En el año 1692 no importaba que tan bueno fueras, si eras excéntrico, impertinente o simplemente... si eras mujer terminarías en la hoguera considerada una bruja. Pero Bastet Krentz no tenía que fingirlo, ¡ella era una bruja! y después de ser exp...
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Eros no sonreía tanto como Bastet, él sabía que lo que había hecho estaba mal, pero también sabía que podía hacer algo más para salvar el Bosque perdido de "Los protectores de la realidad" Así que cuando la sala se quedó vacía solamente esperaron a Merlín quien platicaba con los Jueces brujos sobre lo que había ocurrido.
—Deja pegar al suelo con la punta del pie, me pones más nerviosa. —susurró Bastet al notarlo impaciente.
—Fuiste muy valiente a retar a los Jueces, nadie se había atrevido antes. —le dijo en tono serio.
—Ellos no pueden hacerme nada, ya te lo dije, saben que seré la hechicera maestra, no se atreven a castigar a la única que puede salvar el Bosque. —Y al terminar de decirlo Merlín se alejó de los jueces brujos quienes desaparecieron con un rostro sereno.
—vaya juicio ¿he? —preguntó sonriente.
— ¡vaya barba, diría yo! —gritó Bastet y Merlín asintió.
—Si bueno... este año cumpliré varios miles de siglos, a veces la gente confía más en mi versión joven, pero este es mi verdadero rostro.
—Ya basta Merlín, ¿Cuál será mi castigo?— Soltó Eros inquieto y Merlín y Bastet dejaron de sonreír.
— ¿Tu castigo? Ninguno.
— ¿Cómo que ninguno? ¡Estoy dispuesto a afrontarlo!
—Eros... mi querido Eros, tu eres un caso especial, el futuro hará muchas cosas... pero, por ahora te diré lo que harás, regresarás a la cabaña con Bastet, le mostrarás muchos conjuros y hechizos y aprenderán de ambos, se relajarán y en tres días los espero en mi refugio para yo mismo casarlos.
—No estoy entendiendo nada...— replicó Eros y Merlín sonrió peinando su barba.
— ¿Qué tan difícil puede ser? Escuchen, a veces quisiéramos tener más de una vida para solucionar todos los males del mundo, pero como ya les dije... el que estén ustedes unidos en matrimonio es todo lo que importa, me encantaría explicarles las razones pero créanme cuando les digo que ustedes son de vital importancia para el mundo de la magia, y quien sabe... tal vez más adelante algunas de sus preguntas tengan respuesta y no especialmente de mí. —Merlín caminó dándoles la espalda y se giró sonriente.
—Por cierto, Bastet linda... llega antes de los tres días para tu purificación, hay un ritual antes de la unión, también tu Eros.
Ambos se quedaron pensando sin decir nada, en silencio Eros abrió un portal a las afueras de la cabaña y entraron, el ambiente era diferente, no sabían cómo actuar, Bastet tampoco podía creer que hubiera retado a los Jueces y tampoco que siempre sí se casaría en tres días.
— ¿Estás bien?— preguntó Eros interrumpiendo sus pensamientos.
—Pensé que te condenarían, sabía que querrían encerrarte, era la única forma de no matarte, me estaba haciendo a la idea de tener que vivir sin ti mientras tú estaban en prisión, no pensé que Merlín nos salvaría.