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-es bueno volver- respiro profundo ya dentro de mi departamento

Me dieron de alta en el hospital, aunque me dijeron que no debo ir a trabajar. Me hubiera negado, pero últimamente creo que el trabajo no es totalmente una prioridad vital y simplemente dije que sí.

Tengo que estar en casa, una semana, según el doctor, para recuperar mis energías ya que mi corazón paró por un instante, pero la reacción de scourge al darme rcp me salvó de que muriera mi cerebro. Logrando darme oxígeno y reactivar mi órgano vital.

Son las palabras exactas que dijo. Fue una maniobra rápida.

Dejo mis cosas al lado de la puerta mientras scourge cierra, ha estado un poco ausente desde que zhadow llegó a disculparse, y que yo lo disculpara.

En realidad lo hice para vaciar mi pecho de ese incomodo sentimiento, pero disculparlo no quiere decir que quiera hablarle o tan siquiera verlo. Me molesta el hecho de que haya roto su promesa hacia mí después del truco de eggman nega.

Costó que recobrar la confianza en él en ese tiempo, ahora no pienso ni darle la oportunidad de recuperarla.

-scourge- llamo al verdoso, voltea a verme. No encuentro expresión alguna, es como si me viera en el espejo –que te sucede?-

-a mí? Nada- se voltea y va a la cocina

-claro que si te pasa algo, no creas que no noto tu cambio de actitud- lo sigo

-milagro- toma algunas cosas del refrigerador para preparar la cena

-scourge- lo tomo de la muñeca y lo jalo para que me preste atención

Odio cuando me ignoran

-dilo de una vez o lo sacaré a la fuerza- lo miro directo a los ojos y él hace lo mismo

Estamos cerca el uno al otro y puedo sentir su respiración, mi corazón comienza a retumbar.

-tsk- ahora él me toma a mí y me empuja hasta la pared, sujeta ambas de mis muñecas con fuerza colocándolas a cada lado de mi cabeza –cómo? Dime como mierdas puedes perdonar a un pedazo de porquería que casi te mata por incompetente? Por qué no dejaste que lo asesinara en ese maldito instante? Dime!- Aprieta mucho el agarre que tiene contra mí, me duele un poco, quiero apartarlo y golpearlo por su atrevimiento, pero su mirada no me deja. Refleja una gran molestia y frialdad. Me roba el aliento, pero no de buena manera.

-no...- no puedo hablar, esta sensación. Este, este leve temblor, yo...

Respiro cerrando los ojos, me está intimidando, mierda, le estoy comenzando a temer un poco. Abro los ojos de nuevo, mirándolo directamente otra vez.

-fue porque, no quiero recordarlo más- susurro, no puedo hablar más fuerte, no me siento capaz.

No entiendo que me sucede, no lo comprendo. Su agarre se afloja un poco, parece más relajado, pero no dice nada. Quiere que siga hablando

-si lo odio lo recordaré, no podré sacarlo de mi mente, lo quiero lejos, lejos de mí, de mis recuerdos, de mis pensamientos, por eso lo disculpé, porque quiero olvidarlo- sigue viéndome, me suelta

Todo se queda en silencio por un momento. Y de la nada deja caer su cabeza en mi hombro, recostándose en él.

Que le sucede? Por qué ese tipo de reacción?

Es un alivio, un gran alivio para mi mente saber que ese maldito pedazo de escoria mal parida estará tan lejos que no lo veremos más. Me hace tan feliz sacar este pensamiento tan mierda que tenía en mi mente.

Sin Escape (Zonourge)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora