❝General Lee❞ ➳『•MinSung•』

15: ❝No todo es tan malo❞

MinHo suspiró, dejando los papeles a un lado y masajeandose las sienes, se inclinó en la silla y miró el techo de su oficina.

—¿Todo bien?—Preguntó HyunJin a su lado, quien había llegado para checar el correo que le había llegado hace unas horas.

—Están pidiendo a los reclutas, hay un atentado con la mafia de japón y... —MinHo suspiró de nuevo. —Ellos no están listos, no están listos en lo absoluto, ni siquiera saben como cargar un arma.

—Bueno no puedes culparte por eso, ocurrieron muchas cosas en el cuartel.

—No, en el cuartel no. Le ocurrieron muchas cosas a Han. —Dijo y HyunJin lo miró.

—¿Qué estás diciendo?

—Eso mismo, si no hubiese puesto toda mi atención en un recluta estaríamos listos para esto, maldición, estaríamos listos para cualquier cosa.

—MinHo esto que pasó no estaba previsto, él enfermó, fue abusado ¿Estás acaso culpándote por esto? 

—Estoy culpándome por prestarle tanta atención ¿Si? Tenía a Chan e incluso a ti ¿Por qué demonios estuve con él todo el maldito tiempo?

HyunJin lo miró, desde que conocía a MinHo lo había visto arrepentirse de muchas cosas; en preparatoria se había arrepentido de no haber invitado al baile a SolHyun y estuvo toda la semana lamentándose, en la guerra, MinHo se arrepintió de haber lanzado la última bomba pues pudo utilizarla después.

Pero nunca por algo tan insignificante como esto.

HyunJin se preguntó por qué le daba tanta importancia.

—Tal vez porque no querías ver a alguien más morir. —Dijo y MinHo lo miró aturdido.

—Ah, veo morir personas todo el tiempo, vi morir a mi padre, a mi mejor amigo, una muerte más... no hará daño. —Dijo y HyunJin hizo una mueca. La guerra te vuelve insensible. —Sólo que.. Había algo con verlo morir a él que me... Inquietaba, no quería que pasara pero sabía que no podía hacer nada al respecto.

HyunJin pensó por unos segundos que decir, MinHo había tenido crisis como estas, claro que si. Pero la última vez que lo vio así, no era nada normal, de hecho, fue hace siete años, MinHo estaba confundido y frustrado.

Por un chico.

HyunJin recordó entonces, que en ese tiempo, a MinHo no le importaba con quien salía, si era hombre o mujer, demonios, incluso si era ambos, a MinHo no le importaba porque él siempre decía que el corazón es quien elige. Le dijo lo mismo a él cuando le confesó que era homosexual.

“HyunJin, creo realmente que las personas se enamoran de corazones, no de hombres y mujeres así que, si quieres buscarte un hombre increíble y con un buen corazón, estaré ahí orgulloso de ti.”

Puede que ese día MinHo haya estado algo ebrio, pero los ancianos dicen, que nadie es más sincero que un niño pequeño y una persona ebria.

HyunJin miró a MinHo.

—¿Él te gusta?—Fue directo, lo que pareció alterar al general, que enseguida lo miró mal y comenzó a negar con la cabeza.

—¿Estás drogado?—Preguntó bruzcamente. —Soy hetero, HyunJin, tengo una prometida.

—Una prometida de la que no estás enamorado.

MinHo se masajeó de nuevo las sienes.

—¿Y eso qué? Voy a casarme.

—¿Si? ¿Dónde está el MinHo que hace siete años me dijo que las personas se enamoraban de corazones?

—Es distinto, HyunJin, crecí.