Encontrar la salida de la mazmorra fue bastante tardío para Kazuma, pero finalmente encontró una puerta que daba al exterior de la mazmorra...sin embargo, no iba a irse así nomás, no con un enorme monstruo licantropo obstruyendo su camino.
La criatura medía como 4 metros de altura, su pelaje era negro y sucio, sus ojos brillaban en un amarillo monstruoso y de sus fauses llenas se dientes afilados se escurría su saliva posiblemente tóxica.
Kazuma debía derrotarlo si quería salir de allí, rapidamente, desenfundó a Durandarte, y arremetió contra la bestia dispuesto a darle un tajo a su pierna derecha, pero...
-Gha!-de alguna manera la criatura predijo el movimiento de Kazuma y conecto el dorso de su mano con el pecho del castaño en un poderoso golpe que envió al castaño a chocar contra la pared de la habitación.
Crack
-ghaaaah!-Kazuma gritó sonoramente, sientiendo un dolor punzante en su brazo izquierdo, al mirar aquella parte de su cuerpo, y pese a no ver heridas superficiales, el sabía que su brazo estaba roto, tambien sentía que algunas de sus costillas se habían quebrado.
Fue entonces que Kazuma entró en cuenta de algo...
Era fragil...
Como una rama.
Su cuerpo al moverse a altas velocidades se arriesgaba a que si una fuerza en contra que fuera superior a la fuerza que el impone al avanzar, su cuerpo se destrozaría, sabía bien que ese golpe no lo mató debido a su resistencia alta.
Para moverse a altas velocidades con un cuerpo humano se requiere de una enorme resistencia y que se anule la fricción por el movimiento, podía intuir que los poderes magicos de Durandarte se encargaban de eso, pero aun así ¿ahora que iba a hacer?
"Kazuma, no te rindas!"
La voz de Durandarte le alentaba, con algo de esfuerzo logró ponerse de pie, escuchaba los pasos de la bestia aproximarse a el, debía ganar tiempo para idear algo...
-desaparecer-y como por arte de magia Kazuma desapareció, la bestia se quedó estupefacta y miró a su alrededor, no percibía su olor, y tampoco escuchaba sonidos-Durandarte...no creo...no creo poder levantarme...me duele todo el cuerpo, je...bastó con un golpe para derribarme...creo que voy a morir aquí...-pensaba el castaño con una triste sonrisa.
"Kazuma! Lo que sea que estes pensando, no te des por vencido! Aun puedes ganar, te dare todo eo poder que tengo disponible en este momento, pero debes ponerte de pie para pelear!"
-Durandarte...-Kazuma apretó los puños-estoy tan cansado...esa perra haciendose llamar diosa, me abandonó y luego esos malditos me engañaron, y me trajeron hasta aquí para morir!-apretando los dientes, Kazuma comenzó a ponerse de pie-este maldito mundo...no ha sido más que una pesadilla desde que llegue aquí! Pero...pero!-finalmenre Kazuma logró ponerse de pie y miró a la bestia frente a el-si me rindo ahora...habre perdido contra este maldito mundo-con su brazo derecho aun sano, empuñó a Durandarte con su mano diestra-ahora, Durandarte!-.
-grrr-el monstruo licantropo vio a Kazuma reaparecer en su sitio, y no dudó en atacarlo inmediatamente.
Fue entonces que Kazuma lanzó a durandarte hacia el hombro izquierdo de la bestia, y justo antes de que el golpe impacte contra el, desapareció.
La bestia abrió los ojos como platos al ver a Kazuma reapareciendo delante de el, atrapando a Durandarte en su mano diestra.
-blade...teleport! Ahhhh!-Kazuma clavó la cuchilla negra en el hombro de la criatura la cual chilló de dolor-hm...grrrr!-con todas sus fuerzas Kazuma empujó la hoja de durandarte por todo el hombro de la criatura y su brazo cayó al suelo, Kazuma aterrizó de pie junto al brazo recién amputado del monstruo y apuntó la hoja de durandarte hacia el-un brazo por un brazo, es como dice el dicho, ojo por ojo y diente por diente!-
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KonoSuba: Bendita Sea Mi Suerte
FanficKazuma es abandonado por Aqua, dejando al joven aventurero a su suerte ¿Qué hará Kazuma ahora para sobrevivir en un mundo lleno de gente sin sentido común? ¿logrará vencer al rey demonio? ¿o al menos podrá mantenerse con vida? Solo la suerte lo dira...