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El chico simplemente lo miró y negó buscando en su cabeza como evitar llorar como un nene. Tony colocó una mano en el hombro del chico dándole apoyo sabía que lo necesitaba estaban todos en la misma situación.

- no me gustaría dejarte solo - confesó el castaño con una mueca
- ¿De qué hablas Tony? - pregunto tratando de sonar divertido - estoy bien aquí - sonrió falso
- arregla tus maletas con lo esencial - ordenó el genio - te irás conmigo - le guiño el ojo

El chico solo le sonrió de labios cellados e hizo lo que amigo mayor le ordenó.

Mientras que la asamblea de los Vengadores estaban James, Rhodey, Pepper y Alex que seguía abrazada a su primo.

- me vas a desgastar - comento divertido el moreno causando una risa en su padre y en la rubia pelirroja

La castaña lo miró indignada pero de todas maneras no lo soltó.

- aquí me vas a tener - le hizo saber - es tu culpa por irte tanto tiempo - reprochó
- bien - le despeinó el cabello - deberíamos subir energías - le sugerio
- es una perfecta idea - habló Pepper bebiendo su café
- no tengo ánimos - hizo una mueca
- esa es la idea boba - le dio un zape a su prima - salir para subir tus pésimos ánimos - hizo un ademán
- James - le reprendió el coronel

Sin dar respuesta fue a su habitación para ponerse algo cómodo para hacer ejercicio, ató su cabello en una coleta y salió para ver a su primo que sonrió al verla.
El se fue a cambiar rápido mientras ella se quedaba en la sala esperándolo, Alex se quedó cercas de la sala donde se encontraba Steve y Natasha que al verla le regalaron una sonrisa pequeña, la castaña regreso el gesto tímida.
Desde la discusión se había distanciado de ellos y cada que sucedía algo los culpaba y se molestaba con ellos, los dos comprendían el malestar y el sufrimiento que llevaba la castaña.

(...)

La castaña había olvidado que tan grande era el terreno de la asamblea y lo que se sentía correr como entrenamiento, vio un árbol cercas y cambio el rumbo hacia el para tirarse de bajo de el.
James al verla soltó una carcajada y trotó hasta donde ella estaba para tomar un descanso, sintieron la tranquilidad un momento la brisa se calmó dando en su rostro.

El silenció se terminó cuando James soltó un quejido a lado de la castaña.

— ¿Todo bien? – pregunto Alex con sus ojos cerrados
— si – sonrió aún que su prima no lo viera – hoy dormirás temprano – le aviso llevando sus brazos detrás de su cabeza
—¿Para que o qué? – se levantó para verlo
— comenzaremos tú entrenamiento mañana temprano – la chica frunció su ceño y abrió su boca lista para reclamar – quiero que tengas más energía y no que estés triste por toda la asamblea – cerró sus ojos para relajarse

Alex bajo su cabeza para ver el verde césped y luego ver aquel cielo azul oscuro, era notorio que el sol ya no brillaba como antes.

Pero aún que el sol ya no brillara ella tenía que seguir su vida, no tendría a su chico ni a sus amigos pero en donde sea que estuvieran ellos la acompañaban en su corazón, tenía que estar bien por su papá, por su mamá y por la nueva integrante de la familia Stark.

Esa pequeña personita debería ver que el mundo no es tan malo y ese sería el deber de Alex, mostrarle todo lo bello del mundo, darle el ejemplo.

— mañana a primera hora nos vemos en el gimnasio – dijo sin mirar a su primo

El moreno sonrió para si mismo y se mantuvo con sus ojos cerrados, tenían que buscar la manera de que regresara la Alex de siempre.

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