El dia del Apocalipsis

Capítulo 8

Corro. No se ha donde ir, no se que hacer. Debí haberme quedado con Oscar y los demás, ahora estoy solo.

No salgo de la escuela, ni por todo el oro del mundo lo haría, hay sangre en la entrada y las afueras parecen el mismísimo infierno, espero y lo que suceda en la calle no llegué a entrar al edificio donde me encuentro.

Camino hacia el patio ya que el pasillo se ha quedado sin electricidad y no puedo ver nada, de por si uso lentes y me ciegan la vista aún mas, debe ser una broma.

Me siento en medio del patio grande, siempre quise hacerlo, que no hubiera personas mirando mientras lo hacia, esas personas que salieron a la calle sin saber lo que sucedía y que la mayoria ya debe de estar muerta.

La escuela esta vacía, o eso supongo, no se ve movimiento por ningún lado, ni se oye nada, solo estamos yo y el viento.

¿Sera esto el fin del mundo? Me preguntó a mi mismo. No puedo comprender que sucede, debo buscar a personas que aún sigan en el colegio para unirme a ellas y estar mas seguro. Como dicen: dos cabezas piensan mejor que una.

Cuando estoy apunto de levantarme una mano toca mi hombro y mi instinto mismo me impulsa a soltar un fuerte golpe. Que idiota soy.

Veo a Fausto rerorciendose en el suelo a causa del duro golpe que le di.

Fausto es de estatura baja y complexión llenita, por lo que mi golpe debió haberle dado justo en la panza.

Intento ayudarlo pero me avienta con la mano y apenas con la fuerza que tiene.

-Fausto lo siento no te vi, no quería hacerlo, yo...-.

-Ya callate-.

Después de unos 5 minutos agonizando por fin es capaz de moverse, con una velocidad lenta, pero por fortuna lo hace.

-¿Ya puedes caminar?- le digo, aunque se que no es así.

-Ya...creo...  eres un idiota-.

No contestó y ni digo nada porque es cierto. Encuentro a un sobreviviente en buenas condiciones y que es lo primero que hago, le suelto un puñetazo que lo jode por completo, que plan mas inteligente.

Lo ayudo a caminar, mientras pienso que hacer, a donde ir y a quién buscar.