La noche había llegado más rápido de lo que esperaban, y ambos chicos ya se encontraban allí cuando llego la medianoche, Draco entró al baño primero y espero ahí a Potter. Nadie iba ya a esos baños, habían sido clausurados hace mucho tiempo, pero por alguna razón la cerradura no estaba cerrada como parecía. Espero menos de tres minutos antes de que Potter apareciera, literalmente, dentro del cubiculo donde él estaba.
-Tardaste.-Bromea Draco, sentado en el cubiculo totalmente vacio. Harry se agacha junto a él y toma su mano, se sentía tibia y comoda en la suya, como si estas encajaran perfectamente. Una atisbo de sonrisa se le escapo al rubio, quien intentaba contener el aliento para que su compañero no notará el revoltijo que tenía en su interior.
Besa sus labios de un modo tierno y protector, levanta apenas a Draco para lograr que él quede sentado en su regazo, apoya su cabeza contra la pared y le sonríe. Es jodidamente lindo y tierno, cuando quiere. Acaricía su mejilla y vuelve a besarlo.
-Te extrañe...-Susurra Harry en su oído.
-No lo parecía, la pequeña comadreja parecía complacerse con tu toqueteo.
-¿Celoso, Malfoy?-Pregunta el chico de gafas sintiendose culpable, sabe que quiere a Ginny y será difícil olvidarse de ella.
-Quizás un poco, Potter.-
Harry ríe y lo besa con más intensidad, bajando su mano desde la mejilla hasta su pecho. Draco gime involuntariamente provocando la sonrisa de su pareja, quien sigue con su dulce toque hasta alcanzar los pantalones del rubio. Baja la cremallera y los pantalones tanto como puede, para descubrir el boxer negro y rojo que cubre la parte más preciada del rubio. Muerde su labio inferior mientras acaricia su miembro con la llema de los dedos sobre la tela, volviendo loco a Draco.
-Harry...-Gime en sus labios, este no se resiste y vuelve a morderlo, mientras introduce su mano dentro de los boxers que antes tanteo. Nota que esta erecto, a causa de él y sus suaves toques, y vuelve a sonreír. Acaricía la zona de arriba hacía abajo repetidas y lentas veces.-Dios santo, Harry...-Quiere pedirle que lo haga más rápido, esta enloqueciendolo, pero no puede hablar. Potter acelera sus movimientos y luego se detiene bruscamente.-Te gusta jugar conmigo ¿Verdad?-Pregunta él otro molesto.
-¿Qué comes que adivinas?-
Harry se quita su propia ropa al tiempo que desnuda a Malfoy, dejandolo parado contra la pared. Muerde su cuello mientras continúa masajeando el miembro de a quien ya ha nombrado como "Su chico" y luego lo voltea, comienza a introducir sus dedos en él antes de comenzar a llenarlo con fuerza y placer.
-Mmm, Harry...-Solamente puede murmurar el rubio, lleno de placer. Mientras se introduce en él no deja de morder su cuello y masajearlo, lo que produce que se venga rápidamente producto del triple placer obtenido. Harry lo hace al mismo al tiempo.
Ambos se recuestan el suelo, aún sin vestirse y se sonríen. Draco besa los labios del otro chico, viendolo tan frágil y con su rostro tierno, le resulta imposible imaginarlo como la misma persona que ha actuando tan salvaje los ultimos minutos. Se visten rápido y vuelven a recostarse, Draco sobre el pecho de Harry.
-¿Puedo preguntarte algo?-Cuestiona tomando su mano.
-Claro.
-¿Qué sientes por Ginny?-Harry se sintió algo incomodo ante la pregunta, pero sabía que debía ser sincero con él.
-No la amo como antes y estoy seguro de ello, pero me gusta pasar tiempo a su lado, es decir, tanto como con Ron y Hermione ¿Entiendes? Es una buena amiga.-Draco asiente.-Pero ella no lo sabe, esa es la diferencia.-Ambos sueltan unas pequeñas risas y deciden que ya es tiempo de separarse, cada uno debe volver a su recamara antes de que los vean.
