebé luce cada vez mejor. Ha vuelto a sonreír, a reír, a hablar animadamente de cualquier cosa por más trivial que sea, tal y cómo era antes de que toda esta pesadilla comenzara. Es el mismo Jimin que conocí y del que me enamoré, el Jimin que en un momento pensé que nunca volvería a existir.

Volteé hacia mi izquierda y me percaté de que Jungkook aún seguía dormido. Me levanté de la cama rápidamente.

- ¡Levántate, es hoy! –grité extasiado dando un corto aplauso logrando que Jungkook por poco cayera al suelo.

- ¿Qué hora es? –preguntó aún adormilado.

- 6:30 am. –abrí las cortinas permitiendo que la luz del sol se colara por la ventana. – Que hermoso día. –suspiré apreciando la vista.

- Está a punto de largarse a llover y hay como 5 grados de temperatura. –habló serio. Me giré hacia él algo molesto.

- Aun así. Ni el clima ni nada puede arruinar este día.

- Disculpa por preguntar pero no entiendo nada, ¿Qué día es hoy y a qué se debe tanta emoción?

- ¿Estás bromeando cierto? –me miró confundido. Dios dame paciencia. - ¡Aló! ¿Jungkook? Te llamamos del planeta tierra. –por su expresión supuse que seguía sin entender. - Jimin. Salir. Hospital. –su cara se iluminó y se levantó de la cama de un salto enredándose en las sabanas y cayendo al piso. Se puso en pie rápidamente.

- ¡Al fin es hoy! –me abrazó y ambos gritamos emocionados.

- Estoy nervioso, tenemos que hablar con él. -dijo con cara de consternación.

- Lo sé... Pero confío en que todo saldrá perfecto. –le dediqué una sonrisa tranquilizadora consiguiendo calmarlo.

Normalmente tardábamos 30 minutos en llegar al hospital, esta vez tardamos 15. Ya no podíamos esperar ni un minuto más.

Llegando a su habitación se escuchaba su risa hasta el pasillo. Me asomé por la puerta y lo vi hablando animadamente con una enfermera, quien se encontraba cómodamente sentada al borde de la camilla.

- ¿Interrumpimos algo? Porque si es así podemos volver más tarde. –dije fingiendo enojo.

- ¡No! Entren por favor. –contestó preocupado al ver mi expresión seria.

- Señorita, puede retirarse. –la enfermera solo asintió cabizbaja saliendo de la habitación.

Jungkook y yo permanecimos en silencio.

- Oigan, no se enojen. La chica es amable y vino a hacerme compañía un momento. –explicó afligido por la situación. Mi expresión no cambió.

- ¡Ay por favor, deja de torturarlo! –habló Jungkook enojado y seguidamente se dirigió a abrazar a Jimin.

- Arruinaste mi actuación. –hice un gesto irritado con la cabeza.

- ¿¡Estabas bromeando!? ¡Por poco me da un infarto al verte así! –dijo agitado.

- Diría que lo siento pero sinceramente me ofende tu reacción. –me observó confundido. – A estas alturas de nuestra relación ya deberías de saber que confiamos en ti plenamente. –me acerqué a la camilla y tomé asiento junto a Jungkook. Jimin sonrió tímido, no se esperaba esa respuesta de mi parte.