ᴛ ᴇ ᴀ ᴄ ʜ ᴇ ʀ // ᴇ ᴍ ɪ ʟ ɪ ᴀ ᴄ ᴏ

ᴛ ʀ ᴇ s

ᴠᴏᴛᴇɴ ʏ ᴄᴏᴍᴇɴᴛᴇɴ ^^

EMILIO

El timbre suena y salgo a paso tranquilo de la sala de teatro para ir a clase. Cuando llego encuentro al fastidioso grupo de chiquillas hormonales hablando y-

Esperen.

Veo que el asiento de Joaquín esta vacío y que su mochila no está.

¿Se fue?.

Ruedo los ojos divertido y cuando todos los demás alumnos llegan sin esperar más empiezo la clase con un solo nombre en la cabeza.

Joaquín Bondoni.

El chico es interesante, tiene un caracter fuerte y no teme alzar el menton frente a quien sea. Mi tipo.

Pongo el ejercicio correspondiente en el pizarrón, lo explico y dejo dos hojas de ejercicios como tarea justo cuando suena el timbre que finaliza las clases.

JOAQUÍN

-Entonces lo que me estás diciendo es, tu nuevo maestro y tu tienen algún tipo de tensión y es el primer día que se ven... ¿es eso?- pregunta Nikolas.

-¡No! B-bueno algo así- respondo medio frustrado.
-Es un idiota con todas las letras ¡y en mayusculas!, lo odio.

-¿El primer día?.

-Si... ¿El primer día? - cuestiona una tercera voz.
Yo volteo rápidamente al reconocer esa voz y Nikolas se va corriendo a una de las esquinas de la habitación.

-¿Pero qué...?- miro confundido a Niko y luego al maestro Emilio que se encuentra parado en la puerta de la habitación.

-Hola Bondoni- me saluda- y, hola hermanito- saluda mirando al idiota de Nikolas.

Yo lo miro con un tic en el ojo y me levanto para caminar hacia el a paso lento. -¿Hermanito?- cuestiono mirandolo incrédulo.

-B-bueno, verás- tartamudea buscando algo coherente que decir.

-Somos hijos de la misma madre pero de diferentes padres, por eso tenemos apellidos distintos- hablo el maestro.

Inhala y exhala Joaquín.

-¡LLEVO CASI UNA MALDITA HORA HABLANDOTE MAL DE EL, DE LO LINDO QUE ME PARECIO Y DE QUE TAMBIÉN LO ODIO Y RESULTA QUE ES TU HERMANO DE PARTE DE MADRE! ¡LLEVAMOS CINCO AÑOS DE MEJORES AMIGO Y NI SIQUIERA SABIA QUE TENÍAS UN HERMANO!.
-grite enojado cayendo en la realidad de lo que dije después.

De lo lindo que parece.

Mierda.

Niko me miro divertido y Emilio me miro con una ceja alzada, yo rode los ojos para disimular la vergüenza y mire al estúpido de mi amigo.

-¿Porque me lo ocultaste, idiota?- pregunte más calmado- ni siquiera sabia que tuvieras un hermano.

-Es que... Te conozco y si te decía que me estabas hablando de mi hermano te avergonzarias mucho. Y pues nunca te hable de el porque no lo creía necesario, además el vivía en Estados Unidos, volvió hace unas semanas por la propuesta de trabajo de la escuela.

Yo lo mire a el y luego mire a Emilio, volví a ver a Niko y luego a Emilio otra vez.

Joder, no se parecen ni madres.

Le doy una patada a Niko en la rodilla y el cae al suelo.
-idiota- le digo y luego dejo un beso en su frente, tomo mi mochila y le dedico una última mirada a Emilio quien me mira burlon antes de volver a salir por la ventana y caer de culo en seco.

-¡Puta madre!- grito enojado más por el revoltijo de sentimeintos no identificados que por el dolor.

Odio todo.

Odio a Niko.

Odio al maestro Emilio.

Odio la vida.

¡Odio todo!.

Que mierda.

Suspiro frustrado por decima cuerta vez en el día y me pongo mis audífonos con HeartBeat sonando a todo volumen.

Camino a mi casa que no queda muy lejos a paso lento y sin prisa.
Justo ahora mi cabeza es un revoltijo de ideas, estar tranquilo y sin sentir nada durante mis dieciséis años de vida y que luego llegue un extraño que resultó ser hermano de mi mejor amigo y me llene de confuciones, es... Estresante.

Cuando porfin llego a mi casa entro y como casi siempre:

No hay nadie.

Encuentro una notita en la mesa del comedor con la hermosa caligrafía de mi madre.

Hijo, tu padre y yo tuvimos que viajar a Estados Unidos de imprevisto por trabajo, te deje dinero en efectivo para que pidas algo de comer y te agregue más dinero a tu cuenta de banco, cuidate. Te amamos.

-Mamá y Papá.

Suelto un suspiro y hago bolita la notita para luego tirarla.

Siempre es lo mismo.

Normalmente esos viajes duran semanas, lo más que han durado es mes y medio.
¿Soy raro, cierto? Cualquier chico de mi edad hubiera chillado de felicidad por quedarse solo por tanto tiempo.

Paro yo no soy cualquiera.

Subo a mi habitación y me dejo caer en mi cama, me arrastro hasta alcanzar el control de los parlantes que estan colgados en la pared y los enciendo, los conecto por bluethoo con mi teléfono y pongo mi lista de reproducción para ocaciones en las que no se que hacer con mi vida.

Wraking ball, bad romance y 2U.

En esas tres canciones se basa mi playlist y su original nombre es: sal a la herida.

¿Cool, no?.
Recapitulemos toda esta mierda de situación con canciones sad de fondo.

Entro un nuevo maestro llamado Emilio Osorio, es lindo, tonto y creo que un poco creído.
Es hermano de mi mejor amigo y... con solo un día me puso nervioso incontables veces, a mi ¡a la piedra Joaquín Bondoni!.

¡Esto es inaudito!.

Frunzo mi ceño y subo más la música, me muerdo el labio y hago una pataleta que me tumba de culo al suelo.

-¡PUTO MAESTRO DE MIERDA!.- grito.

no, si el Joaquín bien orgulloso y Emilio engreído. Osi osi.

Bueno... Me inspiro de manera magnífica para actualizar esto, osi osi uwu.
Espero que si les esté gustando.

Las ama,
Jinwang💆