POLAROID ·ARISTEMO·

15

Aristóteles buscaba como cubrir los golpes para que su madre y el resto de la familia no los vieran y comenzaron con las preguntas. Después de que Temo se marchara Audifaz llegó y le dijo que cenaría en casa de su tia Blanca.

Ari intentó negarse pero con una sola mirada de su padre, entendió que no tenía opción, y que él sería el tema a tratar.

El rizado llego a casa de su tía con su hermano en brazos, sus padres ya estaban ahí, al igual que el resto de la familia. Todos se sorprendieron al ver los golpes en su rostro, Polita fue la primera en reaccionar y acercarse a su hijo. No entendía cómo es que ella no había notado los golpes antes.

-¿Y esos golpes?.-Preguntó Polita tomando al pequeño Arquímedes en sus brazos.-Por la tarde no los tenías.

Aristóteles miró a su padre sin saber qué responder, pero antes de que alguien más hablara Julieta apareció frente a él.

La mujer hizo una mueca al ver el rostro de su primo político, imaginaba lo que pudo haber pasado, ya que Audifaz había enviado un mensaje al grupo familiar diciendo que necesitaba ayuda de su familia para "Corregir el camino de su hijo".

Julieta se acercó al rizado y lo abrazo.

-Robert y yo te apoyamos, mantente tranquilo.-Dijo en voz baja.

Aristóteles solo asintió y respondió el abrazo, miró a su madre y rogó porque su familia no fuera tan dura con el.

-Está claro que esta reunión no es para convivir en familia.-Se escuchó la voz imponente de Audifaz.-Si les pedí que nos reunieramos fue para que ayuden a buscar una solución. Mi Aris tiene malas compañías.

Toda la familia miró con preocupación al adolescente, imaginando lo peor.

-¿Qué quieres decir con eso, esposito?.

-Que nuestro hijo está conviviendo con personas desviadas, su nuevo amigo, el Cuauhtémoc ese, es gay y por eso el Ari trae esos golpes.

-¿Te peleaste con tu amigo porque es gay?.-Preguntó su prima Linda confundida.

-Ojala hubiera sido así-Respondió Audifaz.-Aristóteles se peleó con otro muchacho por defender al anormal de Cuauhtémoc.

-¡Deja de llamarlo anormal!.-Habló Aristóteles mirando a su padre con molestia.-Que sea gay no tiene nada de malo.

-¿A no? ¿Entonces porque lo insultaron? ¿Porque te golpearon por ser su amigo?.

Aristóteles no respondió, realmente no sabía porque la sociedad era así.

-Porque son personas que no saben lo que es el respeto.-Hablo Julieta.-Aris no hizo nada malo todo lo contrario.

-Julieta voy a pedirte que no te metas en esto.-Hablo Imelda, la mayor de todos los Córcega.-Este es un tema familiar.

-Abuela, Julieta es mi esposa. Así que es parte de la familia.-Intervino Robert.-Y yo estoy de acuerdo con ella.

-Pues yo apoyo a Audifaz, ser gay está en contra de lo establecido, en contra de las buenas costumbres.-La anciana miró a su nieto con molestia.

-Conosco a Temo, no parece un mal chico.-Respondió Robert.

-Pues lo es, por que mi Aris no era así antes de conocerlo. No se metía en problemas, no peleaba y menos me alzaba la voz.

Aristóteles estaba que no aguantaba su enojo, no soportaba que hablaran así de Temo, como si el chico no valiera nada, cuando lo valia todo.

Julieta se percató de la molestia del rizado, lo tomó de la mano para darle apoyo y tratar de calmarlo.