Academia Fiore

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- hoy, estoy muy feliz de tener la oportunidad de recibirlos a todos ustedes en esta academia- anunció el director. Habían muchos estudiantes sentados en el auditorio que lo recibieron con ovaciones- espero que todos se lleven bien a pesar de encontrarse en diferentes divisiones.

Lucy sonrió al saber que la persona que estaba encargada de la academia era ni más ni menos que el rey, Thoma. E. Fiore. Aunque si ella lo pensaba mejor, tenía sentido ya que la institución se llamaba Academia Fiore.

Si era sincera, como se encontraban en Álvarez, se esperaba más de sus viejos enemigos, lo que no fue el caso.

Aunque le parecía algo idiota lo de las divisiones. ¿Para qué faccionar una escuela en magia, espada, artes y ciencias cuando de todas formas los alumnos aprenderán todo ello? Entendía que había especializaciones, pero seguía sin verle sentido.

En medio de todo, cuatro estudiantes subieron al escenario.

- no puedo creer que Jellal-sama y Erza-sama sean prefectos durante tres años consecutivos- comentó un muchacho con asombro.

- es cierto, aunque es obvio. Después de todo, son como un par de prodigios!~- murmuró otra voz.

- qué envidia, ambos tan perfectos y aún así están comprometidos el uno con el otro- gruñó alguien haciendo pucheros.

- tú solamente lo dices porque quieres conseguir novio pronto...

- aunque es sorprendente, no? Erza-san logró ser la única mujer en ser prefecta...

- tienes razón! Estar parada junto a Rufus-sama, Jellal-sama y Zeref-sama debe ser admirable!

A la rubia no le asombraba quiénes estaban parados ante la mirada del resto, después de todo, los conocía de su vida pasada, y con los comentarios que hacían los ingresantes, pudo confirmar que sus "yo" de este mundo, no eran muy diferentes, en su mayoría, igual de monstruosamente inhumanos con sus habilidades:

Erza Scarlett, la prefecta de la división de espadas. Con perfectas posturas de ataque y defensa. Además de ser una muy responsable y noble persona, indicada para representar a los combatientes de armadura pesada y de gran poder ofensivo.

Rufus Lohr, el prefecto de la división de las artes. Carismático y extravagante, con grandes dotes desarrollados en tanto el ámbito musical como el de la poesía. Reproducía la maestría de las interacciones sociales que causaba su facción.

Zeref Dragneel, el prefecto de la división de las ciencias, alguien tranquilo y con una memoria envidiable, además de una capacidad de razonamiento monstruosa. Nadie mejor para manifestar la grandeza de la inteligencia.

Jellal Fernandes, el prefecto de la división de magia. Con una gran capacidad para manejar diferentes tipos de magias elementales y un gran respeto hacia todos por igual, él sin dudas simbolizaba la clase mágica por excelencia.

- antes que nada, queremos darle la bienvenida a todos ustedes, independiente de a qué división pertenecen. Espero que enorgullezcan a esta academia y no manchen su nombre- comenzó a decir Erza con una sonrisa- soy Erza Scarlett, un gusto conocerlos a todos

- Rufus Lord, espero que en mi memoria se guarden maravillosos recuerdos de un año pacífico con todos- hizo una reverencia quitándose su gran sombrero rojo.

A Lucy le pareció injusto que los de la fracción de arte tenían más libertades con su vestimenta; el resto se tenía que satisfacer con un uniforme muy simple compuesto por una camiseta blanca perla, una chaqueta azul oscura y unos pantalones del mismo grises. Era un alivio que todo el diseño tuviese un bordado dorado para hacerlo menos aburrido. Claro que también había que tener en cuenta que las chicas tenían una falda bordo a cuadros.

Reencarné como la villanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora