Él.
Un famoso acostumbrado a tenerlo todo, vocalista de la banda Motionless In White, acostumbrado a los excesos y sobre todo a tener a cuanta mujer quisiera.
Ella.
Una estilista sin reconocimiento que trabaja para la famosa banda Black Veil Brides...
No puedo decir que me sorprende que Chris y yo lo hiciéramos, la tensión sexual y la atracción están justo ahí, pero si puedo decir que fue mucho mejor de que pude haber imaginado.
No se cuánto tiempo llevo despierta, pero me sobresalté cuándo sentí un brazo en mi cintura, sonreí cuando recordé que Chris estába juntó a mi.
—Buenos putos días —murmuró y besó mi cuello.
—Buenos días —me giré entré en sus brazos, me dio un beso y sonreí en medio de éste.
Pasó bastante rato cuándo decidimos levantarnos, nos bañamos y nos fuimos, al entrar al autobús todos giraron a vernos, me avergonzó eso y bajé la mirada, Chris entrelazó nuestras manos y nos dirigimos a nuestras camas.
Se acercó a mi, puso un mechón de mi cabello detrás de mi oreja y cuándo abrió la boca para decir algo, alguién interrumpió.
—¡AMOR! —se escuchó una voz chillona. Giramos a ver.
—Mierda... —apenas pude escucharlo porque lo dijo muy bajo.
—¿Por qué tienes de la mano a esta puta zorra? —preguntó molesta, me mataba con la mirada la chica
—¿Que mierda haces aquí, Gia?
Por su tono de voz se que está molesto.
Me separé de él y ambos giraron a verme.
—Largate ya zorra, hoy no te pagan.
La miré burlona.
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—Tú no me conoces, ¿Por qué estás haciéndo esto? —pregunté y ella quizo acercarse a mi, pero Chris lo impidió.
—Porque estás de la mano de MI hombre.
¿Pero qué coño?
Giré a ver a Chris y él me miró con pánico, sentí como me dolió el pecho.
—Eso es mentira, déjame explicarte.
Negué y me alejé. Él me tomó de la muñeca. —Alexia déjame explicarte —suplicó. Volví a negar e intenté soltarme.
—¡SUÉLTAME CHRISTOPHER! —maldita sea, ya exploté.
Me miró con sorpresa y yo me giré para irme furiosa de ahí, los chicos intentaron detenerme pero yo sólo bajé del autobús y me dirigí al de BVB.
Cuándo entré el primero en verme fue Andy, se acercó y me abrazó.
—El hijo de puta tiene novia —solté como pude y él sólo me abrazó más fuerte.
Andy no tuvo palabras esta vez.
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