Love By Chance: TinXCan La Historia de Amor Continúa.

Capítulo 6. Cara A Cara

Caminó por los pasillos del área internacional, pero estos se encontraban llenos de personas, algunos con pulcros uniformes, el calzado que portaban era por demás el mejor que pudo haber visto, las chicas eran hermosas adornando su belleza con accesorios.

Algunos estaban en grupos, no sabía exactamente qué hacían, quizá hacían la tarea, o tal vez sólo pasaban el tiempo.

La apariencia de Can, sus zapatos de bajo costo, su aspecto desaliñado, sus expresiones de niño, en conjunto, todo indicaba que Can no pertenecía a este lugar, sin embargo Can portaba un balón que era por mucho uno de los más caros que cualquier chico aficionado podía aspirar a tener en sus manos.

Pero Can lo obtuvo gracias a Tin, no sabía las intenciones de Tin al comprar este objeto, pero le fue de mucha ayuda para que los demás chicos no lo viese de la mala manera.

Pensó que no podría evitar las miradas por ser un chico del programa Thai, y fue así, pero no por ser del programa Thai, sino por el objeto que probaba en sus manos, y es que un balón con tales distintivos no pasó desapercibido por los chicos del área internacional.

En todos los rincones, donde más personas, habían, creyó haberlo visto, pero no habían señales de Tin. Cuando se dio por vencido y se disponía a regresar, una figura familiar caminó muy cerca de él.

-¿Tin? -Can exclamó -¡Tin espera!

*

Una voz familiar le hizo detenerse, esta voz era imposible de confundir. Unos pocos segundos se transformaron en varios minutos en los cuales Tin decidió si detenerse o nó.

Lo que sea que Can le dijese no podía hacerlo en frente a los tontos y entrometidos del área internacional, caminó más despacio obligando a Can a seguirlo hasta afuera de los salones de práctica.

-¡Tin! -Can volvió a exclamar -¡Detente!

En ese momento los pies de Tin temblaron y se helaron, realmente no quería encontrarse con Can, en el fondo sabía que Pete tenía que ver en esto.

De pronto una mano le tomó por el hombro obligándolo a volver.

-¡Tin te estoy hablando! -La voz fuerte de Can se hizo notar lo que provocó que Tin volteara la mirada.

Al ver a Can sintió cosas muy diferentes, por una parte la rabia le estaba consumiendo ¿Por qué Can tomó el atrevimiento de buscarlo?

-¿Qué quieres? -Los ojos filosos de Tin se centraron en los de Can provocando que este se sorojara.

-Necesitamos hablar -Can con la mirada al suelo dejó escapar una pequeña voz.

-Creí que ya lo habías dicho todo -La misma expresión que Tin mostraba al comienzo, esa misma expresión hacía que Can sintiera miedo, además que Tin lograba con éxito que Can se sintiera inferior -Lo que sea que tengas que decir dilo de una vez.

En el fondo Can no sabía como comenzar, no sabía que palabras utilizar para hacer que Tin pudiera sentirse mejor.

-¡Eh Tin! -Can subió la mirada en un acto repentino y con determinación se dirigió a Tin quien aún le miraba serio -¡Perdóname!

De todo lo que pudo decir, de tantas palabras, tantas formas para que hacer que Tin lo odiara más, para hacer que Tin se alejara y terminar con tal situación, Can eligió las palabras más dolorosas que Tin pudiera escuchar de parte de alguien.

-¿Qué necesitas que te perdone? -Tin hizo una mueca y se acercó a Can.

-¡Huuum! -Can frotó sus manos en su cabeza y su respiración se tensó -Estoy haciendo esto desde lo más sincero de mí y tú lo haces todo más difícil.