Mr. Wick [Terminada]

Capitulo 39

EL CAPÍTULO DE HOY SE TITULA:
"CRAZY LITTLE THING CALLED LOVE"

— Feliz cumpleaños a tí, felíz cumpleaños querida Helen, Feliz cumpleaños a Tí. — Cantabamos John y yo con un pastel en las manos para Helen.

Cuando ella sonreía solía olvidarme del mundo entero.

La pequeña Helen, ella era es luz en mi penumbra, esa sonrisa inocente en las mañanas. Era todo mi mundo.

— Me alegró de tenerlos juntos de nuevo. — dijo y brincó de su cama para abrazarnos.

— Y nosotros de tenerte a ti— le contestó John.

Escuchamos el timbre de la puerta y Max bajo corriendo a ladrar en la puerta.

— Yo iré — le deposite un beso en la mejilla a Helen y me dispuse a bajar.

Cuando abrí la puerta, Dyland esperaba con un gran conejo de peluche más grande que el.

—¿Dónde está el monstruito?— preguntó pero no le veía el rostro, culpa del gran conejo.

— TIOOOO DY — Gritó Helen.

Helen abrió los ojos y la boca de la sorpresa al ver el enorme conejo que cubría a Dyland. El se acercó a ella y dejó el conejo en el suelo para que ella pudiera abrazarlo.

—¿Te gustó?— le pregunto Dyland.

— ¡No!— sonrió—, ME ENCANTOOOO.

—¿Cómo lo vas a llamar?— le pregunté.

— Keanu — contesto Helen abrazando el enorme conejo.

— El conejo Keanu, Suena Lindo— dije y John y Dyland coincidieron Conmigo de inmediato.

Helen se la había pasado jugando y corriendo de un lado a otro con el conejo Keanu y Max. Helen era una niña muy alegre y algunas veces creía que hiperactiva.

— Iré por algo de tomar— me levanté del sofá y me dirigí a la cocina.

Vi el jugo, el agua y una botella de tequila. Lo pensé varias veces y terminé escogiendo....tequila.

Agarré el pequeño vaso de cristal y Verti en su interior el líquido embriagante. En realidad lo necesitaba, necesitaba olvidar el hecho de que tenía a dos hombre en mi casa y que uno de ellos me volvía loca.

— ¿Tan temprano?— escuché su voz detrás mío pero no me giré a verlo.

Verti el líquido en mi boca y sentí como quemó de mi garganta hasta el estómago. Haciéndome toser un poco al tragarlo.

Servi otro...

Sentí las manos de John colocarse en mi vientre, y acunó su rostro en mi cuello, haciéndome estremecer al sentir su respiración en mi nuca.

— Puede ver pero no tocar Mr.Wick— dije y Verti el líquido en mi boca.

Está vez mis papilas gustativas fueron más amigables, haciendo que no quemará tanto.