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- ¡Auch! -Yoongi se quito sus lentes después de quejarse, por accidente se había mordido la lengua-. Que idiota.

Jimin soltó una pequeña risa al escuchar aquello, de nueva cuenta se encontraban en las clases exclusivas que Jimin le daba para que pudiera tener una mejor pronunciación, y claro Yoongi estaba haciendo un buen trabajo sin tener el lápiz entre sus dientes, y ahora se había mordido la lengua.

- No pegues mucho la lengua o eso sucederá -Jimin se sentía feliz al estar de nuevo a solas con su querido futuro novio.

- No es divertido, odio este idioma...

- No lo odies, es hermoso y más por como lo pronuncias tú, chérie.

Yoongi aparto la mirada, no le gustaba que aquel chico hiciera que sintiera demasiadas cosas en su interior, de alguna manera estaba comenzando a sentir calidez y se sentía feliz al estar con Jimin, y la verdad no le gustaba para nada sentir aquello.

- Chérie -Jimin cerro el libro que tenía en sus manos-, estaba pensando, ya que tu pronunciación está mejorando, podemos celebrarlo ¿qué te parece?

- No, porque no he mejorado para nada -Yoongi evito la mirada de Jimin.

- Claro que mejoraste, ahora puedo entenderte mucho mejor, soy una grandioso maestro.

Yoongi iba a tomar sus lentes de nuevo para ponérselos, pero Jimin se los arrebato de las manos, el pálido odiaba que ese chico le arrebatara sus propias cosas con demasiada confianza y es que ya era así todo el tiempo, cuando iba por el a su facultada, lo primero que hacía era quitarle su mochila para cargarla y además de eso mirar en los topers para ver lo que podía comerse.

- Dame mis lentes, Jimin.

- No hasta que aceptes, quiero ir a almorzar contigo, pero no a nuestra cafetería, ni que tu prepares deliciosa comida, por cierto, ¡me encantaría comer algo más preparado por tus hermosas manos! Eres un grandioso cocinero.

Eso hizo que Yoongi sintiera sus mejillas calientes, era curioso, no se avergonzaba cuando alguien más le daba halagos por la comida que preparaba, pero con aquel que ahora se encontraba sentado a su lado, era muy distinto, se sentía nervioso, además de que no podía evitar sonrojarse al instante.

- N-no quiero ir a almorzar contigo a ninguna parte.

- Por favor, chérie -Jimin coloco sus palmas juntas mientras miraba a Yoongi con unos ojos tan suplicantes, que hacían que Yoongi quisiera decirle que iría solamente si dejaba de mirarlo de esa manera-. Prometo no robarte un beso.

- ¿Qué? -Yoongi se aparto un poco-. ¿Eso es lo que planeabas hacer?

- Siempre eres distraído, solo un poco, puedo aprovechar y hacerlo -Jimin le dedico una sonrisa.

- Ni creas que te dejaré, estaré más al tanto de tus acciones, Park.

- Pero, ¿aceptas salir conmigo? ¿Sí? ¡Por favor!

Aunque Yoongi quisiera negarse, no lo hizo, ni siquiera sabía el por qué de sus labios había salido una respuesta afirmativa de inmediato.

BLEU  ||JimSu||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora