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Abro los ojos lentamente, mirando una luz fuerte que molesta un poco mi visión. Parpadeo para acostumbrarme lográndolo segundos después, me encuentro en una habitación completamente blanca, con luces algo fuertes, veo mi alrededor, encontrándome varios utensilios de enfermería, desde jeringas hasta las maquinas para medir los latidos. Mi olfato detecta alcohol y posiblemente desinfectante de los potentes. Suspiro, estoy en un hospital.  

-comandante, al fin despierta- escucho una voz femenina, volteo a ver a la dueña de la voz, encontrándome con zouge the bat, la enfermera principal de la zone cop, significa que estoy en el cuartel? 

-Zouge- saludo -como llegue?- me trato de levantar, pero un dolor en el abdomen y otro en mi cadera me lo impiden, termino sentado levemente en lo que parece ser la camilla. 

-le recomiendo que no se mueva mucho- me obliga a recostarme empujándome levemente del pecho -y como llego, simplemente fue traído por zector y zpio después de capturar a scourge- su entrecejo se frunce demostrando molestia -ese bastardo al fin esta donde merece, después de herirlo y cerrar la herida para hacerlo sufrir- lo ultimo lo susurra entre leves gruñidos, se nota molesta 

Aunque en realidad, no es eso lo que pasó, el... el simplemente me salvo de morir desangrado, no fue culpa de el que yo cayera de mala forma y que me ensartara esa piedra en el abdomen. 

-ya no importa- me saca de mis recuerdos -el general dijo que debe descansar y que no se aparezca en el trabajo hasta que yo le de el permiso necesario- sonríe levemente sintiéndose poderosa, no se cuantas veces he visto esa sonrisa en los oficiales cuando dejo que uno me derrote en los entrenamientos

-bien- suspiro, odio estar en la enfermería, es molesto, tengo muchas cosas que hacer, especialmente papeleos y ver las pantallas dimensionales -con una condición- 

-cual seria esa comandante?- se borra su sonrisa 

-que traigan los documentos acumulados en mi escritorio- lo miro de lado, viendo como se molesta 

-pero... comandante zonic- parece querer regañarme, no lo hace al ver que me levanto de nuevo, me toma de los hombros deteniéndome -si así se quedará quieto en la camilla, le pediré al oficial zhadow traerlo- se resigna y me recuesta de nuevo

-gracias- me recuesto y ella se retira derrotada

Scourge the hedgehog, es lo primero que me viene a la mente al estar solo, al cerrar los ojos solo logro suspirar, sintiendo de nuevo esos toques en mi piel, delicados, precisos, mi cuerpo se volvió loco por su culpa. Mi cara comienza a arder al recordar su aliento, menta, un poco de licor y tabaco revueltos. Recuerdo sus labios; eran ásperos, resaltaba el sabor a tabaco en ellos, pero era algo dulces al mismo tiempo. 

Jadeo un poco y abro los ojos para tapar la mitad de mi rostro con mi mano, deja de pensar en el zonic, es un criminal mas de tu lista de capturados, es cruel, ambicioso, y muy sexy.

Sexy? 

-comandante- volteo a ver a la puerta de la pequeña sala, viendo al erizo moreno ingresar con un monto de papeles que debo revisar, por desgracia, es la parte que menos me agrada del trabajo, pero la debo hacer de todas maneras 

-zhadow- saludo y uso el botón que está al lado de la camilla para reclinara un poco y quedar medio sentado, aunque estar así me provoca un leve dolor punzante en la retaguardia, pero puedo soportarlo.  

Zhadow toma una de las mesas que es para dejar alimentos y me lo coloca junto a los papeles, los bolígrafos y sellos que necesito, y de forma generosa una taza de café 

-gracias- sonrió levemente y tomo un poco de café, detectando algo en el, algo nuevo y conocido a la vez -que tiene el café?- miro al moreno al separar la taza de mis labios

-es café mentolado comandante, una nueva adquisición, pensé que le gustaría- sonríe rascándose detrás de la oreja izquierda, nervioso y algo sonrojado, vergüenza quizás?

Vuelvo a beber otro sorbo, esta vez cerrando los ojos, solo una palabra viene a mi mente mientras disfruto de mi café

scourge

-aquí es tu nuevo hogar scourge- dice el grandullón mamero, pendejo y que parece tener músculos hasta en la cola. Pinche traga asteroides. El y otro mas enano me arrastran de un brazo pasando por un pasillo hecho de puro metal, las puertas solo poseen rendijas para ver a los que están adentro

Parece mas un manicomio que una prisión de alta seguridad. Se detienen en una de las puertas, la abren con algún tipo de contraseña y me tiran dentro como si fuera un juguete de goma -espero disfrutes tu nueva estancia- ríe y marca de nuevo los números cerrando la puerta

Gruño desde mi garganta, faltas de sacar una daga y rebanarle todo el cuello hasta abrirle el pecho y sacarle las cuerdas vocales, no me faltan. Si tan solo no me hubieran quitado mi chaqueta, allí traía mi daga. 

Ahora estoy vestido de un puto overol naranja muy horrendo que no va para nada con mi pelaje, menos con mis ojos. Me levanto del suelo como puedo, no tuvieron ni siquiera la dignidad de quitarme las malditas esposas de los pies y las muñecas. Parezco gusano tratando de moverme hasta la cama. 

Cuando lo logro me recuesto mirando la pared, cansado de tanto esfuerzo, por culpa del estúpido collar que me colocaron que evita que use mis poderes, mi energía se mantiene bajo el limite. Me es molesto cansarme con cualquier cosa. 

Suspiro de mala gana, sintiendo mi estomago gruñir, desde la tarde de ayer no he comido nada, por culpa del robocop que llego a molestar a la guarida y después caímos a esos túneles. Al salir me arrestaron y me estuvieron llevando de aquí para allá como si fuera no se que cosa. No comí ni mierda en un día entero. 

De la nada se me sale una sonrisa a recordar los túneles, cierro los ojos para concentrarme en las imágenes de mi mente, zonic todo sumiso ante mi, sonrojado, jadeando, su cuerpo tan sexy y su mirada tan potente que me hace querer romperla una vez mas, que me desee a mi, que gima mi nombre. 

No puedo evitar bajar mi mano a mi entrepierna, sobre el overol, joder, solo de recordar esa escena me he puesto duro, maldito mini yo, no puedes controlarte aunque sea tantito? 

Abro un poco las piernas, usando mis dos manos para acariciar sobre el tonto traje, ya que no me lo puedo quitar. En mi mente ronda esos ojos esmeralda brillosos por las lagrimas, y su cuerpo tan estructural y desgraciadamente delicioso. Deseo poseerlo de nuevo, que gima mi nombre de nuevo. Quiero dejar mas marcas en su cuello, que digan que soy el primero, que soy el único que a logrado llevarlo al infierno y al paraíso al mismo tiempo. 

-ah maldita sea zonic~- me arqueo un poco, sigo tocándome, imaginándolo a el, en muchas posiciones, pidiéndome a mi, deseando mas. -agh!~ mierda!~- me corro manchando el tonto traje de prisión 

Jadeo con fuerza, mirando al techo, no puedo evitar reír un poco de una forma algo histérica y fuera de si, se nota que estoy loco, quizás hasta demente, pero creo que, me estoy obsesionando con el robocop.

Sin Escape (Zonourge)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora