𝙂 𝙊 𝙇 𝘿 𝙀 𝙉 𝙀 𝙔 𝙀 𝙎

SIETE

Cuando el fuego termino, comenzó una nueva tortura.

Qué esté chico, Garrett me tenía que enseñar cosas que no comprendía.

¿Porqué mataría a personas inocentes?

¿Porqué no podía salir a la luz del sol pero si estar bajo las nubes?

¿Porqué tenía que cambiar mi acento solo por su odio a los británicos?

Pero sin duda estaba agradecida con él.

Garrett pasaba por mi casa cuando el olor a sangre lo hizo detenerse, entró por la ventana y encontró a los tipos que destrozaban mi casa, el dinero estaba ahí, ellos tenían armas y los dólares volaban por todas partes.

Él se encargó de ellos, los dreno por completo.
Y me salvó, no pudo hacer nada por mi padre pero mató a quienes nos lastimaron.

Así que tomamos todo el dinero, lo pusimos en una cuenta bancaria a su nombre y nos fuimos.

Me llevo primero al bosque, me explico todo.
Me enseñó a cazar, a elegir a las presas más sencillas.

A caminar entre los humanos, incluso me llevo al carnaval en New Orleans.

Era divertido vivir con él, tiene demasiadas historias que contar, me prometió llevarme a los lugares donde lucho, contarme cómo fue estar en tantas guerras.

Pero nuestra vida ahora no contaba con un límite de tiempo, tenemos la eternidad para viajar y crear nuevas historias. 

Nuestras historias.