♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪♪
—¿Hay televisión?
Hinata no podía creer que no supiera tal dato, pues ya no era precisamente nueva en la mansión. Con todo ese tiempo viviendo ahí, acababa de descubrir la sala con la televisión empotrada en la pared.
—Sí, pero casi nadie la usa. — Le respondió Sai.
La joven encendió el aparato y se sentó en uno de los mullidos sillones, cambiando con el control remoto de canales.
—¿Porqué no estás con Naruto? — Preguntó Hinata de repente al ver que el chico no se iba.
—Dentro de la mansión no es necesario, nadie está tan loco como para entrar en una zona llena de Uzumakis. Aún así, tengo cosas que hacer, con permiso.
La pelinegra rió un poco por las palabras de Sai, luego éste se retiró, dejándola sola.
Había estado evitando a su esposo durante tres días seguidos, casi cuatro ya que estaba anocheciendo. Ese día pasó muchas horas encerrada en su habitación, incluso le llevaron el almuerzo, pero se había aburrido tanto que salió y buscando la biblioteca se perdió, encontrando la sala de la televisión.
Si lo que había dicho Sai era cierto, en ese lugar nadie la molestaría, así que subió los pies sobre un cojín, cuidando de que no se corriera tanto su vestido, y posó su vista en un canal sobre animales. No supo cuanto tiempo pasó ahí, no le prestaba mucha atención a la TV, estaba sumida en sus pensamientos. Recordaba lo que había dicho Lord Nagare, no lograba otra cosa últimamente, las divagaciones le hacían pensar que tal vez Naruto estuviera enamorado de Innoue, por eso había tomado tan mal que lo obligaran a casarse con alguien más. Y eso le dolía, porque si era así, no había posibilidad de que su esposo la quisiera a ella.
—¿Porqué no fuiste a cenar?
Hinata dió un respingo y miró hacia donde provenía la voz que tan bien se había grabado.
—No tengo hambre. — Contestó para después volver su vista a la pantalla.
Naruto tomó las piernas de su esposa y se sentó donde antes estaban éstas, luego las colocó en su regazo. Ella trató de alejarse pero él no la dejó.
—¿Qué tienes? — Le preguntó el rubio. El comportamiento de su esposa era sumamente extraño.
—Nada. — La voz de la joven era cortante, se notaba a leguas la diferencia de como hablaba normalmente.
—¿Quieres decir que por "nada" me has estado ignorando durante días?
Ella subió un poco más el volumen de la televisión, y volvió intentar bajar sus piernas de él, pues llevaba vestido y se le hacía incómodo desear que la tocara cuando se supone que estaba molesta con él. Naruto afianzó el agarré y le impidió hacer lo que quería.
—¿Te puedes ir? Trato de ver la televisión. — Dijo ella alzando un poco la voz.
—Es más que obvio que estás molesta por algo. — La miró fijamente con el entrecejo fruncido, dispuesto a hacerla hablar. Había estado ocupado y no tuvo tiempo de abordarla a solas hasta ese momento, y lo aprovecharía.
—No es nada.
—Preciosa, no sé lo que...
—No me llames así, anda y díselo a Innoue. — Hinata se mordió el interior de la mejilla al darse cuenta de lo que había dicho.
—¿Qué diablos tiene que ver mi prima en ésto? — Preguntó Naruto con confusión. Ella no quería responder. — ¿Qué tiene que ver? — Repitió.
![](https://img.wattpad.com/cover/190804574-288-k600407.jpg)
ESTÁS LEYENDO
»A pesar de todo me volvería a casar contigo«
RomanceNaruto Uzumaki, heredero y futuro líder del clan Uzumaki, debe encontrar una esposa. Su tío abuelo Ashina le ha dado dos opciones: Escoger la mujer que quiera en dos semanas, o casarse con la que el consejo le elija a finales del mes. El tiempo apre...