Capítulo IXX

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 En cuanto vió a Malfoy desaparecer un miedo abrazador cubrió a Harry, como un invierno que llega de pronto y sin aviso la idea de perder a Malfoy fue estremecedora. Se quedo varios minutos mirando al punto exacto por donde él había desaparecido, ahora vacío. No lloro esa vez, solamente se quedo parado y quieto, observando la nada. 

  El árbol de roble que tantas veces había sido testigo de sus besos estaba marchito, a pesar de que el otoño aún no había llegado. Se sentó debajo y comprendió que él estaba tan marchito como el árbol, deshojándose por dentro y sufriendo la perdida. 

   Ron y Hermione lo encontraron varias horas después, durmiendo en la misma posición que cuando había llegado allí. 

-No puedo seguir viéndolo así.-Comentó Hermione.

-Deberíamos ayudarlo...-

-No hay modo.-

-Sí, lo hay.-Aseguro Ron.-Obliviate.-Le recordó.

-¡No le borraremos la memoría, Weasley! No lo merece, es decir, él tiene que superarlo a su manera, ¿Qué si nosotros peleamos? ¿Te borrarás la memoría también? 

-Lo siento solo fue una idea.

  Hermione se tranquilizo.

-Aunque está destrozado, quizás lo ayudaría ¿No?-Pensó ella mirandolo con temor.-No quiero hacerlo, pero serviría ¿Crees que lo entenderá? 

-No va a enterarse, lo juro.-

    Hermione asintió con la cabeza y se dirigieron hasta el cuarto de su amigo, con el tiempo ella había logrado perfeccionar su hechizo, así que sabía exactamente que quería borrar de la memoría de su mejor amigo. Cerró los ojos.

-Créeme que lo siento, Harry.-Susurró antes de apuntarlo con su varita.-Obliviate...-

   El hechizo salió disparado y ella se arrojó a los brazos de su novio, desconsolada. No podía creer que lo había hecho, era algo cruel y sin sentido.

-Hey, chicos.-Escucharon cuando estaban a punto de irse.-¿Vamos a tomar algo?-Ambos lo miraron y forzaron una sonrisa.

-Claro.

-Oh ¿Iban a pasar un rato juntos? Adelante, iré a buscar a Ginny.

-No, está bien, podemos ir los cuatro.-Propuso Ron.-Eres nuestro mejor amigo, Harry, y siempre somos los tres. 

  El chico de anteojos sonrío, acordaron encontrarse en las tres escobas una vez que él encontrará a Ginny.  

 Ron y Hermione tenían una sola certeza: Nada volvería a ser lo mismo. Y si algo salía mal debían hacerse resposables. 

 -Las personas buenas aveces hacen cosas malas en busca del bien.-Había dicho Hermione, y aunque no entendió que quiso decir, Ron asintió. 

  Harry camino por los pasillos irradiando una alegría que hace tiempo no se veía, saludaba a todos en los pasillos, y cuando paso por el comedor en busca de la pequeña Weasley se llevó una sorpresa al ver a Draco con novia, no menciono nada ni miro mucho, pero una absurda sensación que no logró comprender emergió de su pecho.

-No debí comer tanto.-Se dijo, diviso a su novia en la mesa junto con Malfoy y se acerco extrañado. Podría jurar que casi no la había notado allí segundos antes, lo cual era raro, por que él siempre notaba a su hermosa novia.

-Ginny ¿Qué haces aquí?

-Estaba por contarle algunas cosas a tu... Novia, Potter.

-¿Cosas?-Pregunto extrañado.-Hasta donde yo sé aún no tuve tiempo de hacer una maldad que compensas con una mentira, pero adelante, saca tu mejor material...-Draco lo miro, había algo extraño en él.-Como sea, Ginny, Hermione y Ron nos esperan, bebe. ¿Vienes?

-Sí, claro, luego... Quizás luego me cuentes.-Le dijo descortez al rubio, quien sonrío. 

  Harry comenzó a pensar en algo, cualquier cosa, que pudiera haber hecho para que Draco lo mirará de ese modo tan acusador, sin bien siempre habían sido acerrimos enemigos ese año habían estado tranquilos, si se ponía a pensar casi no se habían visto... O eso creía. 

-Te veo mejor ¿Qué sucedió? 

-¿Estuve mal?-Ginny se detuvo.

-¿De qué hablas? No has dejado de verte mal las últimas semanas.

-¿De verdad?-

-Por dios, ¿Sucede algo contigo? Es que tú... 

-No, estoy bien, vamos...-

  Harry no recordaba haber sufrido ningún tipo de mal, pero su mente estaba confusa, temía haberse embriagado y olvidado todo, pero no estaba seguro tampoco de ello. Jamás se embriagaba.

 Encontró a sus amigos sentados en una mesa en las tres escobas, el clima se veía algo tensos, ellos apenas si se miraban. Harry no entendía que podía suceder, pero por otro lado, sus peleas eran demasiado frecuentes como para preocuparse por ello. 

-¿Paso algo?-Cuestiono Ginny tomando asiento.

-Nada.-Respondió Ron.

-De hecho sí, hay algo.-

-¿Qué?

-Podrías decirle a tu madre que ha críado a un maldito pervertido mira-culos.

-¿Te ha mirado el culo?-Pregunto Harry sin entender el enojo de su amiga.

-No, se lo miró a cada bruja desde el castillo hasta aquí, imaginate, como su novia eso fue muy bello de ver.

-Eres un idiota, Ron.-Le dijo riendo.

-Esto de ser padre me ha pegado mal...-Su hermana lo miro.-Es broma, yo no hice nada, no estaba mirando, solo miraba el suelo y ella comenzó a fantasear.

-Chicos, cálmense, Hermione no creo que él hiciera nada, esta vez.-

   La conversación se extendió mucho, todos querían aprovechar a ese Harry sonriente que habían traido de vuelta. A pesar de saber que habían estado mal sus amigos descubrieron que la única causa de todos sus males eran sus recuerdos con el rubio, aunque había una cosa segura, podrían borrarlo de su mente, pero no de su corazón. Tarde o temprano, volvería a enamorarse de él.

 * * * * * * * 

¡Hola hermosuras! Tanto tiempo, pido mil disculpas por no haber subido antes, me siento muy mal... Es que estuve con algunos problemitas personales, ya saben, 15 años, la edad en que todo se empieza a dar vuelta xD Igual voy a intentar escribir un poquito más antes de irme a dormir para subir mañana.

 Espero que quede al menos algún lector, besitos ♥

Cerca de ti (Drarry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora