El Divorcio

Capítulo 14

--¡¡Siwon!! --Estella lo sujeto por el brazo antes de que abriera la puerta --. Yo. . . Te creo. . .
--Pues no lo parece Ella -- Siwon se puso frente a ella. --Tu sabes como fue la vida de mi madre junto a mi padre, termino despreciándolo por lo que la hizo pasar, ¿Crees que te haría lo mismo? ¿Crees que nos haríamos eso? No Ella, yo valgo un poco más.

--Siwon, yo no te desprecio.

--Entonces, ¿por que Ella? Estoy aquí dándote toda la sinceridad de la que soy capaz, intentando. . . de todo para que me creas, pero veo que no es posible. --hizo el intento de ir de nuevo a la puerta pero Estella a un lo sujetaba por el brazo.-- No pienso seguir humillándome de esta manera, tampoco pienso terminar mis días llorando por una mujer que ya no quiere nada de mi. Si tu has podido vivir sin mi, yo también puedo hacerlo.-- halo el brazo que ella sostenida, debía salir de allí, con el poco orgullo que le quedaba intacto.
Estella sentía el corazón desbocado.
--No he querido decir eso --declaró.
--Es justo lo que has hecho desde que nos reencontramos. Maldita sea --dijo desesperado-- pensé que comprenderías que entre nosotros había un amor para toda la vida. Quería tener hijos, nietos, envejecer juntos.

Estella se dió cuenta de que Siwon utilizó el tiempo pasado todo el tiempo. Lo miró con una sensación terrible de que esa era la última vez que lo vería.

Intento calmarse. Siwon volvió a sujetar el pomo de la puerta y si se iba esta vez sería para siempre y no estaba segura de querer eso.

--Siwon, escúchame. Debes escucharme. No te desprecio. Jamás te he despreciado. Te amo, Siwon.

--No lo suficiente. --La expresión de enojo de Siwon fue reemplazada por una de infinita tristeza.-- No me amas lo suficiente como para haber hablado conmigo antes de haberte ido así, preferiste cortar todo de tajo en lugar de arreglar nuestra situación.
--No fue así. --Él no sabía el dolor que había sufrido. . . --¿Que podía hacer? ¡Me pediste que nos separaramos!
--Tuvimos algo y luego perdimos, y aún no logro entender por qué.

Estella tenía un nudo en la garganta que le impedía hablar, su suposiciones habían sido falsas. Siwon nunca le había sido infiel, sin embargo no era una alegría descubrirlo por que Siwon la estaba dejando y está vez definitivamente.

--¿Sabes por que me esforzaba tanto en la firma? Tú eras mi motor, quería darte todo, que nada te faltará y también para demostrarle a mi padre que podía hacer lo que quisiera sin su apoyo y lo logre gracias a ti.-- Siwon bajo la vista-- Te he hecho el amor esta mañana.-- cada palabra que decía era como una daga en el corazón de Estella.-- El amor, no sexo. Cada que te hice mía fue por qué te amaba en cuerpo y alma. Te quería toda, te deseaba toda, cada milímetro de tu piel, de tu ser. Habría muerto por ti, lo sabes ¿Verdad?
--Lo sé, lo sé. . .
--Sabes bien como era nuestra relación. No podíamos pasar el día uno sin el otro, y nos deseábamos desesperadamente.-- estaba cansado de hablar. --Adios Estella. Firmaré los documentos así que envíalos de nuevo con tu abogado.

Su corazón se detuvo y su móvil timbró. Fue en ese momento en que ella regreso a mirar la pantalla que Siwon abrió la puerta y desapareció tras ella.

Se quedó inmóvil sujetando el pomo de la puerta. ¿Que podía decirle para que regresará? Ni siquiera podía pensar con claridad mucho menos pensar en un discurso convincente.

Había llamado a Anna.
--He cometido el peor error de mi vida . Ahora si, creo que nunca más volverá a buscarme.
--Todo irá bien. Ya lo verás. Lo superarás.-- le dice consolandola, pero extrañamente, no sentía ganas de llorar.
--Estaba equivocada.
--Ah. . . Estella.
--Todo ha ido de mal en peor, no se ni cómo, pero ya es demasiado tarde.
--¿No es posible que recapacite?-- preguntó Anna esperanzada-- a veces los hombres reflexionan y cambian de parecer.
--Pero él no ha hecho nada malo, él me ha dado muchas oportunidades y yo las he rechazado todas.
--Pero si te ama. . . Inténtalo una vez más.
Estella agitó la cabeza de lado a lado.
--No lo conoces. Cuando toma una decisión sobre algo, no cambia de parecer.-- escuchó suspirar a su amiga del otro lado de la línea.

Había perdido a Siwon.

Los días pasaron lentos. Trabajaba más de lo normal para llegar a casa y dormir, dormir y trabajar era lo único que hacía en su vida.

Esa mañana era fría, le pareció que más de lo normal, le llegaban los sonidos del tránsito a pesar de ser tan temprano. Le dolía el cuello, se sentía agotada pero a pesar de eso decidió caminar hasta su estudio.

Desde el otro lado de la acera Siwon la miraba sin animarse a acercarse a ella. Encendió el auto y se pudo en marcha.

Cuando llego a casa, se quito los zapatos y encendió la pequeña lámpara en la mesilla al lado del sillón. Se daría un baño con agua tibia, luego una taza de chocolate y a dormir.

No había podido comer bien desde que vio a Siwon por última vez, luego de bañarse decidió prepararse un par de tostadas para acompañar la leche con chocolate. Cuando terminaba de comer su móvil timbró.

Su corazón dió un vuelco. ¿Sería Siwon?

--¿Si? --respondió con timidez al percatarse del número.
--Soy yo, Siwon.

Al llegar a casa esa mañana se dió cuenta de que las luces estaban encendidas, lo cual era extraño por la ahjuma se encargaba de apagar todo. Tal vez de quedó dormida. Pensó. Lo cual no era extraño debido a su avanzada edad. Esa mujer había sido como una madre para él cuando su madre lo abandonó en casa de su padre.
Aparcó el auto, saco su equipaje de la cajuela.

Luego de dejarlas maletas en su habitación, apagó las luces exteriores de la casa y busco a la ahjuma, había traído algo para ella de su viaje a China.

Llamó a la puerta y no obtuvo respuesta. Abrió con mucho cuidado.
--Ahjuma. . . --la mujer yacía sobre su cama, inamovible.-- ahjuma. . .

Reviso el pulso de la mujer, colocando un par de dedos sobre su cuello, su pulso era débil.

La cargó en vilo hasta su auto para llevarla al hospital.