Mr. Wick [Terminada]

Mr. Seductive.

Las dos semanas de mi recuperación pensé que serían lindas pasando las al lado de John, estaba dispuesta a darlo todo por el. Le había pedido me enseñará a disparar y defenderme y lo hizo pero cada que intentaba algo con el, se volvía frío y se alejaba.

Ya estaba cansada de intentarlo, así que me iría hoy a mi casa.

¿Debería intentarlo una última vez?...no lo sé.

—John...—Grite desde arriba en la habitación, ya estaba molesta.

—¿QUÉ SUCEDE? ¿ESTAS BIEN?— Subió agitado hasta la recámara.

—No, nada está bien...— John corrió hacia mí y comenzó a revisarme en busca de algo que fuera causante de dolor—¿Qué haces?

—Busco algo, una herida ¿Qué te duele?— dijo y me miró confundido.

—Físicamente nada Jonathan...— inhale y expire para tomar valor y comenzar a hablar— John yo te dije lo que sentía, te amo, no sé cómo sucedió pero paso y no me arrepiento aunque tú no sientas lo mismo.

—Yo...— lo interrumpí.

—Te amó Jonathan y eso es lo único más real en mi vida, además...

No termine de hablar cuando John se me abalanzó y comenzó a besarme, el beso comenzó lento y suave, el sabor de sus labios era lo mejor de este mundo. John me cargo y yo enredé mis piernas en su cintura, continuamos besándonos hasta que John me recostó en el colchón y me levanto un poco para acomodarme, abrió mis piernas y se colocó entre ellas, quedando arriba de mí.

— Te amo Penny...

Retiré la polera gris que tenía dejándome apreciar su abdomen, con unas cuantas cicatrices, arañe su espalda y John gimió. John comenzó a recorrer mi cuello dejando marcas en él y hasta llegar a mi pecho y abdomen. Lo quería y lo quería ahora, abrí su pantalón y el me ayudó a quitarlo, lo arrojé hasta el otro lado de la habitación.

El hizo lo mismo, retiro mi polera y mi pantalón, quedándonos solo en ropa interior. Ambos nos sentamos con las piernas entrelazadas, enredé mis manos en su largo cabello y Jonathan retiró mi sujetador dejando a mis dos amigas al aire.

—John...te quiero ahora— dije con la respiración agitada.

Me recostó y colocó mis manos encima de mi cabeza, ahora el tenía el poder, se deleitó entre mis fieles amigas y bajo hasta mí pelvis dando besos y mordidas.

Retiró lo que sobraba de tela y como si nuestra vida dependiera de ello, sentí mi cuerpo fundirse con el suyo, las embestidas fueron al principio lentas hasta que después se hicieron más salvajes, el éxtasis que sentía era algo maravilloso. Nuestros cuerpos se complementaban el uno al otro, la respiración de John era agitada, su cabello de había pegado a su cabeza y varios cabellos rebeldes estaban en su rostro. Ambos llegamos al final juntos, John se retiró de encima mío dejándome un vacío enorme y me cubrió con la colcha, para recostarse después en mi pecho.
______________________________________

Cuando abrí los ojos John se encontraba mirándome y yo sonreí.

—¿Hace cuánto despertaste?— dije y John me dió un beso en la frente.

—Hace poco, me gusta verte dormir.

—Es alguna clase de fetiche— dije y John río.

— Me encantaría que tú lo averiguaras— dijo en tono seductor con su voz profunda.

— Te amo John — él tomo mi mano y la besó tiernamente.

— Y yo a ti Penny, no puedo negarlo más.

Acaricié su rostro y retiré unos cabellos rebeldes, para luego depositar un tierno beso en sus labios rosas y carnosos.
Estuvimos en la cama hasta que anocheció y cuando me separé de John fue para tomar una ducha, la cual me acompaño Jonathan.

— quiero mostrarte algo— dijo mientras terminaba de vestirse.

—¿Qué cosa?— dije entusiasmada.

— Ven— John me tomo de la mano y me dirigió hacia la ventana. John la abrió y nos dirigimos hacia la terraza.

— Qué hermosa vista— dije mirando el hermoso cielo despejado que nos deleitaba con sus estrellas y constelaciones.

—¿Ves eso de ahí?, Es la constelación de tauro.

—No, esa es la de virgo. Según La mitología greco-romana representa en este Signo el sexto trabajo de Hércules. La constelación de Virgo representa al cinturón de Hipólita, que es un cinturón estilizado o "hymen" que le había dado Venus y Hércules partió a recuperar el cinturón para los Dioses, la reina luchó con él y Hércules la mató, dejando a las mujeres sin reina, privadas de dirección y de amor, por ello fracasó, ya que no tenía que matarla.

—Wow— Exclamó y me tomo de la cintura.

—¿Qué?— pregunté.

— Cada día aprendo algo nuevo de tí.

— Mi papá era fanático de la astronomía y a mí me encantaba preguntar.

— Eso lo tengo claro—río y yo me crucé de brazos haciéndome la enojada pero John me ablandó dándome un tierno beso en la mejilla.

— Eres malo Jonathan— dije en tono burlón.

—¿Ese de ahí es Marte Cierto?— dijo señalando hacia el cielo.

— Si.

— Ves, eso es lo único que sé de astrología — Me miró y ambos reímos.

Hacía frío afuera pero el hecho de estar juntos era perfecto, John me abrazó todo el tiempo y fue muy caballeroso, pasamos toda la noche observando las estrellas, John me pedía que le enseñará y le contará más maravillosas historias.

John era la clase de hombre que lo poseía todo que parecía sacado de una historieta o alguna novela, es simplemente era PERFECTO.