LO SIENTO, ME ENAMORÉ

Capítulo 19

Narra Daniel

Al día siguiente salgo al jardín para trabajar un rato, para después ir a servirles el desayuno a Manuel y sus hijas.

Suena la alarma de mi móvil indicándome que debo ir a preparar el desayuno.
Voy a la cocina a coger platos para llevarlos a la mesa.
Acabamos de preparar todo y Manuel y Alana bajan para desayunar.

-Buenos días -me dice ella.

-Buenos días -susurro solo para que me escuche ella.

Segundos después baja Lea por las escaleras bostezando mientras arrastra los pies.
Cuando me ve sonríe a lo que yo le devuelvo la sonrisa.

-¿Como has dormido? -susurro.

-Genial -sonríe.

Su padre y su hermana ya están en la mesa y por eso aprovecho cuando ella pasa golpearle el trasero pero sin hacer ruido.

-Imbécil -ríe flojo.

Finalmente se sienta en la mesa y yo empiezo a servir la comida en cada plato.

-Hija -dice el hombre. -Me han llamado de una empresa bastante importante de publicidad, que si quieres trabajar con ellos, han visto tus notas y...

Ella ríe sin dejar acabar la frase y él la mira confusa.

-Ya, mis notas -sonríe. -Dejé bachillerato sólo porque tú no querías -dice sería. -¿Así que son las notas, o que tú eres mi padre?

Él la miro furioso y abre la boca dispuesto a decirle algo pero yo lo interrumpo preguntándole que si quiere algo más.
Él niega serio y se levanta de la mesa dando un fuerte golpe en la mesa y marchándose a su despacho.

-Tata -la abraza ella. -Tengo que irme a la escuela -dice triste.

-Si, claro -sonríe. -Diviértete y aprende mucho enana

Alana deja un beso en la mejilla de su hermana y se marcha corriendo ya que la esperan fuera para llevarla al colegio.

Todos los empleados empiezan a recoger la mesa y cuando terminan se van hacer otras tareas, dejándome estar a solas con Lea.

-Nena... -susurro agarrándole de la mano.

-Suspira. -estoy cansada

-Lo sé -aseguro. -pero ya falta poco, te lo prometo

Ella deja caer su cabeza en mi pecho mientras cierra los ojos.

-¿Porque no vas a dormir? Apenas lo has hecho -digo preocupado.

-Lo siento, ayer tuve una cita -sonríe.

-¿A si?, y se puede saber quién es -digo sonriendo.

-Mi novio -ríe.

-Wow -digo bromeando. -Así que usted tiene novio -asiente. -¿Y como es?

-Pues... es un poco idiota, pesado, pervertido -sonríe. -pero es maravilloso a pesar de esto

La pego a mi y dejo un pequeño beso en sus labios.

-Ve a dormir -suplico mientras bosteza.

-Tú también, estuviste hasta tarde como yo

-Debo trabajar -susurro.

Ella agarra mi mano y me arrastra por la casa hasta llegar a su habitación.
Ella deshace la cama y se quita los pantalones para después tumbarse.
Me indica con un gesto que me tumbe en la cama con ella.

-No -niego.

-Joder moreno, ¿en serio?, prefieres ir a trabajar que quedarte a dormir con tú chica

Sonrío ante esas palabras, mi chica, eso es, ella es mi novia y me alegra tenerla junto a mi.

-Mm... -digo quitándome la camiseta.

Ella sonríe satisfecha y espera que me meta en la cama junto a ella.

-Eres una pesadilla -digo tumbándome.

Pone su cabeza en mi pecho y rodeo con mis brazos su cintura para pegarla más a mi.
Sin darnos cuenta nos quedamos dormidos debido al cansancio.

Me despierto debido a que está teniendo una pesadilla y está gritando.

-Ey... -susurro.

-Por favor, no más -dice llorando.

-Nena... -digo preocupado.

-Papá... -suplica.

Acaricio su rostro para que se despierte pero no lo hace. está en una pesadilla y parece que le va a costar despertarse.

-Despierta -digo agitándola.

-No voy hacerlo más, lo prometo -dice sollozando.

Finalmente se despierta llorando y en cuanto me ve se lanza a mis brazos sollozando mientras suplica que no la deje.

-Estoy aquí -susurro en su oído.

-Te quiero -solloza. -te quiero, moreno

CONTINUARÁ...