𝓒𝓸𝓻𝓪𝔃ó𝓷 𝓭𝓮 𝓬𝓻𝓲𝓼𝓽𝓪𝓵.

Capítulo 2.

Mi estómago dio un vuelco mientras mi corazón se aceleraba, siempre sucedía cuando Leo intentaba presentarme a sus amigos.

Mi primera impresión no tan impresión: Los amigos de Leo son muy poco comunes.

Todos se presentaron sonriendo excepto Nico quién solo asintió con la cabeza a su saludo.

Frank era físicamente enorme no era gordo, solo tenía mucho músculo. Era muy lindo, su cara era muy atractiva pero tenía un toque muy inocente lo que le hacía ver tierno, tenía rasgos chinos.

Jason por otro lado, el chico parecía el típico chico popular, rubio ojos azules, el azul de sus ojos eran de un tono azul eléctrico y usaba gafas, era atractivo y su cuerpo estaba muy bien trabajado. Se veía alguien intelectual y muy formal.

Piper era una chica muy excéntrica, su tono de piel era algo oscura, su cabello estaba cortado de formas desiguales y en el tenía algunas trenzas que estaban adornadas con plumas de colores. Sus ojos eran de un color que no podía adivinar, y tenía un muy buen cuerpo. Se veía una chica Atlética.

Hazel, se notaba que era casi dos años menor que todos ahí, su tono de piel era de un moreno muy atractivo. Su cabello afro era de un tono canela candente, y sus ojos eran de un hermoso dorado, tan irreal... Era un poco baja y de buen cuerpo. La chica tenía un rostro refinado y era algo cachetona. Su rostro era muy tierno en realidad.

Del tal Percy había mucho que decir. Lucía como el típico niño de papi, pero al mismo tiempo el típico chico lindo problemático, su cabello era de un color azabache muy oscuro y muy desordenado, su tono de piel era de color canela no tan oscuro, más bien bronceado, sus ojos eran de un color verde mar y su cuerpo lucia muy bien trabajado.

Pero había algo en el chico que me decía aléjate de él. Problemas. Y más problemas.

De Nico no había mucho que decir, era un chico que vestía completamente de negro, su piel era tan blanca como los vampiros de Crepúsculo. Sus ojos eran de un color marrón oscuro, casi negro. Su cuerpo era delgado pero se le veía trabajado. Su cabello era algo largo casi rozaba la mitad de su cuello y era de un tono azabache oscuro y algo brillante. Era muy lindo, se veía de confianza, pero alguien muy reservado.

Lo que todos tenían en común, incluso Nico, es que a pesar de no parecerse en gustos o algo similar, todos se llevaban muy bien entre sí, eran un grupo ruidoso, pero unido.

La ceremonia había acabado, y todos se fueron a sus respectivas clases.

Tuve que ir a dirección para recibir las instrucciones, solo tenía que darle un sermón a los de nuevo ingreso en este caso; sus compañeros de clase.

Di una respiración profunda y me encamine al salón, la primera clase era Matemáticas, el profesor Paul era uno de sus profesores favoritos. Siempre tenía un tema interesante que explicar y era muy buena persona.

Mientras se acercaba al salón divisó al amigo de Leo; Percy, recordó, el chico parecía huir de quién sabe que cosa, debió de mirarlo durante tanto tiempo que su mirada peso y provocó que el volteara a verla. Sus miradas chocaron y el chico volteó la mirada a los dos segundos.

Siguió caminando, sin embargo por curiosidad, decidió voltear y observo que el azabache estaba rodeado de algunas estudiantes de tercero de secundaria (su institución era secundaria/preparatoria)

Trate de pasar desapercibida pero, para mi lastima las chicas me observaron y ambas se miraron entre sí. Dirigí mi mirada a Percy, el chico me miro a los ojos buscando ayuda. Al parecer.

Me termine de acercar a ellos y mire directamente a ambas chicas. —¿Se puede saber porque no están en sus respectivas clases? —las mire con detenimiento, ambas se miraron entre sí, dudosas de responder.— A menos que no quieran ir a dirección a justificar el porqué no están en clase, vayan sus respectivas aulas justo ahora.

Ambas chicas solo afirmaron con la cabeza y se retiraron en silencio. Observe a mi acompañante, el chico no me quitaba la mirada de encima y empezaba a molestarme.

—¿Por qué les hablaste tan formalmente? —pregunto el chico.

—¿Por qué no estás en clase? —Le respondí.

El sonrió alzando una ceja. — Eres interesante listilla. Y respondiendo tu pregunta, solo fui al baño, estaba de regreso pero esas niñas se atravesaron en mi camino. Gracias por la ayuda.

Forme una mueca al escuchar el apodo con el que le llamo.—No me digas listilla, que pésimo apodo. Y si lo que dices es cierto, tienes suerte, vamos al salón.

Me di vuelta encaminándome al salón sin siquiera fijamente si el me había seguido o no, sin embargo, mientras caminaba sabía perfectamente que el chico de ojos verde mar caminaba detrás de mí intentando acercarse.

El tiempo parece detenerse a mi alrededor mientras camino, para mí desgracia las cosas más simples podían hacerme recordar las cosas que habían dejado heridas en mi alma. Observe de reojo a Perseus, quién había logrado colarse a mi lado, el miraba distraídamente los casilleros y yo lo observaba a él, pude observarlo a detalle, y me detuve en aquello que desde el primer momento había captado toda mi atención.

Sus ojos eran de un color verde mar, el mar que tanto miedo y dolor me habían causado se encontraban en aquellos ojos. Percy volteó a mirarme, pero solo pude desviar la mirada.

°

Al llegar al salón el profesor me saluda cálidamente y me da paso para hablar.

Pongo mi espalda recta, y respiro hondo antes de hablar, mis ojos se posan en un punto muerto entre las cabezas de mis compañeros. No observaba a nadie en específico. Nunca lo hacía.

Di una respiración profunda y comencé con el discurso de bienvenida.

...—Como ya todos saben, como representante del alumnado de esta institución es mi deber informales estos cambios que se han impuesto, cualquier duda pueden preguntarme a mi directamente o algún profesor. A los nuevos alumnos se les asignará un tutor el cual se encargará de adelantarlos lo más posible a donde estamos ahora, como bien ya saben Goode es una institución privada y estricta con respecto a su nivel académico, yo personalmente seré tutora del alumno que me asigne el profesor Paul, el también les asignara un tutor. —Seguí hablando sobre las reglas del instituto y las normas de este durante un par de minutos más y ya dando por concluida mi charla observe a cada uno de mis compañeros por si tenían alguna duda, los ojos de Percy entraron en mi campo de visión y por quizá una milésima de segundo me sentí intimidada, aún cuando quizás mi rostro expresara todo lo contrario. —Y... eso fue todo, profesor, proceda hablar.

Me dirijo a mi lugar a penas el profesor me sonríe. Me indico con la mirada que vaya a sentarme, al estar al lado de Leo observo como él estaba entretenido con unos sujetadores de papel nada fuera de lo común en el.

Me entretengo escribiendo en la parte trasera de mi cuaderno, estaba sumida en mis pensamientos, hasta que la voz del profesor Paul me saco de mis pensamientos.

—¿Annabeth? —me vuelve a llamar, yo lo levanto la mirada y el vuelve a repetir.— Serás la tutora de Perseus Jackson.

—¿Perseus Jackson? -pregunte confundida arrugando mi frente, el único Perseus que conocía era...

Leo a mi lado me tocó el hombro.— Annie, el se refiere a Percy.

¿Por qué no me sorprende esto?