Una ci... Cumpleaños de ensueño

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—Hey, hey, hey, ¿Qué tanto están murmurando de mi?—Dijo Bill apareciendo detrás de nosotros.

—¿Por qué piensas que estamos hablando de ti?—El ex dorito le sonrió a Dipper y este frunció el ceño.

—¿Hay algún tema más interesante que yo?— Bill me sujeto de la cintura y me atrajo a él.— Pinetree, ella es mi novia. Little apple, Pinetree. 

De nuevo sentía esa tensión en el ambiente como cuando Bill llegó a por mi a la escuela anunciándose como mi novio y futuro esposo. 

—¡Bill!—Gritó Danielle lanzándose a sus brazos.— ¡Gracias, gracias, gracias! ¡Es el mejor cumpleaños de toda mi vida!

Nunca había visto a ratita tan feliz, ni siquiera la semana pasada cuando conoció a Tom Lucitor.

—Y se pondrá mejor, pequeña rubia.—Dijo Bill sonriendo ampliamente.—¿Que tal un paseo al pozo sin fondo? Después regresamos antes de la cena para los juegos artificiales.

¿Juegos artificiales? Bill se esta superando bastante... Esperen... ¡¿Pozo sin fondo?!

—¡¡SI...!!

—Nadie va a ir al pozo sin fondo.—Hablé tan alto que capté la atención de mis padres.

—Mou~, linda, no seas aguafiestas.—Dijo Bill aun con mi hermana en brazos. Fruncí el ceño.—Solo quiero que la pequeña rubia se lo pase de lo mejor en su cumpleaños.

—¿Que quisieron decir con ir al pozo sin fondo?—Preguntó Mabel acercándose a nosotros.—Nadie ira al pozo sin fondo.—Por fin, alguien que me apoya.—¡No antes de comer pastel! ¡Que mejor que probar tu fuerza intentando no vomitar mientras caes a un vacío de 3 horas!

—¡Acepto el reto! ¡A por el pastel!

Dios, esto será un locura.

Tanto Dipper como yo nos golpeamos la frente con la palma de nuestras manos antes las respuestas de las chicas.

—Hoy manda la cumpleañera~—Dijo el exdorito con voz cantarina.

Ugg, lo odio.

Después de cantarle un feliz cumpleaños a Danielle otra vez, que Bill lograra estrellar la cabeza de ratita en el pastel y que se empezara la segunda guerra de comida en el día, Bill se llevó a Danielle, Mabel y a mis padres al pozo sin fondo.

Por obvias razones, me negué a participar en ese reto o "Prueba de resistencia" como lo llamó papá, quien convenció a mamá de ir con él. Quedándome sola con Dipper, ayudándolo a limpiar los platos a pesar de las no tan disimuladas miradas de molestia de Bill por mi decisión.

—Me disculpo por el desorden.—Hablé después de que todo estuvo limpio.—Mi hermana es bastante hiperactiva.

—No te preocupes, Mabel es igual.—Sonrió apenado para después suspirar, fruncir el ceño y voltearse para mirarme a los ojos.—Bill no mentía sobre ti.—Me tensé.—Me hubiese gustado verte dispararle.

—¿Eh?—Me sonrojé de repente.—¿Q-que ha dicho sobre mi?

Dipper rió por lo bajo por mi reacción.

—Se la pasa diciendo lo bien que te vez incluso cuando le disparas en medio de una emboscada.—Maldito demonio...—Pensé que cuando apareció frente a nosotros y le preguntó a Mabel que hacer para que le préstaras atención él intentaba hacer que bajemos la guardia y pensáramos que había cambiado. No confiaba en el, y sigo sin hacerlo... Pero parece que tal vez, solo tal vez, Bill ya no es TAN malvado y egoísta como pensaba.

En ese momento recordé algo muy importante.

—Haces bien en no confiar en él.—Murmuré con la mirada perdida.—No lo hagas, no confíes en él.—Suspiro.—Dipper, no estoy muy segura de que Bill haya olvidado lo que le hicieron. El es mas complejo que nosotros por el simple hecho de no ser humano... Algo de lo que estoy completamente segura, es que Bill no se detiene cuando esta determinado a hacer algo...

¿Cuarta pared? ¡Ja!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora