CAMPAMENTO DE LESBIANAS | JENSOO & CHAELISA

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- ¡Es una completa tonta! -Exclamó la castaña. Lalisa rodó los ojos y luego le pasó una de sus toallas.- ¿Ya pensaste la forma en la que arreglarás las cosas con ella? -Cuestiona ignorando el notable enojo de su contraria.

- ¡No me disculpare con esa inmadura! ¿Yo peleándome con alguien por ella? ¡Claro que no! -Escupe- Estúpida Jisoo... -Agrega en un tono más bajo.

- Pero es básicamente lo que estabas haciendo con IU -Responde con obviedad.

Antes que Jennie pudiera contestar; la puerta sonó en pequeños golpes. Lalisa va y gira la perilla para ver de quien se trataba.

- ¿R-Rosé...? -Tartamudea. La australiana se encoge de hombros - Hola, ¿puedo pasar? -La tailandesa asiente y abre más la puerta para que pueda ingresar.

La mirada de Jennie sube hasta la nueva presencia, ladea su cabeza y hace un seña para que Rosé hablara.

- Ehm... solo vine a ver si estabas bien.

- Estoy de maravilla. Solamente trague agua, se me rompió mi collar, me duelen las piernas y casi me ahogo en mitad del campamento.

- Jennie -La tailandesa le reprochó su conducta ante Rosé.

- Está bien, Lalisa. Es normal que esté molesta -Emboza una pequeña sonrisa que logró alborotar todos los sentidos de la rubia.

- Lo siento. Solo que Jisoo...

- Entiendo. Tampoco creo que...

La puerta sonó otra vez.

Lalisa se paró y camino nuevamente a ver de quien se trataba.

- ¿Jisoo? -La mencionada apenas sonrió, alzó su mano y la agitó como una señal de saludo. -¿Está Jennie? -Su respuesta fue respondida al momento que hizo contacto visual con la castaña, segundos después apartó la mirada hasta donde estaba su amiga- ¿Rosé? ¿Qué haces aquí?

- ¿Qué quieres Jisoo? -Interrumpe la morena antes que la australiana pudiera responder.

Jisoo mira con ojos suplicantes a Lalisa, quien rueda los ojos y la deja ingresar a pesar de las quejas de Jennie.

- Ehm... -Aclara su garganta- Vine a discúlpame por si te ofendió algún comentario que hice. No era mi intención... ¿Podemos hablar...?

- Bueno. Creo que nosotras ya nos vamos, ¿Cierto, Lalisa? - La mencionada arrugó su frente, miró hacia Rosé y asintió al captar la indirecta.

[...]

Me sentía completamente nerviosa y algo emocionada al irme junto a Rosé. Sin embargo, el pequeño temor de separarnos cuando cruzáramos aquella puerta me comenzó a inquietar. Soy consciente que tuve mayor culpa en todo lo qué pasó entre nosotras, pero... No voy a negar que estar a su lado me fascina, tal y como los primeros días que nos conocimos.

Al cerrar la puerta y dejar a Jennie y Jisoo solas, un sentimiento extralo recorrió mi cuerpo. Suspire.- ¿Podemos hablar? -Cuestione. Rosé volteó a verme un tanto sorprendida.

- Claro...

- Ven. Te quiero mostrar algo -Tome su mano tratando de ignorar el revoloteo de las mariposas en mi estomago. Hasta el más mínimo contacto podía afectarme, quién lo diría.

- ¿Adónde vamos? -Pare en seco. Volteó para estar frente a frente. -Confía en mi -Respondo con una sonrisa dibujada en mis labios.

Caminamos entre arbustos que impedían nuestro paso. Tal y como lo recodaba. Sonreí al ver aquel pequeño lago con agua cristalina, el cual era decorado por un puente de madera lleno de fango debido al poco uso.