Contraluz

Take Me Home.

Wrapped up, so consumed by all this hurt
If you ask me, don't know where to start
Anger, love, confusion
Roads that go nowhere
I know there's somewhere better
'Cause you always take me there

– A ver. Repetimos: Compraste dos trozos de tarta, las metiste en tu nevera y esperaste a que apareciera Ana ¿Es una especie de sexting gastronómico? 

– ¡Ricky!

– Déjala en paz, Ricky– advirtió Pablo– Además, le ha funcionado.

– No si a mí el método me parece fantasioso, de haberlo sabido lo hubiese usado contigo cuando empezamos a conocernos. Me hubiera ahorrado las horas que perdí buscando buena iluminación y buenos ángulos para las nudes que te pasaba. Era solo meter una tarta de chocolate a la nevera y te tendría a mis pies. 

– No, soy más de tu método, guapo– dijo guiñandole un ojo.

– ¿Qué tiene de malo la tarta de limón?

– Nada, Mimi. No tiene nada de malo, pero podrías usar ahora ya otros métodos para comunicarte con ella. 

– ¿Tarta de manzana?– preguntó con sorna.

– Más avanzados, amiga.

– ¿Nudes?– la rubia se sobresaltó casi incorporándose– No, nudes no.

– Miriam Doblas, que voy a sugerirte yo que le mandes nudes si apenas la miras a la cara.

– La he besado– susurró Mimi.

– ¿Qué? ¡Hubieses empezado por ese detalle, amiga! Por fiiin, joder. Que la tensión la sentía yo desde aquí.

– ¿Os liasteis?– preguntó Pablo sorprendido.

– No, no...fue un beso y…

– Detalles.

– Cuando estaban por salir de mi casa…

– ¿Estaban?

– Ella e Indi– explicó– Bueno, cuando estaba en mi portal le di un beso así rápido, me despedí de Indi y cerré la puerta.

– Ah– dijo Pablo con resignación.

– ¿Hice mal?

– No, Mimi– Ricky cogió su mano con cariño– No hiciste nada mal y estamos muy orgullosos de que hayas decidido hablar con Ana y tratar de explicarle lo que pasó la noche de la cena. 

– Sí, Mimi. Y mírate ¡La has besado!

– Y luego cerré la puerta, Pablo.

– ¡Pero la besaste! Y en esta casa se celebran todos los avances que hagas. Por ejemplo, el día que folles, cerramos toda la puta calle y bebemos hasta que no nos acordemos ni de cuál casa es la nuestra.

– ¡Pablo! No la presiones, joder.

– Bueno, eh. Tampoco me trateis como si no sé...que no pudieseis bromear acerca de sexo conmigo...que no lo haga hace más de un año no significa que se me olvide lo que es o que…

– Mimi, no. Perdóname si te he hecho sentir eso, de verdad. Es que sé todo lo que sucedió, cuanto te cuesta cada pasito que das y bueno, la otra vez corriste, esta vez le cerraste la puerta...puede que la siguiente ya logres hablarle luego.

– Parezco una tonta ¿no?

– No, ni lo pareces ni lo eres. Te han pasado y te pasan cosas, tienes un recelo totalmente justificado en cuanto a personas, interacciones y relaciones. Eres todo menos tonta.