Estaba en mi habitación cuando me desperté, pude notar que mi esposo no estaba, estaba tan acostumbrada a dormir con él, que si estaba sola en la cama me costaba dormir.
Me senté en la cama y acomode mi cabello, mi cuerpo estaba desnudo al ya no estar tapado con la cobija, toque el lado de la cama donde él dormía y sonreí al recordar lo que paso.
Me levante para ponerme la bata y bajar a buscarlo, mire la hora y ya era de madrugada, tenia que venir a dormir.
Baje las escaleras con lentitud, acomode mi bata y mire a ver si conseguía a mi esposo.
Los niños se habían quedado con mis suegros, así que solo éramos Youngjae y yo, en eso escuche el piano sonar, en ese momento entendí que estaba en el cuarto de música, practicando o enseñándole a los niños, me apoye en la puerta y lo mire con atención.
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Se veía enojado, pero atractivo mordí mi labio al verlo así, su cabello estaba alborotado y lo tocaba frustrado, estaba tocando el piano, pero paraba siempre en el mismo lugar, estaba haciendo una canción, pero al parecer no iba nada bien.
- ¿Qué haces aquí cariño? - Me apoye en el piano - ¿No tienes sueño? - Acaricie su cabello y el me miro.
-No puedo terminar la canción, estoy frustrado, yah- Dijo haciendo puchero- Ah es difícil cuando la melodía no avanza-.
- ¿Y puedo hacer algo para ayudar? - Dije haciéndole ojitos.
- ¿Sabes algo de música? -Yo negué -Que mal, en realidad necesito inspiración- Puso su barbilla en su mano aun mirándome.
-Mmm... ¿Relajarte te inspira? - Le pregunte – ¿Puedes tocar para mí?, me gustaría escuchar, siempre me ha gustado verte tocar, creo que te ves sexy- Dije divertida.
- ¿De verdad crees eso? – Yo asentí.
-Si, eres sexy cuando estas concentrado cariño, anda toca, quiero escuchar- El empezó a tocar muy concentrado, su respiración era pesada y lenta.
Lo escuche atentamente hasta que llego a la parte que ya no sabia que hacer, paro en seco y me miro.
- ¿Lo ves?, es horrible estoy bloqueado- Dije frustrado.
-Pobre- Me senté en sus piernas -Puedo hacerte sentir mejor y así te olvidas de tu preocupación- Acaricie su cabello.
- ¿Sí? ¿Cómo? – Me miro y yo tome su cara para besarlo, él se sorprendió pero acaricio mi cabello con dulzura, al principio nuestros labios solo se rozaron, así que me tome la tarea de moverlos para que el también se moviera, el beso poco a poco era más intenso, nuestras lenguas jugaban y nuestras respiraciones están agitadas, me separe para poder respirar.
- ¿Mejor? - Dije toda agitada y el me tomo de las mejillas para besarme otra vez, el beso era intenso y cargando de amor, puse mis manos en mi bata quitando el cordón.
- ¿No tienes nada debajo? - Yo negué sonrojada- ¿Te gustaría ver? - El asintió y yo con algo de vergüenza quite mi bata - ¿Quieres subirme ahí y hacerme tuya? - Dije tocando el piano.
-Si, me agrada la idea preciosa- Me levanto y me sienta arriba del piano para empezar a dejar besos por mi cuerpo, tomo mi pierna la cual estire y empezó a dejar besos por ella, el siempre tendía a ser muy romántico y lindo conmigo -Me encanta como hueles- Yo sonreí.
-Sube tus besos por aquí poeta, gracia- El solo negó divertido, y llevo sus besos hasta mi centro -Mmm precioso más lento- Acaricié su cabello, mi respiración estaba agitada, mi cabello estaba a un lado mientras miraba el trabajo de mi chico -Si, así es perfecto- Cerré mis ojos frustrado de la sensación -Eres un chico muy bueno-.
Se separo y quito su pantalón que era prácticamente su única prenda, además de su bóxer, yo lo jale a mi para besarnos, los abrace con mis piernas y el me pego mas a su cuerpo rodeando mi cintura, yo tenia mis manos en su cara para que no se separara de mí, deje muchos besos pequeños en sus labios y el sonrió, luego el intentaba besarme pero yo solo sacaba mi lengua por diversión, pero a él no le hacía demasiada ilusión.
-Aish amor no hagas eso, quiero besarte- hizo puchero lo cual me pareció tierno así que me acerque para que me besara, yo por mi parte empecé a hacerle masajes en los hombros, para relajar a mi esposo, el acaricio mis piernas y se acomodó en ellas para luego entrar, escuche un lindo suspiro de su arte, yo solo lo bese más fuerte.
-Eres tan hermosa- Dijo respirando en mi cuello -Gracias lindo- Dije con mi respiración pesada- Mordí suavemente su oreja y aprete sus hombros al sentir sus movimientos más fuertes, estábamos acalorados y agitados, puse mis manos en el piano para no caerme, ya estaba a punto de llegar, el me mordió el labio y luego me beso haciendo que llegáramos juntos.
-Dios... si necesitaba eso- Se acomodo en mis pechos y yo acaricie su cabello con amor -Gracias dulzura.
-De nada cariño, es un placer inspirarte- Dije bromeando y bese su cabello - ¿Quieres ir a dormir? - Pregunte aun jugando con su cabello.
-No, tengo otros planes para ti y no son dormir- Me cargo y me llevo a la pared, nos fundimos en un lento y apasionado beso, mis dedos se fundieron con su cabello y nuestras respiraciones volvieron a agitarse, pequeños gemidos salían de sus labios, mientras que yo estaba lloriqueando sumida en placer que me proporcionaba mi hermoso esposo.
Mi cuerpo se movía y se rozaba con la pared, me sujetaban sus fuertes manos, estaba agotada y cansada, pero también encantada por estar con él, lo ayude moviéndome haciendo que todo fuera aun mas placentera, no tardamos demasiado en sumirnos de nuevo.
-Ahh cariño- Clave mis uñas en su espalda y el solo me apretó con fuerza para luego respirar.
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Después de unos segundos en silencio calmadas nuestras respiraciones.
-Ahora si quiero dormir- Dijo riendo, pero me había quedado dormida- Veo que esta muy cansada mi linda esposa complaciente- Beso mi frente y me llevo a la habitación.
Me acostó en la cama y me arropo para después meterse a mi lado y abrazarme.
-Te amo, descansa muñeca- Cerro sus ojos y se quedó completamente dormido.
