Mi Angel.

Cap. 2 incendio

Al dia siguiente camila despertó por el tormentoso sonido del despertador, se cambio con lo primero que encontró, y bajo a desayunar. Pero al ver esa casa vacia, sin vida salió sin comer nada.

Era temprano aun para entrar a la escuela, entonces decidió ir nuevamente al puente. Esas calles eran familiares, miles de veces las había caminado, pero nunca antes se había puesto a pensar en que cada detalle de las casas o de la misma calle, le traía un recuerdo distinto, recuerdos en donde aun era feliz.

…...

Camila y laura habían salido de la escuela, era el cumpleaños de su madre, y aun eran chicas para tener dinero propio, entonces no sabían que regalarle, hasta que se les ocurrió arrancar una rosa, del rosedal de la vecina. Una vieja loca, que adoraba mas que a nada y a nadie a sus rosas.

Cuando la señora se dio cuenta de la falta de una de sus rosas, las niñas comenzaron a correr, divertidas gritaban y se reian. Felices de tener un regalo para su madre entraron a su casa, en donde las fotos familiares estaban en cada rincón, las paredes eran de color verde agua, se podía oler una rica comida cacera que venia de la cocina, donde su madre todos los días le preparaba el desayuno antes de ir a la escuela.

……….

Miro la hora, ya era momento de ir a la escuela, sin ningún entusiasmo se dirigió hacia allá. Antes de empezar el camino se coloco los auriculares en sus oídos, para no escuchar los usuales comentarios de los estudiantes de su escuela.

En la puerta la esperaba jazmin con otra chica, un poco mas pequeña de edad.

-          Hola cami.- dijieron las dos al mismo tiempo. 

-          Hola susy, hola jaz.

Las tres entraron a la escuela sin decir una sola palabra. Camila caminaba escuchando su música tormentosa para los demás, pero para ella era la mejor.

Un chico alto rubio, se acerca a ella. Se saca los auriculares para escuchar lo que seguramente le dirá.

-          Me entere que fuiste a la fiesta de jazmin.

-          Si.

-          ¿y cómo te fue?

-          No se, después de que Sali de su casa a los 20 minutos que había entrado, fui al rio a tratarme de suicidar, cosa que como vez no logre, porque un estupido bombero me salvo, y además me explico que no tiene profundidad el rio, entonces con tirarme del puente no voy a conseguir nada.

-          Tan mal no te fue, podia haber sido peor.- solamente el podría bromear con la historia del casi suicidio de camila.

-          Lo mismo le dije al bombero, tuve días peores. Pensé que ibas a ir.

-          A último momento me arrepentí, decidi quedarme en casa escuchando música con tomas.

-          Me abrieses avisado, no fue muy lindo estar en esa casa sola después de cinco meses que no iba.

-          Lo se camila, pero no tuve el valor de pisar esa casa, como tu dices, yo también hace cinco meses que no voy.

-          Si ya se.

-          Bueno nos vemos después.

-          Dale.

Camila era ella misma estando con carlos, ese chico rubio mucho mas alto que ella que conocía hace menos de tres años, pero sabia o entendía al menos la mitad del dolor que camila tenía en su interior.