Nunca sabes si será un amor imposible.

Confusión.

De pronto algo arruinó nuestro loco momento romántico.
Mi celular comenzó a sonar y...
11:05 PM. Eddy llamada entrante.
Ignore la llamada y le pedí disculpas a Sam.
Enseguida le escribí a Edd:
Oye, no llegaré está noche a dormir. Estoy bien. No te preocupes.
Te veo mañana temprano, te quiero.

Así es, decidí que me quedaría sin importar nada.
Apagué mi celular y le dije a Sam.
- ¿Entonces nos quedaremos en este hotel? Sonreí.
- ¿Nos quedaremos? Pensé que no querías. Dijo sorprendido.
- Eddy llamaba para saber si estaba bien, ya le avise. Entremos.
Dije despreocupada. Y Sam solo sonrió.
Sam pago la habitación, nos dieron la llave y al entrar me di cuenta que había una sola cama.
No me parecía mal dormir en la misma cama con alguien, lo hacía todo el tiempo con Eddy pero acababa de conocer a Sam y claro que debía atenerme a las consecuencias, yo acepté su propuesta. Pero comenzaba a preocuparme un poco más.
Me senté sobre la cama mientras él cerraba la puerta.
- ¿Estás bien? Preguntó Sam al verme incomoda.
- Si. Conteste en seco.
- Bien pediré algo de beber. Prepárate, ponte cómoda. ¿Quieres algo para comer o quieres agua o algo asi?
- No, no quiero nada. Gracias Sam.
- ¿Segura? !Oye! ¿Que te pasa? Preguntó preocupado.
- Bien, mira no sé si te confundiste conmigo, no sé qué piensas de mi.
No sé qué pretendes o a dónde quieres llegar, pero creo que estás equivocado. Sé que yo acepté quedarme contigo y es porque en verdad me agradas, pero no tenía ningúna otra intención más que pasar un rato agradable contigo.
-¿¡Qué!? ¿como que, que pienso de ti? Ah, soy un estúpido... Perdón Rox, nunca creí que lo tomarías de esa manera, es decir... yo no quiero lo que estás pensando, no digo que no lo quiera. Si lo quiero, bueno no. No es esa mi intención. Dijo Sam nervioso y preocupado a la vez, sentándose en el piso.

Me sentí muy tonta al pensar eso de él... Pero me sentí peor cuando ví lo mal que se sintió.
- Oye, tranquilo Sammy. Perdóname a mi por pensar tal cosa, es sólo que nunca había hecho algo como esto y menos con alguien a quien acabo de conocer, temía que pensaras que soy una chica fácil o no sé solo... Perdón. Dije sentandome a su lado, tratando de remediar todo.
- Yo tampoco lo había hecho, fue una estupidez. Y te entiendo, estás en un cuarto con un tipo al que acabas de conocer en una ciudad de un país extraño. No quiero que pienses eso de mi. Fue una locura, perdón. Dijo desanimado.
- Si es una locura, pero pasó nada malo. Está todo bien y te creo, confío en ti.
Sam permaneció callado mirando al piso.

Ya eran las 12: 30 y la lluvia aún no paraba.
Después de dicha conversación nos quedamos sentados en el piso de la habitación y al paso de unos minutos Sam tomó mi mano, la besó y dijo mirándome.
- Eres hermosa y todo esto es una locura. Pero no me importa mientras confíes en mí.
- Lo hago. Dije sonríendo.

Subimos a la cama y el resto de la noche bromeamos, saltamos, reímos y claro, no paramos de hablar. Éramos un par de niños, nada más importaba.