Capitulo 11: Nuestra Primera Cita

900 48 7
                                    

Despacio Minho se adentró en mi departamento cerrando la puerta con su mano derecha, mientras que con la izquierda me tenía sujeta por la espalda. Detuvo su intenso beso, nuestras narices apenas se tocaban, me miraba fijamente a los ojos. En su mirada podía sentir tristeza y nerviosismo, me sentía tan mal, él no estaba disfrutando de este momento.

TuNombre: - Sin dejar de ver a Minho y forzando una pequeña sonrisa - No tienes que hacer esta Minho, en serio. Verte así me destroza el corazón, por favor... - Una lagrima cae por mi mejilla izquierda. - Por favor, detente. No quiero obligarte a hacer algo que no quieras.

Minho no dijo nada solo cerro sus ojos, me abrazo fuertemente y dejo caer su cuerpo junto con el mío al piso del apartamento. Yo caí de rodillas frente a él, y Minho se sentó con las piernas abiertas, las rodillas flexionadas hacia arriba y su espalda apoyada en la puerta. Me atrajo más hacia su cuerpo. Mi cara quedo recostada de su pecho, mientras que él tenía su barbilla suavemente colocada sobre mi cabeza.

Minho: - Susurrando - ¿Cómo es que sabes que decir en los peores momentos?

TuNombre: - Agarrando con fuerza su camisa - Minho, dime ¿qué es lo que TU realmente quieres?

Minho: Es difícil de explicar.

TuNombre: Explícamelo, yo intentare comprenderlo.

Minho: - Suspirando - Mi corazón me dice que permanezca a tu lado, pero mi orgullo dice que te olvide. Tengo muchos años que no he estado con una mujer, porque pensé que eran traicioneras y mentirosas. Y con los hombres todo era fácil y sin compromisos. Odio esto, yo solo quiero a alguien que me entienda, que no me mienta y disfrute los pequeños pero bellos momentos a mi lado.

TuNombre: - Suspirando de alivio. - No es algo tan difícil de entender Minho. Es algo que todas las personas esperan encontrar en sus vidas. Y eso es amor.

Minho: - Sonriendo de lado - Creo que hemos leído demasiadas novelas románticas.

TuNombre: - Riendo - Tal vez. Usted sí que sabe cambiar de tema.

Ambos reímos sin dejar de abrazarnos. Me sentía tan a gusto estando con él de esa manera, su abrazo me daba protección y cariño. Parecía que ninguno de los dos quería romper este momento, me gusta escuchar a Minho sobre sus sentimientos y que es lo que desea.

TuNombre: Sabes... Puedo escuchar y sentir los latidos de tu corazón. - Sonriendo tiernamente. -

Minho: - Sonrojado. - Eso quiere decir que tengo una excelente condición física.

TuNombre: Estoy feliz. Quisiera quedarme así toda la noche. - Cerrando mis ojos. -

Minho: - Tomándote por la barbilla para alzar tu cara y verte a los ojos. - Yo también estoy disfrutando esto, pero me encuentro cansado. Quisiera dormir. Pero no quiero estar solo hoy.

¡Dios mío, ayúdame! Su sinceridad me volverá loca. Me acerque lentamente a sus labios y le di un tierno beso. Al separarme baje mi cabeza, ya que me sentía un poco avergonzada por lo que le iba a pedir...

TuNombre: Duerme conmigo.

Minho: - Sorprendido. - No quiero ser una molestia...

TuNombre: No lo eres, y nunca lo serás para mí. Yo tampoco quiero estar sola hoy. No voy a obligarte a tener... - Con la cara caliente y sonrojada. - A te-tener r-relaciones conmigo! Solo quiero dormir junto a ti! Mi cama es lo suficiente grande para nosotros dos.

Minho: - Acariciando tu cabello. - De acuerdo pequeña. Ven, te ayudare.

Minho se levantó de primero, me ofreció su mano para que yo pudiera pararme. Sin soltar su mano lo guie hasta mi habitación. Al entrar no comento ni dijo nada, solo se quitó la chaqueta y los zapatos, antes de sentarse en la cama, yo levante las cobijas y me senté del lado izquierdo de la cama. Ambos nos miramos, y teníamos nuestras mejillas coloradas. Era la primera vez que dormía con un hombre en mi propia habitación.

Orientacion Sexual (Choi Minho y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora