CAPÍTULO 11: ¿Amigas?

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¿Un estofado? ¿o quizás pollo horneado con verduras?. ¿Qué podría apetecerle comer a Neji?. La joven castaña andaba pensativa por los puestos del mercado sin saber por donde empezar, pues , a pesar de estar al lado de Neji por tanto tiempo no sabía con exactitud que comida era más de su agrado.
Más allá, a unos cuantos metros de donde se encontraba, se escuchaba el bullicio de la gente que comentaba entusiasmada de algo que ella le restaba importancia, todo aquel alboroto no fue suficiente para sacarle de sus pensamientos, ni siquiera el grupo de niños que casi la empujan por correr con prisa a dirección del tumulto.

La joven noble dentro del palenquin no entendía el por qué de tanto alboroto fuera, pues no sabía con exactitud lo que podía provocar con su presencia en Konoha. Los aldeanos apenas se dieron cuenta de su llegada corrieron a darle la bienvenida aunque ella no les podía ver, podía oir y sentir la alegría de la gente ante su llegada.

- Seiji-san- llamó a quien le resguardaba desde afuera.

- Hai, Aiko-sama

- ¿La gente de Konoha suele ser así cuando viene algún extranjero?

- Si supiera que hace unas semanas atrás, por la llegada de su padre, organizaron una gran fiesta en su honor .

La joven se quedó maravillada, y en medio de una sonrisa imaginó lo agradable que sería su vida en Konoha.

- Quisiera conocer la aldea...

- Me encargaré que lo haga, conocerá cada rincón de Konoha mi Lady.

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- ¿Dónde está Neji?- preguntó Kakashi al líder de los Hyuga quien le acompañaba, junto a dos de sus consejeros, en el salón donde recibirían a la hija del Señor Feudal.

- Salió a entrenar muy temprano- contestó Hiashi con los ojos cerrados, sintiendo culpa.

- ¿A entrenar?... me enteré de que salió herido de su entrenamiento con los anbu ayer.

- Neji no solamente llama entrenar al esfuerzo físico, sino también a la meditación. Ha de estar en medio de las montañas trabajando en ello.

- Cierto...- Kakashi calló unos segundos, volteó la mirada hacia Hiashi y pregunto -¿No le has dicho que ella vendría hoy?- Kakashi no espero respuesta pues ya lo imaginaba, no podía evitar también sentir culpa por poner en tal situación a uno de los mejores ninjas y más queridos subordinados. - Ya lo imaginaba, de cualquier forma se enterara pronto.

- ¡Hokage sama, ya está aquí! - gritó un ninja joven quien vigilaba la entrada. Fue entonces donde abrieron las grandes puertas de aquel salón y entro la joven extranjera acompañada solo de sus doncellas, dando una reverencia a los mayores dentro y buscando entre ellos la figura de quien se suponía sería su futuro esposo, con las características que su padre le había contado; un joven alto, de tez clara y ojos perla, de actitud sería pero sereno, de bellas facciones e imponente figura. Busco más allá de quienes estaban a su frente y no lo encontró, sintiéndose decepcionada pero sin dejarlo entre ver en sus acciones. Conservó la cordura y saludó con suma educación y los hombres frente a ella correspondieron.
Ya terminada la reunión, Aiko, un tanto deprimida por no haber conocido a su prometido, hizo recordar a Seiji de su promesa de hacerle conocer la aldea para olvidar el desplante que Neji le había hecho sin siquiera conocerle. Sus doncellas acomodaron sus pertenencias en la habitación que le habían asignado y ella se cambio de ropa a otra menos ostentosa, para así no llamar la atención.
Ambos jóvenes salieron, topandose con mucha gente que no la reconocía, lo que les provocó satisfacción.

- Aiko sama, ¿está segura de esto?

La muchacha lo miró y sonrió - Ya no me llames de esa manera tan formal, solamente dime Aiko sino la gente sospechara de quien soy.

Sin Darme Cuenta (NEJIxTENTEN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora