Un último abrazo

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Estaba relajándome en mi casa, había terminado todo el trabajo por lo que al menos tendría dos días libres.

Esa relajación no duro nada, mi teléfono comenzó a sonar, lo ignoré, sea lo que fuera podía esperar hasta mañana. Sonaba y se cortaba, volvía a sonar. Al final termine tomándolo, era Hyukjae.

-Al fin contestas- me dijo exaltado.
-¿Estaba relajándome? ¿Qué es lo que quieres?- creí que no me había escuchado, se tardo mucho en contestarme. Estaba a punto de repetir mi pregunta.
-Cometimos un terrible error- unos sollozos se escucharon, creo que sonaban desde el inicio pero los había ignorado.
-Habla claro, no te entiendo.
-¿Estas en tu casa?
-Sí, por...
-Vamos para haya.

Colgó. En ese momento no sabía lo que estaba pasando, llegaron al cabo de 20 minutos. Hyukjae se miraba nervioso... Donghae estaba ido, solo se movía porque Hyukjae lo llevaba de la mano.

-¿Vas a explicarme qué paso? ¿Qué tiene Donghae? ¿Por qué me...
-Donghae mató a alguien. Ayer por la noche, estábamos robando una cafetería y... no sé qué pasó, el arma estaba cargada...
-Tranquilízate, déjame preparar un poco de té.

Habíamos planeado el robo, teníamos las armas. Solo había una que no nos pertenecía. Kyuhyun llego unas horas antes de que saliéramos y nos pidió que le prestáramos una de las nuestras a cambio el nos dejaría su pequeña pistola. No le vimos problema ni le preguntamos por qué solo aceptamos. Pero si había un problema: el arma estaba cargada. Ninguno de los dos la revisó, así que en la noche la llevamos sin imaginar lo peor.
Antes de entrar nos cubrimos media cara con unos pañuelos. Cada uno tenía un arma.
Entramos como siempre, todos se tiraron al suelo y se escondieron bajo las mesas. Joder, todo estaba bien hasta ese momento.
Mientras hacíamos que uno de los meseros se pusiera de pie un hombre se levanto y corrió a la salida... no sé por qué Donghae presionó el gatillo, pero lo hizo. Desgraciadamente lo hizo. El hombre cayó.
Tu no viste su cara Henry, fue peor que cuando le disparó a su madre, porque esta vez le disparó a alguien inocente. Su cara... su rostro estaba lleno de arrepentimiento y miedo.
Se bajo el pañuelo, parecía asustado, asustado de lo que acababa de hacer. Asustado de si mismo.
Me quite el pañuelo también, él ya se lo había quitado, ya no me importaba el robo, solo me importaba él, me puse a su lado. Lo tomé de la cara y lo gire para que me viera a mí. Pero su vista seguía fija en el cadaver así que me puse delante de él para que dejara de verlo, le dije que todo estaba bien. Lo tomé de la mano y salimos de allí.
El problema es que ahora nos están buscando.
Nos buscan por asesinato. Robo a mano armada y no sé qué mas.

Hyukjae se hecho a llorar, me dolía verlos así, verlos así y saber que no podía hacer nada. No podía ayudarlos aunque quisiera.

Cuando llegamos a casa Donghae se puso a llorar, no podía calmarlo y duele. Duele verlo así. Quiero ver su sonrisa no su cara de arrepentimiento. Se supone que esto no tenía que pasar así.
No pude hacer nada más que abrazarlo y mentirle diciéndole que todo estaría bien. Mi mentira duro mucho menos de lo que creí. Alguien le dio las placas del auto a la policía. Tenían la casa rodeada, pero logramos salir.
Esperamos a que amaneciera en un callejón, nos cubrimos con unas cajas, cuando por fin se fueron. Cuando deje de escuchar sus pasos no nos movimos. Tenia miedo. Miedo por mi y por Donghae. Luego de no sé cuánto tiempo estar así te llamé. Henry por favor, haz algo.

¿Qué se supone que podía hacer? Pensé durante mucho tiempo. El edificio. Ese último que había comprado y aún no había inaugurado.

-Escúchame. Hace unos meses compre un edificio y aún no lo he inaugurado. Los llevaré y se ocultaran ¿de acuerdo? Es todo lo que puedo hacer.
-Gracias Henry- me dijo Hyukjae, su rostro realmente lo denotaba. Odiaba eso. Se supone que deberíamos estar planeando una boda pero estábamos planeando como ocultarlos de la policía.
-Henry- Donghae que hasta ese momento se había mantenido callado me miro. Se soltó de Donghae y se sentó a mi lado. Estaba llorando.- Tu sabes que lo hice sin querer ¿verdad? Yo no quería.- siguió diciendo cosas así entre llantos, con si cara hundida en mi pecho, me estaba abrazando con mucha fuerza, como si en el fondo hubiera sabido que sería el último.

Lo abracé durante mucho tiempo, lo abracé hasta que sus sollozos pararon. Con una mirada le dije a Hyukjae que se acercara. Los tres nos abrazamos durante mucho tiempo. Donghae estaba en medio de ambos, yo lo abrazaba desde el frente y Hyukjae desde atrás.

-Los amo- dije. Hasta ese momento no me había dado cuenta que estaba llorando. Tenía tanto miedo de lo que pudiera pasarles.

No contestaron. Solo hicieron más fuerte el abrazo, Donghae sollozó de nuevo en mi pecho. Esa fue su respuesta a lo que les dije.

Nosotros también te amamos Henry. Me gritaron eso sin abrir sus labios.

Un gesto valió más que todas las palabras del mundo en ese momento. Le di un beso en la cabeza a Donghae y uno en la mejilla a Hyukjae. A los hombres que les debía la vida.

Lee Donghae y Lee Hyukjae. Las personas que mas he amado. Los hombres que me rescataron de la calle, los que me dieron un hogar, un futuro. Los que me dieron amor y una familia. No podía permitirme perderlos.

¿Por qué tuve que ser un cobarde ese día?

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