Nos volveremos a ver ¿Cierto?

"La conservare"

- Su majestad y su alteza, ya hemos llegado.- Decía un sirviente abriendo la puerta del carruaje, ayudando al castaño a bajar.- El rey Terra y la reina Aqua están en la sala del trono.

Sora acompañado de Vanitas entraron al castillo dirigiéndose donde deberían estar sus padres.

- ¡Mama, papa!- Decía el pequeño corriendo a su dirección.

- ¡Sora!- Menciono una joven mujer de pelos y ojos azules, recibiendo con los brazos abiertos al niño.

- Te hemos estado buscando- Decía un chico de igual edad que la anterior, con pelos castaños y ojos azules.- ¿Donde estabas?

- Estaba con Riku.

- ¿Quien es el?- Dijo la mujer

- Es mi amigo.

- Así que te hiciste un amigo he?

- Si- Decía alegre.

- Hablando en de amigos, te esperan en el jardín. - Menciono el castaño mayor.

- En serio? entonces ya me voy. Chau.

Sora se dirigía a un jardín lleno de bellas plantas y grandes arboles. En uno de ellos, se encontraba un gran perro que dormía con un ratón negro y blanco por el rostro, y un pato blanco con ropas azules.

- Mickey, Donal, Goofie, estoy aquí-. Decía el pequeño.

El perro se levanto y se lanzo bruscamente al castaño causando que esté se cayera, para luego lamerle la cara. El ratón se le subió al hombro y el lo acaricio. "Cuac","Cuac"- Decía el pato picoteando los pies a Sora.

- Au! Donal, eso duele- se quejaba con el pato.

- Haha- Reía dulcemente una voz femenina.

- Xion!, ¿De que te ríes?- Pregunto.

- De nada.- Respondió la niña de pelo corto, de un color negro azulado de ojos de igual color del niño.

- ¿Que haces aquí?

- Mi mama me dijo que me fuera a pasear por el reino, te vi y vine a saludarte.

- ¿Porque dijo que te pasearas?

- Por que la estaba molestando en su trabajo.

- Ya veo. Oye ¿Quieres jugar algo?

- Claro, pero ¿que?

- No se, mm...- Pensaba- Ha! Ya se! Juguemos a la mancha, Goofie y los demás juegan.

- Buena idea.

Ambos empezaron a jugar junto al perro y los demás animales.

En un momento la madre de Xion apareció.

- Xion, que haces molestando al príncipe Sora. Lo siento su alteza por mi hija.

- No se disculpe, señora, yo invite a jugar a Xion, ella no estaba molestando.

- Oh, su alteza siento haberme equivocado.

- No se preocupe, todos cometemos errores.

- Gracias su alteza. Xion! Ven aquí. Adiós.

- Chau- Se despidió la pelinegra.

- Bye.

El castaño hizo lo mismo que hicieron las anteriores, se dirigía a su habitación para ir a dormir, seguía cansado, aunque durmió durante todo el viaje. En el camino se encontró con varias personas y el las saludaba.

- Su alteza, ¿A donde se dirige?- Cuestiono un sirviente.

- A mi habitación a dormir.- Respondió.

- Oh, espere que llamo a los demás sirvientes para cambiarle.

- Claro, esta bien.

Luego de unos minutos aparecieron mas personas y le pucieron un pijama mas elegante y cara que el que tenía puesto.

- Su alteza,  ¿Quiere usted quedarse con esta ropa?- Pregunto una mucama.

- Si, démela, la conservare.

- Esta bien, tome su alteza, que descanse bien.

- Gracias.