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Brunilda

Llegamos al centro y dejo que Mateo se adelante, tomo mi teléfono y marco

Conversación telefónica

Hola Morelia, la llamo para invitarte a ti y a Mónica a cenar en casa

Bien me parece buena idea

Bien, los espero a las siete, hasta luego

Hasta luego

Luego de dar una vuelta llego con los chicos

...hola Brunilda

Madre ¿Donde estabas?- pregunta Mateo

Nada, yo... Di una vuelta por ahí, y ¿Como te fue?...

...

...Ya afuera del centro Mateo pregunta- Madre ¿Por que dijiste que tenía una cita? Lo hiciste parecer como si fuera con una mujer o algo así

Hijo no lo dije con esa intensión, vamos que se nos hace tarde.

Llegamos a casa- ah, hijo casi lo olvido, invité a Morelia a cenar hoy, vendrá con Mónica, obviamente

Mónica

~nosotros nos vamos que Mateo tiene una cita ahora~

Una cita, seguro es una mujer que lo tiene así y con ella era su cita. Tal vez por eso hoy estaba más arreglado, cielos, me costó mucho esfuerzo concentrarme en el trabajo y no en la forma como le quedaba la camiseta, ajustada en ese bien formado pecho o esos brazos tan musculosos o en ese perfume tan masculino que me tenía loca.

Que afortunada será la chica que lo tiene así.

...

Hija, olvidé decirte que Brunilda nos invitó a cenar hoy

¿Si? ¿A que hora?

A las siete

Luego de darme una ducha, me maquillo lo más natural posible, rimel y brillo labial. El cabello lo dejo suelto. Escojo un vestido a la rodilla color rosa, me gusta mucho, es sencillo, de tirantes y abierto hasta mitad de espalda, zapatos color blanco y estoy lista. Salgo de mi habitación para verificar si mamá necesita ayuda.

Mamá que bien te ves bien- le digo por el vestido que tiene, fue un regalo de cumpleaños, es color azul royal con zapatos del mismo color.

Vamos que se nos hace tarde

Mamá, tienes una cita y no se nada- le pregunto en forma de burla

No seas ridícula que ya no estoy para eso, pero tu si ¿No serás tu la que tiene la cita y me lleva de chaperona?- me dice

Mamá vamos antes de que se nos haga tarde- le digo intentando cambiar el tema

Mateo

Luego de darme una ducha, pienso que ponerme, algo que parezca casual, pero que se vea bien, parezco una mujer, como si fuera una cita. Me visto de manera sencilla, pantalón de vestir color gris y una camisa color blanca, me perfumo y listo. Escucho que tocan el timbre, debe ser ella pienso, no sé ni porque estoy nervioso.

Respiro profundo para tranquilizarme y salgo de mi habitación. Llego a la sala y escucho a mi madre.

Buenas noches Mónica, Morelia, adelante están en su casa

Buenas noches Brunilda- dicen las dos

Llego hasta la sala y quedo impactado con lo que veo, Mónica se ve increíble, trago duro- buenas noches Morelia, Mónica, debo decirles que se ven muy hermosas.

Digo, pero veo a Mónica quien se sonroja

muchas gracias hijo, hace mucho que nadie me decía algo asi- dice Morelia.

Mónica y yo nos vemos por un rato hasta que madre rompe el silencio- bien, pasemos a la mesa.

Eh...si quieres le ayudo a servirla Brunilda- dice Mónica

Si gracias, Mateo acompaña Morelia a la mesa- dice mi madre

Aclaro mi garganta- vamos Morelia

Él es MateoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora