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- No la encuentro por ninguna lado -Habló Lalisa. Hace más de media hora nos habían dado la noticia de que habían visto a Jisoo, más no sabían dónde se había metido.

- ¿Y si nos mintieron? -Preguntó. Mi contraria me mira y niega. - Yuqi nunca nos mentiría.

- Tienes razón.

Caminamos un poco más hasta que finalmente decidimos descansar. Hoy por la tarde tendríamos una competencia, por lo cual agotar mis energías no eran del todo una opción. Nos sentamos en el pasto, el cual tenía una vista a la piscina del campamento. Mientras miraba a las campistas nadar; me cuestionaba el por qué nunca me había metido. Este campamento tenía todo lo que cualquier adolescente pudiera querer. Todo menos internet.

Campos de Basketball, Nets de voleibol.... Tiendas de comida chatarra, pequeños barcos supervisados por si querías dar un paseo por el gran lago que separaba el Campamento O'nil y Beata... entre más cosas donde podrías divertirte y distraerte fácilmente.

Joder. No he disfrutado mis vacaciones como debería.

- ¿Qué sucedió entre Jisoo y tú? -Apartó la mirada hacia ella. No sabía si contarle lo que le había hecho. Ella se había abierto para mi, me mostró su parte más débil, y yo...

- Tuvimos una discusión. -Suspire-. Y no me mires así. -La regañó al sentir su mirada fulminante en mi persona.

- Jisoo podrá ser una idiota de primera; sin embargo, ella no suele reaccionar mal por un culo, ni mucho menos darle importancia a una de sus conquistas a tal grado de desaparecer. Perdóname si te ofendo, pero así las cosas.

Me encogí de hombros, subí mi mirada y me tiré en el pasto. Sentía el aire fresco azotar mi rostro, el sonido del agua y las características risas de mi entorno.- ¿Cómo vas con Rosé? -Cuestionó en un intento de huir del tema. Ella se da cuenta, rueda los ojos y se echa a mi lado.

- Solo hemos intercambiado las palabras justas y necesarias como para convivir en paz. Ya no tengo ningún otro reporte. Parece como si... -Arrastra las palabras y voltea su cabeza hasta donde se encontraba la mía. Hago el mismo movimiento, provocando que nuestros ojos se conectaran.- Como si no nos conociéramos. Extrañas... desconocidas. Creo que ya entiendes mi punto.

- ¿Aún sigue en pie tus planes de volver a Tailandia? -Lisa me mira, aprieta su mandíbula y asiente.

- Es algo aún de discutir. Pero... -Hace una pausa para enfocar su mirada hacia el cielo-. No tengo nada que hacer en aquí. Mi familia y amigos están en mi país natal. -Se encoge de hombros- Creo que esa es la mejor decisión.

- Hmm... ya veo. Entonces, ¿Todo entre tú y Rosé terminó?

- Bingo. Atinaste, eres la ganadora. Felicidades, eh.

- No es necesario usar el sarcasmo ahora mismo, Lalisa.

Antes que pudiera seguir nuestra "amena" conversación; somos interrumpidas por la presencia de Rosé y Jisoo, quienes se encontraban en ropa de baño... apuntó de meterse a la piscina.

- Wow... -Miró a Lalisa con un ceño fruncido, luego me enfoco a donde sus ojos se estaban dirigiendo; en nadie más ni menos que Rosé.

- Cuidado se te entra una mosca. -Apenas artículo esas palabras; Lisa cierra su boca y me mira. - Es una diosa...

- Y todo eso pudo ser tuyo... -Arrastró las palabras en un tono burlón.

- Ella se irá con Jisoo. Mucho no puedo hacer... -Su repentina pausa llama mi atención- Y hablando de Jisoo...

Arqueo una ceja. Devuelvo mi mirada a la piscina y... ¡Oh! Vaya sorpresa.

- Están coqueteando con tu mujer, ¿no harás nada al respecto? -La fulminó con la mirada.- No digas tonte... -Mi vista vuelva a enfocarse a la piscina; IU estaba abrazando a Jisoo por la espalda, y ella no parecía tener mucho inconveniente con eso.

CAMPAMENTO DE LESBIANAS | JENSOO & CHAELISA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora