Enredo.

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Un pequeño corazón... pero le faltaba la mitad... ¡ah, ya entiendo! ◀ Si, soy algo lenta ▶ Era una pulsera de un lindo color plata y algo pesada... decía 'Lo' con una letra bastante linda. Apuesto que en la otra mitad dice 'Ve' ◀ Es algo obvio ▶

¿Será que ella se quedó con la otra mitad?

- No me gusta que tengas cerrada la puerta de tu pieza - ¡Y mamá salvaje aparece! ¡Casi me mata de un puto susto!

- Va~Vale... Lo siento... Pero ya tengo 17 - A poco le lance todo lo que tenía encima.

- Lo sé, por eso madura y ayúdame a hacer la cena - Naaaah, mañana.

- Bueno, ya voy - Mh... si le decía eso probablemente no comería hoy ni mañana.

Mi mamá bajo a la cocina y yo seguía mirando la pulsera, era muy linda y parece que es de plata pero ¿La compro hoy? No creo, la vigilé lo suficiente... ◀ Si, aunque no quisiera lo hice ▶

No quiero pensar más en el tema, me puse la pulsera y corrí a ayudar a mi mamá ya que o sí no se pondría a reclamar ◀ Es bastante estricta ▶

Ayude a mi mamá y después llegaron mis hermanas mayores, Teresa que tiene 27 años y Debora que tiene 26. Personalmente me llevó mucho mejor con la de 26 ya que por un lado es más comprensible, sólo un poco.

Nos servimos la cena, no hablamos nada y como yo ya había terminado me paré y me fui a mi pieza.

Me volví a recostar en mi cama y empecé a observar más detalladamente la pequeña pulsera, primera vez que me dan un regalo tan lindo...

Me dormí pensando en cuanto podría llegar a valorar esa chica, era hermosa...

Desperté en la mañana con el puto sol dandome en la cara, vi el reloj y eran las 7:10pm. Aún era temprano.

Me levanté a bañarme, tome desayuno ◀ Me pareció raro, nunca lo hago ▶ y partí a la escuela temprano. Eran las 7:40 y yo entró a las 7:55 ◀ Sin mencionar que la escuela me queda a dos pequeñas cuadras ▶

Llegue y me ubique en mi asiento, el que siempre uso y llegó Kath a mi asiento.

- Madrugadora, llegaste más temprano siendo que siempre llegas tarde - siempre llegó tarde aunque vivo a dos cuadras. Por alguna razón mi alarma se desactiva mágicamente.

- Si... es que anoche no dormí muy bien - ¡Por que me pase casi toda la puta noche pensando en ti y en tu condenada dulzura!

- Ahh... Si te hubieras quedado conmigo hubieras dormido bien - se acomodó el cabello que estaba algo húmedo y vi que su muñeca estaba adornada con la otra mitad de mi corazón... bueno, ¿Nuestro corazón?

- ¿Te gusto mi regalo? - Dijo cambiando el tema y sentí como me ruborizaba un poco.

- Me encantó... muchas gracias - Dije tratando desviar mi mirada pero era imposible no mirarla...

- Me alegro que te guste - me iba a tomar la mano pero justo tocó el timbre y empezaron las clases, ¿Por que siempre hay cosas que interrumpen las situaciones hermosas?

Las clases fueron aburridas y en el momento del receso no vi a Kath ya que se paró de mi lado y no se donde fue.

Se me acerco Rosse ◀ Una amiga que conocía hace muchos años y sabe todo sobre mi y yo de ella por alguna puta razón ▶

- ¿Te gusta? -

- Creo, Sólo un poco... -

- ¿Piensas decirle? -

- En mi cumpleaños - ósea el miércoles y hoy es Lunes. Lo sé, estoy loca por querer hacerlo pero lo haré y veré su reacción 1) por que yo no me enamoré por que quise y 2) ¡por que ella me hace sentir así, muy fleta!

- Yo nunca podré decirle lo que siento a Marie... Es muy testaruda y terca, dudo que de alguna forma me acepté - es verdad, Marie es demasiado terca.

- Rosse siempre estaré contigo, lo sabes -

- Lo sé idiota, yo igual contigo, ya me voy a mi puesto que si el profe llega y me ve hablando me sacará de clases - El profe le tiene mala, yo lo sé.

- Bien. - se sento en su puesto y sonó la campana para volver a entrar a clases, fue ahí cuando vi al profesor entrando por la puerta junto con Kath me sorprendió un poco ya que ese hombre era algo... no se... pesado, ¿O será por que odio las matemáticas?

- Tomaré en consideración sobre lo de Mica...- ah?... ese viejo dijo mi nombre... ¿Pero que mierda conmigo? No recuerdo haber echo nada malo...

- Muchas gracias - dijo Kath, sentándose en mi lado nuevamente. - Volví, Mica preciosa -

- No me digas así... nos miran raro... - le di un pequeño empujón hacia al lado para que separará su silla un tanto de la mía.

Me olvide de todo en las clases, debí estar así unos 45min y aún quedaba 1 hora. Fue cuando sentí que alguien tomaba mi mano y la empezaba a acariciar haciendo que volviera en mi.

- ¿Que mierda haces Kath? - susurre y ella me miro con una cara tierna. - El profe nos va a sermonear - no me soltaba, no se que le pasaba pero ya no importa, no es como si no me agradará sentir su tacto. Me encanta.

Cuando salimos de clases Kath me dio un beso en la mejilla y se fue muy rápido a su casa. Me hubiera gustado que ese beso pequeño que dio al final se agrandara lo suficiente como para estar feliz todo un día.

Tome mis cosas cuando me di cuenta que sólo estaba yo y el profe de matemáticas en la aula. Trate de escapar pero llamó mi atención.

- Señorita Mica, necesito hablar con usted - Mierda...

¿Dónde quedó mi corazón? [Yuri]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora