KonoSuba: Bendita Sea Mi Suerte

¡¿No puedo disfrutar en este maldito mundo?!

Advertencia: Fanservice probablemente mal hecho pero al fin y al cabo el morbo vende y ustedes esperaron esto por mucho tiempo, así que...

Kazuma estaba ansioso, realmente emocionado. Finalmente.

¡Finalmente podría librarse de todo el estrés sexual que tuvo por semanas!

Desde que había llegado a este mundo, aquel problema se había acrecentado con el tiempo, poco a poco comenzó a dejar de sentirse satisfecho con sus...trabajos manuales.

Pero finalmente había encontrado un lugar que era perfecto para el!

Demonios, bendito sea Dust por hablarle de este lugar.

Ya estaba siendo hora, lo sentía, no perdió mucho tiempo y se quitó sus cinturones, camiseta, chaleco y guantes, estaba desnudo de la cintura para arriba, luego se quitó sus botas, y se recostó en la cama de la habitación privada.

Finalmente...cerró los ojos y escuchó la puerta abrirse.

-"hmm...estaba esperando su llegada, dios no he podido dormirme aun! Vamos! Duérmete! Duermete!"-. Fueron los pensamientos del castaño mientras trataba de consiliar el sueño. -"espera, ¿pero no se supone que ella podría hacerme dormir?"-.

-Kazuma~-.

-"¿eh? Sabe mi nombre? Por supuesto que si, si di mi nombre en el formulario, despues de todo son profesionales, estas succubos"-.

-Kazuma~-.

-"¡espera un segundo! Esta voz es..."-. El castaño abrió los ojos de golpe cuando sintió un peso sobre su regazo y un par de manos sobre su pecho encontrandose de frente con la mirada de un par de hermosos ojos dorados y brillantes. -¡¿Tiamat?!-.

-te hee~-. La diosa caída rió en respuesta y acercó su rostro a escasos centimetros del de Kazuma. -Kazuma~ ¿que crees que haces aquí? ¿No es este un burdel? ¿O más bien un burdel de sueños? Ufufufu, he de admitir que es interesante, pero más interesante me resultan tus motivos de estar aquí~-. La mostró una sonrisa afilada, emitiendo un aura oscura, cosa que puso de los nervios al castaño.

-yo...-.

-cierra la boca-. Tiamat afiló la mirada y Kazuma guardó silencio sintiendo que no estaba en condición de responder. -siempre supe que eras un pervertido, pero en serio eres capaz de intentar engañarme para escaparte a cumplir tus fantasías? ¿Dónde quedó la confianza~? Com-pa-ñe-ro-.

-hm...a veces los hombres tienen sus necesidades, yo no he hecho nada malo! Ugh!-. Kazuma se tensó cuando sintió el punzante dolor de una mordida en el lado izquierdo de su cuello, Tiamat lo estaba mordiendo!

-hmm~-. La albina se apartó tras unos segundos, relamiendo las pequeñas gotas de sangre que había obtenido. -ha pasado un tiempo desde que me diste de tu sangre compañero~ ¿acaso ya no quieres alimentar a tu querida compañera~?-. La pregunta fue en tono juguetón, Kazuma lo sabia, se estaba burlando de el.

-¡no juegues conmigo!-. El castaño se giró sobre si para cambiar las pocisiones de ambos, ahora el estaba encima de ella, mirandola fijamente a los ojos.

-¡hm! Hey~ tranquilo, solo estoy jugando, ufufufu-. La albina rio y extendió su mano derecha a la mejilla del castaño para brindarle una suave caricia. -seguro debes saber lo que significa el que me des tu sangre, pero está bien, nunca lo tomé como cortejo, siempre fui consciente de que no tenías ni idea, pero me hacía feliz que me alimentaras con tanto cariño-.

-hm...-. Kazuma en respuesta tomó la mano que acariciaba su mejilla, viendose levemente ruborizado. -yo...solo quería ayudarte a ser más fuerte-.