CAPÍTULO 9: Te amo

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Los rayos del sol empezaban a asomarse a través de las cortinas, entrando como delgadas líneas luminosas que se proyectaban en la habitación. Los pajarillos empezaban a emitir sus melodiosos sonidos mañaneros evocando el inicio del día y la aldea ya se preparaba para recibirlo.

Tenten aún dormía profundamente sola en su habitación, y como era habitual en ella, ocupaba toda la cama con su delgado cuerpo, estirando las piernas y los brazos cubriendo la mayor parte de la superficie dejando poco espacio para alguien más. La costumbre le hizo despertar, pues ya se había adaptado a su rutina de siempre.

Sin aún abrir los ojos que aún estaban perezosos, se sentó a duras penas con la mente en blanco, como lo hacía casi siempre al despertar. De un momento a otro los recuerdos de anoche comenzaron a llegar a su cabeza repentinamente cayéndole como un baldazo de agua fría.
Abrió los ojos enseguida conteniendo todo el aire que tenía en los pulmones sintiendo que ya no volvería a respirar, su mirada parecía desorbitada y perdida, su piel se volvió pálida cuando al fin pudo recordar todo, cada detalle . Ella y Neji habían hecho el amor.

No supo como reaccionar, se quedó helada en la cama sintiendo erizada su piel, sintiendo muchas sensaciones sin saber cómo enfrentarlas, no podía asimilar el hecho que había pasado la noche con su mejor amigo.

Cuando al fin pudo salir de aquel trance que no le hacía pensar más que en lo que había ocurrido, miró al otro lado de la cama sintiendo por primera vez la ausencia del Hyuga, lo que le hizo suponer que ya se había marchado.
Sintió alivio por no encontralo ahi, pero a la vez sintió desilución pues no entendía cuál fue la razón por la que ya no estaba después de lo que sucedió entre ambos. Aunque por una parte habría sido lo mejor no toparse con él porque no sabría como reaccionar.

Se dispuso a ponerse de pie, lo que le provocó un pequeño dolor en su intimidad cuando recargó todo su peso sobre sus piernas, recordando así que había sido su primera experiencia sexual. Alzó la sábana de la cama para cubrirse su cuerpo desnudo y notó una pequeña mancha rojiza en medio de la cama, lo que le provocó que las mejillas se le encendieran. Sintió vergüenza pensando en que quizá Neji ya lo había notado, movió la cabeza negando y lo cubrió rápidamente para ya no verlo pues sentía mucha pena, aunque estaba segura que no sólo fue ella quien tuvo su primera vez. Miro hacia todos lados tratando de buscar algo de lo que no estaba segura, la ansiedad le carcomia el cuerpo y más aún por no saber el motivo de la ausencia de Neji, miles de preguntas comenzaban a rondar su cabeza sin poder encontrar respuesta a ninguna, no entendía el por que se fue sin decir nada, tal vez se arrepentía y ya no quería verla más, o tal vez ya no recordaba nada de lo paso ya que había bebido. Ya no sabía que pensar.

Se dirigió al baño para asearse encontrando en la puerta, que permanecia cerrada, un bolso que no era de ella, lo reconoció en ese mismo instante dándose cuenta que se trataba del bolso de Neji con el que había ido a la misión. Pensó que tal vez se lo había olvidado y decidió que lo buscaría luego para entregárselo y pedirle, tal vez, una explicación.
Cuando estuvo a punto de recogerlo del piso, la puerta del baño empezó a abrirse, saliendo de ahi la figura imponente del Hyuga quien la miró y no pudo ocultar su nerviosismo al ver su cuerpo apenas cubierto por unas sabanas. Tenten levantó la vista y se encontró con sus ojos que la contemplaban tímidamente, no pudo ocultar su rubor y desvió la mirada sin saber que decir, ambos estaban encimismados sin saber que hacer, sin saber que decirse después de lo que habían vivido horas atrás.

- Tenten...- susurró apenas sin quitar su mirada - yo...yo...- continuó empezando a tartamudear, hábito que empezaba a tomar relevancia cuando la tenía en frente.

La castaña tragó saliba antes de hablar.
- Pensé que te habías ido...- dijo sin voltear a verlo con los mismos nervios que sentía el Hyuga.

Sin Darme Cuenta (NEJIxTENTEN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora