Resumen: Dónde Eddie está confundido por su orientación sexual.
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De nuevo ahí estaba esa sensación de no saber quién es, de no saber cómo se sentía realmente; quería llorar y patalear para saber qué era lo que realmente sentía en su corazón, que quería. Llevaba mucho tiempo con ese sentimiento, se sentía confundido ¿pero de qué? No lo entendía y por más que lo intentaba...no llegaba a ningún lado.
Es por eso que comenzó a investigar mucho sobre este tema y se dió cuenta que estaba confundido y no en el sentido de que si tenía sentimientos o no, estaba confundida por su orientación sexual ¿como podía estarlo si ya tenía en claro que era heterosexual? Ya tenía dieciocho años, ya debería saber qué es lo que realmente quería; pero tal parece que estar mucho tiempo junto a su mejor amigo, le había afectado el cerebro y sus emociones.
Pues cada vez que lo veía sentía mil mariposas en su estómago, no, unos millones de elefantes que hacían temblar su pancita y eso era extraño porque Richie Tozier es un chico no una chica, debería de haber puesto sus ojos en Beverly y no en un bocazas cuatro ojos que solo se la pasaba hablando puras tonterías y...ah, no sabía que pensar en ese momento.
Todas sus emociones estaban revueltas y no sabía cómo resolverlo pronto, no quería contarselo a alguien más por miedo a que se burlaran de él y lo tacharan de extraño y anormal. Pero sentía que si no sacaba esto pronto...se iba a volver un mar de emociones próximamente.
—Estoy aquí, ¿qué necesitas?—llamó a su gran amigo Bill, ellos se tenían mucha confianza así que no dudó en decirle lo que le pasaba. Eddie sabía que él no lo iba a juzgar, al contrario, lo podía aconsejar.
—Necesito tu ayuda—susurró, estaba avergonzado pero no podía echarse para atrás, ya estaban aquí ¿que podría perder?
—Sí, ví tu mensaje, aquí estoy—lo dijo con calma, tampoco lo iba a presionar para que le dijera lo que tenía. Había mucho tiempo se sobra.
—Tú, ¿que se siente estar enamorado de un hombre?—el silencio reino el lugar, Bill lo miró por varios segundos sin saber que decir, eso no se lo había esperado para nada. Denbrough pensó que tal vez Eddie necesitaba ayuda con algo de tarea o con alguna chica pero nunca se imaginó que podría ser esto lo que a Eddie le estaba molestando.
—Bueno...no es como si fuera algo especial, solo lo sientes y ya, son cosas difíciles de explicar Eds pero que sin duda alguna son realmente hermosas. El amor es algo magnífico si te enamoras de la persona correcta, ya sea hombre o mujer, es lindo sentir esa sensación de nervios cuando ves a la persona que te gusta—suspiró y por un momento pensó en su novio—o pensar todo el día en ella…
—Oh, puedo entender eso—murmuró—¿como te diste cuenta que eres gay?
—Mm, fue cuando entramos a secundaria, sentía algo muy extraño en mí porque siempre pensé que los chicos eran guapos, y las chicas no eran de mi agrado, pero sobre todo; porque me empezó a gustar Stanley. Mi mente siempre estaba trabajando duro pensando en si era gay o no, me la pasaba despierto por horas para poder llegar a esa conclusión pero era imposible. Veía videos sobre la homosexualidad, cortometrajes para poder aclarar mis dudas pero el único que lo hizo fue Stan y siempre fue él, me quedó más que claro que soy gay cuando él se declaró bisexual tan solo un año después. Luego de eso empezamos a salir.
—Fue muy duro—Bill asintió—yo estoy confundido Bill, no sé lo que quiero, no sé qué me gusta, no sé si soy gay o hetero; quiero aclarar dudas de una vez pero no puedo.
—¡Yo puedo ayudarte niño bonito!—Eddie y Bill gritaron del susto cuando de la nada, Richie Tozier apareció, Eddie lo miro fulminante y con las mejillas rojas de la vergüenza.
