✔️ESPADA AZUL | DEVIL MAY CRY 6

CAPITULO 25

Nero.

A duras penas, me recuesto en el sofá adolorido.

—Nico. —logro articular mientras recupero las fuerzas— ¿Podrías buscarme unos zapatos o algo?

—Tengo tus botas de repuesto. —responde mientras busca entre las mallas de la parte delantera de la van.

El sujeto que me ayudo a entrar, me observa pensativo, aunque por un momento se me hizo algo familiar, descarto la idea, nunca lo había visto antes.

—¿Y cuál es tu nombre? —pregunto al sentir sus ojos fijos en mí. Parece pensarlo, pero luego torna su mirada a una muy seria y niega con la cabeza.

Lo observo extrañado.

Nico regresa y me entrega unas botas que hace mucho había dejado de ponerme «Así que aún me quedan, supongo que no he crecido desde entonces»

Las recibo mientras que el sujeto sale de la van sin decir nada. Lo observo de reojo «¿Quién es?»

Al instante ingresan Lady, Trish y una chica morena.

—¿Y Kyrie? —pregunto regresando la vista en Nico.

—Está con Morrison en el local de Dante, por el momento no hay barcos para que regrese, así que tendrás que esperar para verla—. Suspira. Luce cansada y a la vez, aliviada.

—Con una llamada será suficiente. —indico levantándome del sofá en búsqueda del teléfono.

—Nero, te buscaré algo de ropa. Ahora regreso. —Lady se marcha de la van sin esperar mi respuesta. Marco el teléfono del local de Dante. El número lo tenía Nico en una de sus libretas. Yo nunca lo busque.

Marco y espero a que respondan.

—¿Devil May Cry?

—Hola Morrison, soy Nero. —trato de sonar tranquilo.

—¿Nero? —suspira— Estupendo, muchacho, estábamos muy preocupados por ti.

—Sí, lo sé... Lo siento.

—Descuida, lo importante es que regresaste con nosotros.

—Les debo una. Por cierto, ¿puedo hablar con Kyrie?

—Claro muchacho, ahora te la paso—. oigo que la nombra.

—¡Nero! —responde sollozando— ¿Estás bien? Te extrañé mucho.

—Sí, Kyrie, yo también. — cierro los ojos— Te contaré más cuando regreses. Todo está bien, eso creo.

—Está bien, Nero, hablaremos pronto, solo trata de descansar... en cuanto, algún barco esté disponible volveré a casa.

—Esperaré.

—Te quiero, Nero.

—Yo también te quiero Kyrie. —respondo como último y cuelgo el teléfono.

«Todo está bien»

A momento, siento unas nauseas muy intensas y sin más, corro al baño y termino empujando a Nico que estaba distraída.

—¡Pero ¿qué demonios?! — logro oír detrás de la puerta.

—Nero ¿estás bien? —pregunta Trish. Siento un hormigueo muy intenso en el cuerpo, ni siquiera me puedo sostener bien. Observo el líquido y noto la sangre con algo verde en ella. Mi cerebro no lo procesa y de nuevo termino expulsando más líquido sin poder sostenerme.

«¿Pero ¿qué es esto?»

Percibo la mano de Trish en mi espalda.

—Tranquilo, te sostendré.